Se conoció que se brindará apoyo a la provincia para el financiamiento de los estudios de prefactibilidad del nuevo vínculo físico con el Paraguay que se emplazará entre Puerto Pilcomayo y la ciudad de Itá Enramada.
Además los estudios abarcan impulsar un nuevo complejo en San Ignacio de Loyola que responda a las demandas de los próximos treinta años.
Ese fue el resultado de la gestión emprendida por Formosa en el seno del Grupo Mixto Argentino-Paraguayo -CMT- que acaba de reunirse en la Cancillería nacional para abordar entre los temas referidos a la realidad fronteriza, la refuncionalización del complejo San Ignacio de Loyola y , fundamentalmente, la construcción de un nuevo puente que los una ,esta vez a la altura de Puerto Pilcomayo e Itá Enramada.
Asistió el ministro de Planificación, Inversión, Obras y Servicios Públicos, doctor Jorge Ibáñez acompañado por el administrador general de Vialidad Provincial, ingeniero Jorge Jofré.
Ambos participaron de sendas reuniones en las subcomisiones de Infraestructura y de Transporte Ferroviario con la participación de representantes de la Cancillería, del ministerio de Planificación Federal y de la Dirección Nacional de Vialidad.
Según lo revela el administrador general de la DPV, ingeniero Jofré, durante el encuentro se concluyó que a pesar de la refuncionalización del complejo San Ignacio de Loyola, su expansión resulta imposible.
"Es que sólo tenemos 2,8 hectáreas de terreno y el puente metálico está colapsado lo que no permite un normal tráfico de vehículos y personas por lo que se considera necesario avanzar en la construcción del puente Pilcomayo Ita Enramada cuyo estudio de prefactibilidad fue financiado por el CFI arrojando resultados positivos", indicó.
Comentó, asimismo, que también se expuso sobre la pavimentación de la ruta 23 que va a permitir la utilización del puente entre San Carlos y General Bruguez aunque para ello Paraguay tendrá que pavimentar 180 kilómetros para llegar a esa zona, cercana a General Belgrano.
Otro punto de la agenda tuvo que con las obras de pavimentación de la ruta 9 hasta Colonia Cano estando actualmente en estudio la futura localización de un puente en el nodo Puerto Bermejo- Ñeembucú.
Recordó Ibáñez, por su parte, que la provincia, ante esa realidad, planteó al Consejo Federal de Inversiones la necesidad de evaluar una vía alternativa de circulación, teniendo en cuenta la dinámica de un tránsito vehicular creciente, como así también una distancia de transporte reducida mediante la elección de una traza adecuada.
Además, reveló que de las cuatro alternativas que analizaron el gobierno provincial, el CFI y el Centro de Ingeniería y Transporte Aplicado al Desarrollo, la máxima autoridad provincial aceptó las sugerencias de dichos organismos especializados en el tema que sugieren que el futuro puente vincule Puerto Pilcomayo con Itá Enramada.
En la consideración de este tema central para la integración bilateral se tuvo en cuenta la incidencia que tendrá en los proyectos la pronta terminación del corredor este-oeste generado por la pavimentación de la ruta nacional 86 a la que se aspira conectar con la emblemática ruta 40 y la ya terminada ruta 11, que vinculan a Asunción con los puertos chilenos de Iquique y Antofagasta a través del Paso de Jama previo paso por Formosa.
Al fundamentar la construcción de una nueva interconexión vial, Ibáñez dijo que la consideración del gobernador radica en que mejorará los indicadores de rentabilidad social; maximiza los beneficios sociales correspondientes al flujo vehicular y minimiza el paso de tránsito pesado en los respectivos ejidos urbanos.
En el encuentro, las provincias argentinas y los departamentos paraguayos efectuaron una presentación destinada a abordar los temas de infraestructura consideren de interés.
En su exposición, los representantes de Formosa abordaron sobre la situación actual del complejo fronterizo San Ignacio de Loyola que comunica la Argentina a través de Clorinda con el Paraguay.
Ibáñez resaltó que se trata de uno de los nueve pasos que posee la Argentina, es el octavo en volumen transportado de los pasos de Sudamérica, transporta el 4% del volumen carretero total y el 91% del comercio bilateral carretero con el Paraguay.
La magnitud del movimiento es tal que en 2010 se registró el movimiento de 305.726 vehículos y de 1.556.133 personas lo que evidencia la magnitud de la actividad de un complejo que por sus precariedades e insuficiencias demanda una refuncionalización de San Ignacio de Loyola a causa de su crecimiento junto con la optimización de las instalaciones existentes y la construcción de nuevos equipamientos.
La propuesta de Formosa aprobada por el gobernador Gildo Insfrán propicia la planificación de un complejo fronterizo proyectado a 30 años vista para su ejecución en sucesivas etapas de construcción atendiendo en lo inmediato a las deficiencias más perentorias.
