Se procedió al retiro, por entrega voluntaria, de un tapir (Tapirus Terrestris), macho de aproximadamente dos años de edad. El mismo estuvo criado durante sus primeros años por la familia Britez quienes rescataron el animal de cazadores furtivos.
Desde la Cartera Productiva y Ambiental, los profesionales de la Dirección de Recursos Naturales y Gestión, que realizaron el traslado el pasado jueves 9, expresaron que el animal "presentaba un buen estado alimentario y sanitario."
Se lo trasladó a la Reserva de Animales Silvestres Guaycolec, donde permanecerá en calidad de semicautiverio. Se trata de un animal, según manifestaciones de quienes lo encontraron, criado desde aproximadamente los dos meses. Es importante aclarar que no puede ser liberado en su ambiente natural por haber perdido la capacidad de sobrevivir en estado salvaje.
El médico veterinario de la Reserva Guaycolec, Ricardo Coronel, expresó que la única relación que tuvo el animal fue con humanos, es por eso que es muy dócil y presentaba un buen cuidado.
"Para nosotros esto es un logro muy importante, porque se trata de una especie que sufrió un severo retroceso numérico y en la reserva se le da todas las condiciones que tiene en el hábitat natural. Además, convive en el recinto con especies con las cuales también comparte en vida natural como ser guazunchos y carpinchos.
Es un animal omnívoro, y cuenta con una dieta seleccionada de zapallos, frutas de estación, entre otros. El recinto está acondicionado con un espejo de agua, una zona limpia y una húmeda", manifestó Coronel.
Cabe resaltar que las personas que asistan a la Reserva podrán disfrutar del animal y conocer la especie a través una charla informativa por parte de los técnicos especializados, como ser la información básica de la biología de la especie y el rol que cumple en la naturaleza.
Se lo trasladó a la Reserva de Animales Silvestres Guaycolec, donde permanecerá en calidad de semicautiverio. Se trata de un animal, según manifestaciones de quienes lo encontraron, criado desde aproximadamente los dos meses. Es importante aclarar que no puede ser liberado en su ambiente natural por haber perdido la capacidad de sobrevivir en estado salvaje.
El médico veterinario de la Reserva Guaycolec, Ricardo Coronel, expresó que la única relación que tuvo el animal fue con humanos, es por eso que es muy dócil y presentaba un buen cuidado.
"Para nosotros esto es un logro muy importante, porque se trata de una especie que sufrió un severo retroceso numérico y en la reserva se le da todas las condiciones que tiene en el hábitat natural. Además, convive en el recinto con especies con las cuales también comparte en vida natural como ser guazunchos y carpinchos.
Es un animal omnívoro, y cuenta con una dieta seleccionada de zapallos, frutas de estación, entre otros. El recinto está acondicionado con un espejo de agua, una zona limpia y una húmeda", manifestó Coronel.
Cabe resaltar que las personas que asistan a la Reserva podrán disfrutar del animal y conocer la especie a través una charla informativa por parte de los técnicos especializados, como ser la información básica de la biología de la especie y el rol que cumple en la naturaleza.