La tarea está a cargo de técnicos de ese organismo y de su director, el ingeniero Ricardo Vailati, siendo la chacra de Primitivo Fretes, en el paraje El Palomar, una de las primeras visitadas.
Está en plena marcha la distribución de plantas de banana formoseña producidas en el biolaboratorio del Centro de Validación de Tecnologías Agropecuarias de Misión Tacaaglé, habiéndose entregado hasta el momento 11.000 de ellas a 22 pequeños productores del noreste del territorio.
No hace muchos días fue presentada en sociedad la primera planta de banana formoseña como resultado de cinco años de trabajos de investigación y de prácticas culturales en el CEDEVA de Tacaaglé.
Los campesinos reciben plantas libres de enfermedades y hechas en el biolaboratorio del mencionado organismo calculándose que para fin de año se distribuirán 50.000 de ellas.
Se estima, además, que dentro de un año todos los productores formoseños de bananas van a contar con plantas libres de enfermedades.
"Es un muy buen clon de la zona bananera, es material vegetal adaptado a ella que ha sido tomado por el CEDEVA y multiplicado casi industrialmente", explicó el ingeniero Jorge Balonga, coordinador ejecutivo de dicho ente quien anunció que se trata del primer producto allí logrado aunque ya se está trabajando también en mandioca y batata con las primeras vitroplantas en Tacaaglé, pero con los protocolos totalmente resueltos.
"Esto es banana formoseña multiplicada en laboratorio y que cuenta con una alta calidad genética y sanitaria", sostuvo para precisar que se están entregando plantas que son gemelas, todas iguales a las plantas madre porque tienen el mismo complemento genético y al ser pasadas a través del laboratorio se limpian todas las enfermedades. Estas plantas con respecto a las madres que están en el campo tienen un 30 % más de producción por estar sanas.
En general, toda la multiplicación de la banana es a través de hijuelos que se dan entre los vecinos y amigos y la carga de enfermedades a través de 50 años actuando de esa forma, es muy grande.
"Esta planta es igual a la madre, del mismo tamaño, con la misma fruta" insistió para aclarar que "lo que aquí cambia es el estado sanitario".
"Estamos entregando plantas mellizas, todas las que van a campo son iguales y cuando uno saca hijuelos del campo siempre hay diferenciación de tamaño por grosor, cantidad de raíces y altura; en este caso, son todas iguales", afirmó.
Balonga dijo que la distribución de las plantas a campo estará a cargo del ministerio de la Producción y Ambiente y el Instituto PAIPPA -Programa de Acción Integral para los Pequeños Productores Agropecuarios- y se hará a partir de 500 plantas por productor cantidad para una hectárea y con la que podrá hacer su semillero para sacar después hijuelos sanos para hacer las multiplicaciones.
El año que viene se pretende llegar a todos los pequeños productores formoseños con plantas sanas para cuando encaren sus nuevos lotes lo hagan partiendo de una semilla muy sana y con el protocolo CEDEVA para garantizar que se llegue a corto plazo en el aumento de la producción y la calidad de la fruta.
No hace muchos días fue presentada en sociedad la primera planta de banana formoseña como resultado de cinco años de trabajos de investigación y de prácticas culturales en el CEDEVA de Tacaaglé.
Los campesinos reciben plantas libres de enfermedades y hechas en el biolaboratorio del mencionado organismo calculándose que para fin de año se distribuirán 50.000 de ellas.
Se estima, además, que dentro de un año todos los productores formoseños de bananas van a contar con plantas libres de enfermedades.
"Es un muy buen clon de la zona bananera, es material vegetal adaptado a ella que ha sido tomado por el CEDEVA y multiplicado casi industrialmente", explicó el ingeniero Jorge Balonga, coordinador ejecutivo de dicho ente quien anunció que se trata del primer producto allí logrado aunque ya se está trabajando también en mandioca y batata con las primeras vitroplantas en Tacaaglé, pero con los protocolos totalmente resueltos.
"Esto es banana formoseña multiplicada en laboratorio y que cuenta con una alta calidad genética y sanitaria", sostuvo para precisar que se están entregando plantas que son gemelas, todas iguales a las plantas madre porque tienen el mismo complemento genético y al ser pasadas a través del laboratorio se limpian todas las enfermedades. Estas plantas con respecto a las madres que están en el campo tienen un 30 % más de producción por estar sanas.
En general, toda la multiplicación de la banana es a través de hijuelos que se dan entre los vecinos y amigos y la carga de enfermedades a través de 50 años actuando de esa forma, es muy grande.
"Esta planta es igual a la madre, del mismo tamaño, con la misma fruta" insistió para aclarar que "lo que aquí cambia es el estado sanitario".
"Estamos entregando plantas mellizas, todas las que van a campo son iguales y cuando uno saca hijuelos del campo siempre hay diferenciación de tamaño por grosor, cantidad de raíces y altura; en este caso, son todas iguales", afirmó.
Balonga dijo que la distribución de las plantas a campo estará a cargo del ministerio de la Producción y Ambiente y el Instituto PAIPPA -Programa de Acción Integral para los Pequeños Productores Agropecuarios- y se hará a partir de 500 plantas por productor cantidad para una hectárea y con la que podrá hacer su semillero para sacar después hijuelos sanos para hacer las multiplicaciones.
El año que viene se pretende llegar a todos los pequeños productores formoseños con plantas sanas para cuando encaren sus nuevos lotes lo hagan partiendo de una semilla muy sana y con el protocolo CEDEVA para garantizar que se llegue a corto plazo en el aumento de la producción y la calidad de la fruta.