Dijo Ibáñez que el proyecto contendrá los estudios de demanda para las diferentes etapas consideradas y la planificación del proyecto de manera de no desperdiciar recursos, estos es que las sucesivas etapas de construcción sean aprovechables para la conformación final del complejo.
Ese fue el resultado de la gestión emprendida por Formosa en el seno del Grupo Mixto Argentino-Paraguayo -CMT- que acaba de reunirse en la Cancillería nacional para abordar entre los temas referidos a la realidad fronteriza, la refuncionalización del complejo San Ignacio de Loyola y , fundamentalmente, la construcción de un nuevo puente que los una ,esta vez a la altura de Puerto Pilcomayo e Itá Enramada.
Asistió el ministro de Planificación, Inversión, Obras y Servicios Públicos, doctor Jorge Ibáñez acompañado por el administrador general de Vialidad Provincial, ingeniero Jorge Jofré.
Ambos participaron de sendas reuniones en las subcomisiones de Infraestructura y de Transporte Ferroviario con la participación de representantes de la Cancillería, del ministerio de Planificación Federal y de la Dirección Nacional de Vialidad.
Según lo revela el administrador general de la DPV, ingeniero Jofré, durante el encuentro se concluyó que a pesar de la refuncionalización del complejo San Ignacio de Loyola, su expansión resulta imposible.
"Es que sólo tenemos 2,8 hectáreas de terreno y el puente metálico está colapsado lo que no permite un normal tráfico de vehículos y personas por lo que se considera necesario avanzar en la construcción del puente Pilcomayo Ita Enramada cuyo estudio de prefactibilidad fue financiado por el CFI arrojando resultados positivos", indicó.
Comentó, asimismo, que también se expuso sobre la pavimentación de la ruta 23 que va a permitir la utilización del puente entre San Carlos y General Bruguez aunque para ello Paraguay tendrá que pavimentar 180 kilómetros para llegar a esa zona, cercana a General Belgrano.
Otro punto de la agenda tuvo que con las obras de pavimentación de la ruta 9 hasta Colonia Cano estando actualmente en estudio la futura localización de un puente en el nodo Puerto Bermejo- Ñeembucú.
Recordó Ibáñez, por su parte, que la provincia, ante esa realidad, planteó al Consejo Federal de Inversiones la necesidad de evaluar una vía alternativa de circulación, teniendo en cuenta la dinámica de un tránsito vehicular creciente, como así también una distancia de transporte reducida mediante la elección de una traza adecuada.
Además, reveló que de las cuatro alternativas que analizaron el gobierno provincial, el CFI y el Centro de Ingeniería y Transporte Aplicado al Desarrollo, la máxima autoridad provincial aceptó las sugerencias de dichos organismos especializados en el tema que sugieren que el futuro puente vincule Puerto Pilcomayo con Itá Enramada.
En la consideración de este tema central para la integración bilateral se tuvo en cuenta la incidencia que tendrá en los proyectos la pronta terminación del corredor este-oeste generado por la pavimentación de la ruta nacional 86 a la que se aspira conectar con la emblemática ruta 40 y la ya terminada ruta 11, que vinculan a Asunción con los puertos chilenos de Iquique y Antofagasta a través del Paso de Jama previo paso por Formosa.
Al fundamentar la construcción de una nueva interconexión vial, Ibáñez dijo que la consideración del gobernador radica en que mejorará los indicadores de rentabilidad social; maximiza los beneficios sociales correspondientes al flujo vehicular y minimiza el paso de tránsito pesado en los respectivos ejidos urbanos.
En el encuentro, las provincias argentinas y los departamentos paraguayos efectuaron una presentación destinada a abordar los temas de infraestructura consideren de interés.
En su exposición, los representantes de Formosa abordaron sobre la situación actual del complejo fronterizo San Ignacio de Loyola que comunica la Argentina a través de Clorinda con el Paraguay.
Ibáñez resaltó que se trata de uno de los nueve pasos que posee la Argentina, es el octavo en volumen transportado de los pasos de Sudamérica, transporta el 4% del volumen carretero total y el 91% del comercio bilateral carretero con el Paraguay.
La magnitud del movimiento es tal que en 2010 se registró el movimiento de 305.726 vehículos y de 1.556.133 personas lo que evidencia la magnitud de la actividad de un complejo que por sus precariedades e insuficiencias demanda una refuncionalización de San Ignacio de Loyola a causa de su crecimiento junto con la optimización de las instalaciones existentes y la construcción de nuevos equipamientos.
La propuesta de Formosa aprobada por el gobernador Gildo Insfrán propicia la planificación de un complejo fronterizo proyectado a 30 años vista para su ejecución en sucesivas etapas de construcción atendiendo en lo inmediato a las deficiencias más perentorias.
Dijo Ibáñez que el proyecto contendrá los estudios de demanda para las diferentes etapas consideradas y la planificación del proyecto de manera de no desperdiciar recursos, estos es que las sucesivas etapas de construcción sean aprovechables para la conformación final del complejo.