El proyecto bananero apunta a tener en producción quince mil hectáreas.

Se aspira elevar los rendimientos a cuarenta mil kilogramos por hectárea y lograr una banana de más calidad, con el uso de toda la tecnología disponible.

El director del CEDEVA de Misión Tacaaglé, ingeniero Gerardo Tenaglia, refirmó que el objetivo del gobierno de la provincia es crear las condiciones para que se cumplan los presupuestos del Plan Estratégico Formosa 2015 que se orientan a contar con 15.000 hectáreas frente a las poco mas de 4.000 actuales en el marco de un reposicionamiento nacional como productora de una fruta de la mejor calidad y libre de pesticidas.
"Apuntamos a las 40 toneladas por hectárea y con el uso de toda la tecnología disponible va a mejorar en más de un ciento por ciento la calidad de la fruta y nada deberemos envidiarle a la que llega desde Ecuador o Bolivia", consignó.
"Vamos a lograr una banana de más calidad aunque nunca va a tener las dimensiones de las de Ecuador por las características del clima. Pero sí una banana de entre 19 y 20 centímetros, como ya lo están logrando algunos productores, para estar a la altura de Brasil, de Bolivia y de todos los países del continente que actualmente exportan banana a la Argentina y hasta vamos a competir perfectamente con todos ellos", contó.
Tenaglia confía en que se va a lograr un producto de mucho mejor sabor -por el clima regional - y libre de pesticidas, explicando que las condiciones ambientales, habitualmente frías, permite una mayor acumulación de azúcar en las frutas y eso arroja como consecuencia una banana de extraordinario sabor.
Junto con el detalle del sabor, el director del CEDEVA de Tacaaglé dijo que se apuesta fuerte a la presentación de un producto de calidad y estéticamente atractivo para lo cual se perfecciona el trámite de la poscosecha que consiste en no golpear las frutas y lavarlas y usar el cablevía o la empacadora móvil para manejar un producto que se embalará, como la que llega de Ecuador, sin una mínima mancha en su epidermis y con el agregado de que esté libre de pesticidas.
Reconoce que todo este tratamiento de tecnología y genética permite un mejoramiento en los precios ya que comparando con lo que se logra en la actualidad, cuatro a seis pesos como máximo la caja de 22 o 24 kilos y por la banana que viene de Brasil o de Bolivia se está pagando 17 y 18 pesos.
"Vamos a lograr la misma calidad de la banana que viene de afuera porque es totalmente posible y también tenemos que llegar a ese precio", desafía.
Junto con el ingeniero José Villarreal, otro experto en bananas que trabajó nueve años en Bolivia, entrenó durante dos años a diez técnicos que ya tienen los contratos listos con el ministerio de la Producción y Ambiente.
Anuncia que con ese nivel técnico, en abril se los va a comisionar para que cada uno de ellos reúna a diez productores lo que significa contar con 100 demostradores que van a aplicar toda la tecnología disponible en unas 400 hectáreas.
"Mi punta de lanza es que el año que viene esas 400 hectáreas con toda la tecnología que esta desarrollando el CEDEVA y con los técnicos que fueron formados allí y saldrán al campo nos va a permitir llegar al mercado con 400 hectáreas del mejor nivel.
Respecto de lo que ocurrirá con los 700 productores restantes, estima Ten agria que ni bien empiecen a ver como se produce el despegue, se van a acoplar enseguida a la nueva modalidad productiva.
Ante la hipótesis de que los 800 bananeros existentes en la provincia se sumen al proyecto, calcula para el 2015 estará funcionando a pleno la idea que fue incorporada como objetivo de máxima en el plan estratégico Formosa 2015.

