Consenso para funcionamiento de mataderos en el interior provincial.

Un abordaje pluri-institucional tuvo ayer la reunión de trabajo respondiendo a la visión integral del gobierno en torno a la cadena cárnica, en este caso en uno de los últimos eslabones, ya que se trata de optimizar ...

Un abordaje pluri-institucional tuvo ayer la reunión de trabajo respondiendo a la visión integral del gobierno en torno a la cadena cárnica, en este caso en uno de los últimos eslabones, ya que se trata de optimizar el funcionamiento de diecisiete nuevos mataderos que estarán funcionando en poco tiempo más en diferentes puntos del interior.
Que cada uno de ellos cumpla a rajatabla las normas de sanidad, salubridad e inocuidad, dándole seguridad al consumidor, y al mismo tiempo eliminar los colgaderos donde se realizan faenas clandestinas, forman parte de la estrategia abordada ayer en Las Lomitas entre funcionarios y técnicos provinciales con sus pares del SENASA y de los municipios.
El ministro de la Producción, Luis Basterra, el subsecretario de Planificación de la Inversión Pública, Ramiro Fernández Patri, la directora de Bromatología, Cristina de Montti, técnicos idóneas en todo lo que hace a la estructura y funcionamiento de los mataderos, mantuvieron un amplio análisis con los jefes comunales (una decena presentes) y personal bromatológico de los municipios.
Se conversó acerca de la optimización de los mataderos y que estén adecuados a los mecanismos técnicos y normas sanitarias, como también de la mejora en la calidad de la faena. También se avanzó en compatibilizar y unificar criterios en torno a la construcción de los mataderos –que en un número de 17 están construyéndose- de acuerdo a las exigencias del SENASA y autoridades provinciales que regulan al sector.
El ministro Basterra destacó la decisión de darle a esta cuestión un bordaje pluri-institucional, tanto del gobierno provincial como nacional (Ministerio de Trabajo y SENASA), además de los municipios, señalando que “marca un estilo de gestión abierta y con el involucramiento de todos los actores de la sociedad”.
Dijo que una vez que una vez estos mataderos, algunos de los cuales podrían llegar a tener la categoría de frigoríficos de acuerdo a la cantidad de faena, le van a dar seguridad a la población, ya que estas estructuras serán “un reaseguro de salubridad, sanidad e inocuidad del producto que se va a consumir”.
Hizo referencia a que “este gran avance en el ordenamiento de nuestras producciones en el territorio es algo absolutamente imprescindible si queremos jugar en primera y ser vanguardia en materia pecuaria”, añadiendo que “esto nos permitirá asegurar un ordenamiento en términos de sanidad animal y patrimonial para los productores ganaderos, exigencias que cualquier persona que va a poner dinero en una actividad comercial pretende que se cumpla”.
Consideró que “otro aspecto relevante es el de agregación de valor, ya que cualquiera de estos procesos, significa mano de obra, como también que lo que se produce en el lugar se transforme en el lugar y genere riquezas”.


Esquema de regiones


Otra faceta que destacó Basterra tiene que ver con el esquema de regiones, en el entendimiento de que “hay que darle una utilidad práctica a la visión de las regiones”, explicando que “se trata de un proceso, y no que a través de un decreto las mismas quedarán establecidas, ya que esto se encuentra vinculado a la posibilidad de ser más eficientes y a la interpretación adecuada de un territorio y dar respuestas ajustadas a la necesidad de cada uno de ellos”.
A modo de ejemplo aludió al sector de las cabras, donde cuantificó en principio que “el stock caprino de la provincia es de alrededor de 300.000 animales”, tras lo cual indicó: “Supongamos que cinco o seis cabras equivalen a una vaca, lo que quiere decir que estaríamos hablando de una carga animal de alrededor de 50 a 60 mil vacas. Esto, sobre un 1.700.000 cabezas de hacienda, uno puede decir que el peso relativo en la provincia no es significativo ya que su volumen representa menos del 3 % de proteína animal que se genera”.
Abundó diciendo que “si consideramos lo que es la realidad de Las Lomitas hacia el oeste, la cabra pasa a tener un peso absolutamente relevante en la calidad de vida de cada uno de los formoseños que decidieron vivir en toda esta región”, de allí que insistiera en torno a que “por eso el hecho de darle un abordaje regional a la problemática de los territorios nos da la posibilidad de ajustar la herramienta de acuerdo a las condiciones y necesidades del territorio”.


Modelo de colaboración


Por otra parte, sostuvo el titular de la cartera Productiva que “lo que hoy puede presuponerse como un modelo de competencia de administraciones municipales, tiene que pasar progresivamente a un modelo de sinergia, de colaboración y potenciamiento entre las estructuras comunales”.
“De esta manera, por ejemplo no tendremos tres frigoríficos de exportación en tres pueblos vecinos. Habrá uno o dos en toda la provincia, por lo menos en los próximos cinco o seis años, mientras veamos como evoluciona el stock y la efectiva disponibilidad de animales para la exportación”, avanzó, para concluir afirmando que “así iremos teniendo un equilibrio armónico en nuestro territorio y no ineficiencias que a posteriori podría significar la pérdida del objetivo de agregación de valor en cada zona”.

24-08-2006 | Cargada en Fsa. en Marcha - Fuente: Subsecretaría de Comunicación Social