El Ingeniero Alfredo Jiménez, aseguró que todos los tramos de obras de la pavimentación de la Ruta Nacional 81, están dentro del plazo de ejecución previsto...
El titular de la Dirección Nacional de Vialidad Distrito Formosa, ingeniero Alfredo Jiménez, aseguró que todos los tramos de obras de la pavimentación de la Ruta Nacional 81, están dentro del plazo de ejecución previsto en los contratos y al mismo tiempo, advirtió sobre la importancia que tienen los trabajos de mantenimiento tras la conclusión de su vida útil y se refirió además a idéntica labor que se cumple en Salta para la concreción del corredor bioceánico.
La Ruta Nacional 81 se pavimentará al fin en forma total dentro del territorio argentino y como resultado de las intensas como sostenidas gestiones encaradas por el gobernador Gildo Insfrán ante el presidente Néstor Kirchner, lográndose la financiación y trazar así finamente el famoso corredor bioceánico o el eje de capricornio como se lo conoce a la traza.
Sobre el estado de las obras en sus siete tramos, el funcionario de la Nación sostuvo que “se mantienen a buen ritmo la mayor parte de todos los tramos, en particular el primero y segundo, que comprende Las Lomitas Juan Gregorio Bazán y desde éste lugar a Pozo del Mortero. Y desde Mortero a Ingeniero Juárez, las empresas ya han iniciado en su mayoría la construcción de los estabilizados granulares y las capas de sub- base de suelo seleccionado. También empiezan a acopiar materiales para el volcado, en breve, de la capa asfáltica”.
Añadió que “en tanto que desde Juárez hasta el límite o la línea Barilari, las empresas a cargo de los tramos están en la tarea de la limpieza, construcción de terraplenes, desmonte y preparado del terreno por donde discurrirá la ruta. También están con el trabajo de la colocación de alcantarillas. Este es el ritmo actual que presentan los siete tramos de la pavimentación de la Ruta Nacional Nº 81.
Sobre el estado de avance de las obras, Jiménez indicó que “hasta ahora, todas las obras están cumpliendo con los plazos acordados en los documentos firmados. Algunas precipitaciones pluviales durante los meses de marzo y abril- en ocasiones intensas y en otras prolongadas- han incidido negativamente en la ejecución de los terraplenes y eso dió lugar a que consideremos algunas readecuaciones de los planes, pero siempre manteniendo los plazos contractuales, o sea la fecha de terminación, que es octubre del 2006”.
Aludió además a la iniciativa en territorio salteño, donde el tema es más reciente y dijo que “en Salta tienen 90 kilómetros que pavimentar en tres secciones y ya han firmado los contratos respectivos. Ellos están un poco más retrasados que nosotros y están en el período de movilización de obras y estimo que estarían desfasados con relación a nosotros en un año o en el mejor de los casos, unos 9 meses”.
Consultado sobre la vida útil de este tipo de obras viales, advirtió que “uno de los inconvenientes que tenemos se relaciona con el tipo de tránsito, ya que se registra continuamente el paso de vehículos pesados y tiene a ruta un exceso de carga y también a veces, en especial ahora, se lo carga con maquinarias con muchas toneladas que se utilizan para las obras de pavimentación y eso provoca que la carpeta asfáltica no tenga tiempo de recuperación. Todos estos factores producen deterioro, que se agudizan con el transporte de piedras y otros materiales y si bien la marcha de los transportes no se concreta con carga excedida, al ser la marcha uno detrás del otro, genera el perjuicio apuntado”.
Añadió que “este tipo de pavimento tiene una vida útil de unos 7 a 10 años, lo que quiere decir que se deben realizar trabajos permanentes de mantenimiento y hacer refuerzos de etapas estructurales como es o que estamos haciendo actualmente sobre esta ruta, desde la localidad de Comandante Fontana hasta su empalme con la Ruta Nacional 95, y desde allí hasta Las Lomitas. Esta estructura ya cumplió con su vida útil y ahora se están haciendo las carpetas adicionales, con sellados, para evitar fisuraciones”.
Señaló que “a veces estos trabajos no se cumplen con la periodicidad que se debiera, que es lo que pasó en el tramo siguiente y el problema del deterioro se agudiza y de allí que las obras de mantenimiento también son importantes.
