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El plan provincial de forestación de algarrobo que el estado tiene en pleno desarrollo, sin dudas terminará enriqueciendo el monte formoseño en un amplio espectro, ya que no sólo se propende al aprovechamiento racional de la madera, sino que se piensa en un horizonte más cercano de un par de años, y donde se conjugan beneficios como la pasturas, además de las posibilidad de exportar harinas y dulces elaborados de la chaucha del árbol.
Hay que recordar que este plan provincial de forestación con algarrobo, contempla un préstamo de 0 por hectárea forestada, equivalente al 33% del costo de forestación, el que es efectivizado en una etapa.
El año pasado se distribuyeron más de un millón de plantines de esta especie, en ese caso para implantar unas 2000 hectáreas, algo que se plantea repetir durante el 2006, aunque se le sumarán otras especies como  el lapacho.
Durante una reciente visita hecha por el ministro de la Producción, Luis Basterra junto a técnicos de esa cartera a la zona de Tres Lagunas, se pudieron observar algunos lotes implantados con algarrobo en esa zona, que ya totalizan unas 500 hectáreas.
Uno de los visitados fue un lote de 20 hectáreas donde se implantó algarrobo blanco, en este caso dentro de lo que se da en llamar un cultivo asociado, ya que en noviembre de 2005, además de algarrobo, en el mismo lugar se hizo lo propio con algodón, en una separación de 80 centímetros de distancia.
Las plantas que en tres meses adquirieron portes muy importantes, y ya se está organizando con los propietarios del campo la poda de formación en esta primera etapa, para luego tener que realizarse los dos raleos.
“Este implante se hizo sobre suelo agrícola –en otros casos en suelo ganadero- donde se hizo el laboreo y preparado el barbecho para sembrar el algodón, y dentro de este esquema asociado se favorece el control de malezas y un aprovechamiento de uso múltiple del suelo”, se explicó, para cuantificarse que en Tres Lagunas ya se han implantado hasta el momento 500 hectáreas con algarrobo en el marco del plan provincial de forestación.
Existe un permanente asesoramiento por parte de técnicos de la cartera Productiva, de tal modo de darle al hombre de campo otra alternativa, ya que además del mejoramiento del suelo podrá aprovechar la chaucha del algarrobo tanto para forraje de animales como para el consumo humano, ya que es sabido que se elabora una harina con grandes cualidades proteicas
En cuatro o cinco años ya se producen los brotes de las chauchas, es decir que existe una utilidad a mediano plazo, más allá de la madera, para lo cual debe esperar cuanto menos veinte años o más. Es dable señalar que los plantines son producidos por la dirección de Bosques de la Provincia, para lo cual se utilizaron semillas de alta calidad genética y clasificada para realizar justamente este tipo de implantación de bosques.