Avanza proceso de forestación con algarrobo en toda la provincia.

El programa de fomento a la forestación con algarrobo se encuentra avanzando de manera interesante, y un grupo de pequeños productores se encuentran desarrollando el proceso de poda.

El programa de fomento a la forestación con algarrobo lanzado por la provincia se encuentra avanzando de manera interesante, y en los últimos días un grupo de pequeños productores que tienen especies sembradas hace tres años, se encuentran desarrollando el proceso de poda, que es otra instancia de la propuesta, para lo cual reciben subsidios.
Fue justamente en el marco de un taller teórico-práctico realizado en la localidad de Tres Lagunas ?el próximo se hará el próximo día 24 en Siete Palmas- donde se tuvieron datos sobre esta estrategia.
El director de Bosques, Julio Soupet, fue quien explicó que el taller estuvo destinado a esos productores que han plantado algarrobo dentro del programa de forestación que se llevó a cabo en el 2005, aludiendo a que estos han cobrado el subsidio establecido, o sea dentro del marco de la ley nacional 25.080. "Esto ha llevado un proceso que por ser nuevo tiene sus vericuetos y ha provocado que los tiempos se hayan desfasados, pero se ha logrado que en la provincia de Formosa ya estén cobrando 64 productores, o mejor dicho 64 plantaciones logradas", sostuvo.
Agregó que "el programa tiene varias etapas, la primera de ellas es la plantación lograda, que tiene un monto estipulado; una segunda que es la poda obviamente, porque hay ramas que se deben eliminar, por eso el manejo de una plantación o de una forestación hecha por el hombre, y otras etapas sucesivas que sería el raleo, cosa de ir abriendo la plantación de acuerdo al objetivo final de producción que lleva adelante el productor".
Refirió a que "quienes hicieron las tareas son pequeños productores con diez o veinte hectáreas forestadas, quienes se están dando cuenta y tomando conciencia de que no somos una provincia forestadora y que necesitamos plantar árboles, entonces la forestación en Formosa, hoy por hoy, es complementaria a otras actividades", añadiendo que "el productor que hace la forestación también tiene otras actividades agrícolas, ganaderas, y otros quehaceres en la producción. Así que necesariamente nosotros creímos conveniente que pueden intervenir en este tipo de tareas otras personas".
"La forestación con algarrobo es nuevo. Inclusive la gente y los técnicos de nación se han encontrado que plantar algarrobos no es lo mismo que plantar pino, eucaliptus, por lo tanto entre todos, como se dijo en el taller, estamos aprendiendo", aludió Soupet.

Productores estimulados

Por su parte, el ingeniero forestal Víctor Pérez, encargado de la exposición durante el taller sobre la poda de algarrobo y seguimiento de los implantes con esta especie, indicó que "estamos gratamente sorprendido porque mantuvimos conversaciones con algunos productores y les preguntamos si estaban de acuerdo, si habían entendido, si les parecía bien la exposición; si eran entendibles los conceptos. Porque muchas veces los problemas que tenemos los técnicos es como bajar los conceptos técnicos al productor. Bueno, nos manifestaron que han comprendido y sobre todo lo que observamos es que los vemos muy motivados y estimulados".
Advirtió que "ir al campo y ver que efectivamente haya aplicado la poda es reconfortante, porque si eso no ocurre así se perjudica el Estado, que pone un montón de dinero, y se perjudica el productor que ha sacrificado una cantidad importante", explicando que "las plantaciones son de entre diez y veinte hectáreas, si eso no se maneja no va a servir para el propósito para el que se creó. Sino va a ser un monte para producir simplemente leña".
Pérez marcó que por lo apreciado hasta ahora en torno a este proceso de forestación, las respuestas son variadas, con lugares muy bajos, zonas de palmares, con suelos muy pesados y una plantación de tres años tiene de un metro cincuenta a un metro setenta de altura, que son crecimientos muy lentos; y en suelos de mucha calidad, el algarrobo crece con mucho vigor, muy rápidamente. En una chacra con plantas de tres años a la altura del pecho de un promedio cercano a los 9 centímetros de diámetro, que para una especie nativa es muchísimo", significó.
De todas maneras estimó, por los datos recogidos, que "esas plantas en lugares bajos una vez bien posicionada crecerán con vigor, sobre todo cuando empiece a armar su copa".

625 plantas por hectárea

En tanto que Cesar Díaz, productor de la zona de Tres Lagunas que fue uno de los que decidió sumarse a este programa de forestación, indico que "sembramos en su momento con expectativas y ahora acompañados por los técnicos del gobierno estamos aprendiendo a podar de manera correcta, y realmente estoy satisfecho por lo avanzando".
"En las 20 hectáreas que tengo debí resembrar sobre unas mil por la seca del año pasado, pero por lo que me dijeron los técnicos el proceso se encuentra bien. Yo tengo 625 plantas por hectárea, una planta cada cuatro metros", puntualizó.
Explicó que "mi objetivo es un aprovechamiento silvo-pastoril, es decir que en cinco años tendríamos que tener los frutos del algarrobo y su aprovechamiento para el engorde del ganado. Por supuesto también resulta interesante tener una mirada a largo plazo puesto que se tratan de nuevas especies que enriquecerán los bosques".
Finalmente ponderó que "este curso nos ayuda muchísimo para saber la manera de trabajar correctamente, y por supuesto enseñar también a otra gente, y estimamos que por jornada podremos estar podando todas las plantas que se encuentren sobre una hectárea".
12-05-2008 | Cargada en Fsa. en Marcha - Fuente: Subsecretaría de Comunicación Social