El administrador general del Instituto de Colonización y Tierras Fiscales, Manuel Rodríguez, reveló que la gestión del organismo a su cargo de aquí en más pondrá el acento en la titularización de las tierras en el este ...
El administrador general del Instituto de Colonización y Tierras Fiscales, Manuel Rodríguez (en la foto junto a productores), reveló que la gestión del organismo a su cargo de aquí en más pondrá el acento en la titularización de las tierras en el este de la provincia y a afirmar el proceso de adjudicación en el oeste “ donde viven familias que no tienen ni un papel , para que dejen de ser parias en sus propias tierras”.
Explicó que las instrucciones recibidas del gobernador Insfrán le asignan prioridad en esa mecánica a aquellos productores que ya están ocupando pacíficamente esos predios y que por hacerlo el estado les garantiza un derecho.
“Estamos haciendo las divisiones para darles el lugar que les corresponde a cada uno de ellos. Si sobran tierras serán para quienes vengan de otros lugares o para los formoseños que quieran ir a invertir al oeste”,comentó.
Respecto de la evolución de la política de tierras desde la puesta en vigencia del modelo formoseño hace diez años, informó que los beneficios alcanzaron a cerca de 4.000 productores, 2500 con títulos de propiedad y el resto con adjudicaciones en venta que se irán convirtiendo progresivamente en títulos de propiedad.
En el caso de los “paipperos”, dijo que está trabajando con el titular del Instituto PAIPPA, doctor Alberto Zorrilla, en razón de que las mensuras de los predios donde ellos están asentados se hacen en “bloque” para que resulten más económicas.
“Estamos haciendo un promedio de diez o veinte productores por bloque porque si hay que llevarlas a cabo individualmente los costos serán muy elevados. Pretendemos abaratar los valores en los que intervienen el estado que se encarga de aportar los recursos para pagar a los agrimensores ; el productor que pone su trabajo para la elaboración de mojones y habilitación de picadas y el Colegio Profesional de la Agrimensura que también pone lo suyo”, contó el funcionario.
Reconoció que si bien se acomete una labor de conjunto, la tarea lleva su tiempo sobre todo porque los equipos de Tierras están actuando con énfasis en el oeste para ordenar la tierra que ocupa el pequeños productor del oeste que fue incorporado al PAIPPA “ algo que considero es un acto de estricta justicia”.
Rodríguez recordó que la gestión no es fácil y ya le ha demandado tres años a los técnicos, profesionales y operarios del organismo a su cargo en esa región.
El caso de Tomkins
El administrador general del instituto provincial de Colonización y Tierras Fiscales, no cree que en Formosa se repita el caso del estadounidense Tompkins quien adquirió miles de hectáreas en jurisdicción de los esteros del Iberá ya que se cuenta con instrumentos que impiden esas transacciones como así también los propósitos de los que buscan predios con fines inmobiliarios.
“Esa fue la razón por la que el gobernador Gildo Insfrán mandó a la legislatura un proyecto que se convirtió en ley por el cual se declaró de utilidad pública el bañado La Estrella un humedal de 400.000 hectáreas donde están afincados pequeños productores dedicados a la cría de ganado”, explicó.
Admitió que hubo sectores, incluidos algunos religiosos y dirigentes de entidades ambientalistas, que denunciaron que la provincia pretendía quedarse con los predios de sus ocupantes para vendérselos a los grandes inversores del país y del extranjero.
La prioridad
“Hubo ofertas de inversores de EEUU para adquirir en jurisdicción del bañado miles de hectáreas para construir un moderno Hotel de Turismo y promover la visita de contingentes de extranjeros reactivando además el aeródromo de Las Lomitas, por donde se accede a ese sitio de bellezas extraordinarias. Pero se le ha dado prioridad a sus ocupantes originales, pese a que nunca pagaron por la ocupación, una razón que podríamos esgrimir si queríamos sacarlos del medio como todavía argumentan algunos”, confió.
Rodríguez reveló que la reglamentación de la ley concreta el deseo gubernamental de garantizarlos a sus actuales tenedores la disponibilidad de la tierra aunque aclaró que “nunca podrán venderlas pero podrán dejarlas como herencia a sus hijos”
En el caso de las grandes superficies fiscales aún existentes, dijo que la ley de tierras permite la venta de predios hasta 5.000 hectáreas de superficie y que para evitar las maniobras especulativas de los que tienen objetivos inmobiliarios, se les exige a los compradores que cumplan con un proyecto de desarrollo cuyas etapas se vigilarán durante tres años al cabo de los cuales, de comprobarse que se avanzó en el aprovechamiento de los campos, se formalizará la transacción.
Admitió que hubo un solo caso que superó las 5.000 hectáreas y es el de Liag Argentina ,aunque para aprobar la venta se tuvo que apelar a una ley especial teniendo en cuenta que su propuesta armonizaba con el propósito gubernamental de generar atractivos para que se invierta en el centro oeste, una zona a la que nadie quería ir a producir, indicando que Liag se instaló y también lo hicieron otras firmas que han permitido poner en producción unas 10.000 hectáreas, de las cuales 4.000 utilizan riego por goteo o por aspersión, con inversiones superiores a los 50 millones de dólares.