Un oásis en el oeste.

El canal de Laguna Yema, una iniciativa que surgió hace más de un cuarto de siglo, es aún hoy tan vital como siempre, ya que este verdadero oasis en lugares donde el rigor de la naturaleza castiga impiadosa...

El canal de Laguna Yema, una iniciativa que surgió hace más de un cuarto de siglo, es aún hoy tan vital como siempre, ya que este verdadero oasis en lugares donde el rigor de la naturaleza castiga impiadosa, permite nada menos que la vida y diversas actividades productivas.
Este canal, que muchos formoseños desconocen y mucho menos conocen su utilidad, está situado en la parte centro- oeste de la provincia de Formosa y contribuye a la vida de muchos pobladores, riega los campos productivos y colabora con la actividad pecuaria.
Es el canal de Laguna Yema quién dió los primeros alientos a la diversidad productiva- un anhelo del gobernador Gildo Insfrán que ya está en plena marcha- y permitió el desembarco de técnicos y científicos de Israel para dar vida al Centro de Validación Tecnológica Agropecuaria (CEDEVA), que hoy se dedica a cultivos tan diversos como inesperados para la región.
Este complejo hidroeléctrico cuyo conducto revestido de hormigón, con saltos, y a cielo abierto, ya está llegando a la localidad de Pozo del Tigre desde la localidad de laguna Yema, donde empieza a escurrir desde un enorme reservorio, es el sostén del modelo productivo de la provincia de Formosa por lo menos en las zonas que atraviesa, y permite la sustitución de actividades tradicionales por las nuevas, que están produciendo excelentes resultados, incluso en mercados internacionales.
El canal permite a los productores el uso del agua y la adopción de modelos agrícolas bajo riego, en toda su diversidad, que el CEDEVA lo concreta de muy buen modo. El CEDEVA es un centro especializado en estudios agronómicos con la tarea de probar nuevas tecnologías y aptitud del suelo a sustentar nuevos cultivos.
El canal fue observado por el propio gobernador, el vicegobernador Floro Bogado, y toda su comitiva, en su paso hacia la pequeña localidad de Sumayen, situada a la vera del río Bermejo y muchos de ellos detuvieron su marcha para conocer la imponente obra, cuyo reservorio o presa de agua contiene millones de metros cúbicos de agua y ocupa centenares de hectáreas. La enorme reserva de agua está recubierta por gaviones que no permiten la erosión de sus terraplenes y en todo momento es observado por técnicos profesionales que lo controlan y vigilan la calidad del agua.
A partir d allí y hacia el sur, comienza a escurrir a través de un conducto revestido de hormigón, que tiene saltos para lograr la gravedad y el deslizamiento de la masa hídrica, que es aprovechado en todo su trayecto por productores para el riego y los animales, por las comunidades aborígenes y por quienes necesiten tan vital elemento líquido, que es tomado desde el canal por motobombas para todo uso.
Se proyecta que el conducto con las aguas del Bermejo- Teuquito llegue alguna vez a la localidad de Pirané, con toda su carga de beneficio, en una zona donde la actividad pecuaria, forestal y ganadera es muy activa, además de las que se dedican a la ladrillería y otras como producción de carbón etc.
Como hace más de 25 años, el canal de Laguna Yema se yergue orgullosa, mostrando lo que está haciendo a favor de la producción y las comunidades asentadas a su vera, reflejando que la ciencia y la tecnología en manos del hombre es capaz de revertir la situación natural en un entorno muy riguroso, con tierra salina y pocas precipitaciones. Su buen uso está logrando que incluso se modifique la región provocando un microclima que incluso permite la llegada de turistas.
08-06-2005 | Cargada en Fsa. en Marcha - Fuente: Subsecretaría de Comunicación Social