Aporte para la empacadora

Tenaglia reconoció el aporte de conceptos esenciales que realizó junto con directivos del PRODECO -Programa de Desarrollo del Centro Oeste- para trabajar de modo articulado con Tecnoga SA para el diseño y fabricación de la empacadora móvil premiada en Expoagro 2009 y que será aplicada al uso por parte de los pequeños productores que no están en condiciones de contar con instalaciones fijas de empaque con piletas de cemento para la limpieza y estatización de las frutas ni tinglados para empacar y embalar como lo exige el mercado mundial y como el año que viene se habilita en Tacaaglé.
"Tuvimos que buscar alternativas y en una de esas recorridas y charlas con la gente de ACORBAT, organismo mundial que entiende en todo lo concerniente al cultivo de plátanos y bananas, así como de Lepaglie, Brasil y otros organismos continentales fueron surgiendo las ideas", relata.
"Como recorremos mucho los lotes, fuimos viendo las necesidades. Observamos que tenemos mucha ventaja por los lotes planos del que carecen otros países y por lo tanto lo tenemos que explotar adecuadamente y al máximo y de ese modo se gestó la idea y comenzó a cobrar cuerpo el proyecto", explicó.
Tenaglia destacó el hecho de que se haya trabajado en equipo.
"Nosotros generamos la idea y la necesidad y le estamos poniendo los conceptos pero la contraparte de la industria metalmecánica hizo lo suyo. Cuando se trabaja de ese modo y con conceptos claros y seriedad los resultados son inmejorables y saltan a la vista", expresó.
"Realmente estamos orgullosos por el hecho de que Formosa se haya hecho acreedora a la medalla de oro y sobre todo porque se convertirá en un gran aporte para los pequeños productores", reconoció.

Pequeño tractor

Al preguntarse más sobre la empacadora, Gerardo Tenaglia lo califica "como un trencito" impulsada por un pequeño tractor de 25 HP al que se le adosó una plataforma y un par de carritos.
Recordó que antes del diseño, había invitado a la gente de Tecnoga y al ingeniero Jorge Churuvija, vicepresidente de la firma, para que recorriesen los lotes por donde deberían circular las empacadoras, por lo cual todos ellos se retiraron la idea clara y concreta de lo que tenían que hacer. "Y salió un trencito espectacular que se mete dentro del bananal y va adonde quiere", pondera.
Destacó aquí las ventajas que ofrece el territorio plano ya que ello facilita la movilidad de la empacadora móvil que facilita el embalaje en el propio lote. "Esa es una ventaja nuestra; aprovechémosla", insistió. Tenaglia también admitió que hay otros proyectos de innovación tecnológica en ciernes, mencionando entre ellos algo que facilite la tarea de fumigación.
"El pequeño productor no tiene una mochila ni puede comprar nada que le salga oneroso y por eso buscamos algo que le resulte accesible y que aun siendo económico permita una extraordinaria aplicación de productos", reveló.
"Es que tenemos un objetivo bien claro. Queremos banana libre de pesticidas lo que significa no herbicidas, no fungicidas, no insecticidas. Pero al fertilizante todavía no se lo puede reemplazar", expresó.
Admitió Tenaglia que también necesita de un equipo móvil como el de la empacadora que permita realizar una aplicación de los productos orgánicos o de los fertilizantes y que se aspira desarrollar un cablevía en función de realidad formoseña.
Contó que el que se encuentra ya instalado en Tacaaglé fue adquirido en Colombia y se adecua perfectamente a las realidades geográficas formoseñas, aunque se trata de un equipo que también se puede fabricar en Formosa.
"Esas son las patas que nos hacen falta, es decir controlar el cultivo y sus enfermedades con los fumigadores y cosecharlos. En caso del productor mediano y grande necesita de un cablevía y el pequeño deberá apelar a la planta empacadora móvil. Además, nos hace falta resolver la aplicación de los productos orgánicos a través de alguna pequeña máquina que se propulse entre los bananales, todo esto a futuro", comenta un entusiasta Tenaglia.
12-03-2009 | Cargada en Fsa. en Marcha - Fuente: Subsecretaría de Comunicación Social