Por eso es que nosotros ya estamos también previendo todos estos temas, el del mantenimiento, cuando concluyan las obras en sus diferentes tramos e incluir en ellas una obra que nosotros llamamos “contrato de reconstrucción y mantenimiento” que son una mallas- crema, financiadas en este momento por el Banco Mundial, de manera tal que se puedan garantizar un mantenimiento sostenido”.
La Ruta Nacional 81 se pavimentará al fin en forma total dentro del territorio argentino y como resultado de las intensas como sostenidas gestiones encaradas por el gobernador Gildo Insfrán ante el presidente Néstor Kirchner, lográndose la financiación y trazar así finamente el famoso corredor bioceánico o el eje de capricornio como se lo conoce a la traza.
Sobre el estado de las obras en sus siete tramos, el funcionario de la Nación sostuvo que “se mantienen a buen ritmo la mayor parte de todos los tramos, en particular el primero y segundo, que comprende Las Lomitas Juan Gregorio Bazán y desde éste lugar a Pozo del Mortero. Y desde Mortero a Ingeniero Juárez, las empresas ya han iniciado en su mayoría la construcción de los estabilizados granulares y las capas de sub- base de suelo seleccionado. También empiezan a acopiar materiales para el volcado, en breve, de la capa asfáltica”.
Añadió que “en tanto que desde Juárez hasta el límite o la línea Barilari, las empresas a cargo de los tramos están en la tarea de la limpieza, construcción de terraplenes, desmonte y preparado del terreno por donde discurrirá la ruta. También están con el trabajo de la colocación de alcantarillas. Este es el ritmo actual que presentan los siete tramos de la pavimentación de la Ruta Nacional Nº 81.
Sobre el estado de avance de las obras, Jiménez indicó que “hasta ahora, todas las obras están cumpliendo con los plazos acordados en los documentos firmados. Algunas precipitaciones pluviales durante los meses de marzo y abril- en ocasiones intensas y en otras prolongadas- han incidido negativamente en la ejecución de los terraplenes y eso dió lugar a que consideremos algunas readecuaciones de los planes, pero siempre manteniendo los plazos contractuales, o sea la fecha de terminación, que es octubre del 2006”.
Aludió además a la iniciativa en territorio salteño, donde el tema es más reciente y dijo que “en Salta tienen 90 kilómetros que pavimentar en tres secciones y ya han firmado los contratos respectivos. Ellos están un poco más retrasados que nosotros y están en el período de movilización de obras y estimo que estarían desfasados con relación a nosotros en un año o en el mejor de los casos, unos 9 meses”.
Consultado sobre la vida útil de este tipo de obras viales, advirtió que “uno de los inconvenientes que tenemos se relaciona con el tipo de tránsito, ya que se registra continuamente el paso de vehículos pesados y tiene a ruta un exceso de carga y también a veces, en especial ahora, se lo carga con maquinarias con muchas toneladas que se utilizan para las obras de pavimentación y eso provoca que la carpeta asfáltica no tenga tiempo de recuperación. Todos estos factores producen deterioro, que se agudizan con el transporte de piedras y otros materiales y si bien la marcha de los transportes no se concreta con carga excedida, al ser la marcha uno detrás del otro, genera el perjuicio apuntado”.
Añadió que “este tipo de pavimento tiene una vida útil de unos 7 a 10 años, lo que quiere decir que se deben realizar trabajos permanentes de mantenimiento y hacer refuerzos de etapas estructurales como es o que estamos haciendo actualmente sobre esta ruta, desde la localidad de Comandante Fontana hasta su empalme con la Ruta Nacional 95, y desde allí hasta Las Lomitas. Esta estructura ya cumplió con su vida útil y ahora se están haciendo las carpetas adicionales, con sellados, para evitar fisuraciones”.
Señaló que “a veces estos trabajos no se cumplen con la periodicidad que se debiera, que es lo que pasó en el tramo siguiente y el problema del deterioro se agudiza y de allí que las obras de mantenimiento también son importantes.
Por eso es que nosotros ya estamos también previendo todos estos temas, el del mantenimiento, cuando concluyan las obras en sus diferentes tramos e incluir en ellas una obra que nosotros llamamos “contrato de reconstrucción y mantenimiento” que son una mallas- crema, financiadas en este momento por el Banco Mundial, de manera tal que se puedan garantizar un mantenimiento sostenido”.