El ministro de Planificación, Inversión, Obras y Servicios Públicos, Jorge Ibáñez, se mostró optimista que a principios de semana, lunes o martes, retomaría la normal operatividad el Aeropuerto Internacional Formosa, para lo cual se hicieron activas gestiones ante las autoridades federales.
Expuso que en los últimos días y en forma inmediata de haberse detectado que los equipos de radio ayudas de las aeronaves estaban funcionando con deficiencias, lo que justamente produjo que se dispusiera la suspensión de los vuelos, se activaron las gestiones ante la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC), analizándose la situación con funcionarios de esa esfera como el titular, doctor. Alejandro Granados y el licenciado Manuel Álvarez.
Se expuso que una tormenta de semanas atrás había sido la causante de los deterioros de aparatos que conforman los sistemas de seguridad para aterrizaje y despegue de aviones, como es el caso de las radioayudas, las cuales se hallaban funcionando de manera defectuosa y fuera de los parámetros técnicos y normativos establecidos por las cuatro Cartas Aeronáuticas que se deben respetar en todos los casos. Además, se encontraba con fisura la caseta, antena y plano de antena, con lo que cual se dispuso la inmediata suspensión de la operatividad de la estación aérea.
Con los trabajos de reparación en marcha a cargo de técnicos nacionales y locales, se espera que en las próximas 72 horas a lo máximo, se puedan normalizar las operaciones. Se expuso que una vez que los profesionales de la División de Radioayuda del Palomar hayan finalizado las tareas, un avión verificador perteneciente a la Fuerza Aérea Argentina estará sobrevolando la ciudad a fin de determinar fehacientemente que los equipos funcionan con normalidad, tarea esta de fiscalización y verificación que será la que finalmente determine la vuelta a la operatividad del aeropuerto formoseño.
Se comentó incluso que de no haber sido por las persistentes lluvias de los últimos días, se habría podido acelerar las labores de reparación, aunque como el ministro Ibáñez lo señalara, se confía en que desde el lunes o martes se haya podido superar el problema y la grilla de vuelos semanales se normalice.
Se expuso que una tormenta de semanas atrás había sido la causante de los deterioros de aparatos que conforman los sistemas de seguridad para aterrizaje y despegue de aviones, como es el caso de las radioayudas, las cuales se hallaban funcionando de manera defectuosa y fuera de los parámetros técnicos y normativos establecidos por las cuatro Cartas Aeronáuticas que se deben respetar en todos los casos. Además, se encontraba con fisura la caseta, antena y plano de antena, con lo que cual se dispuso la inmediata suspensión de la operatividad de la estación aérea.
Con los trabajos de reparación en marcha a cargo de técnicos nacionales y locales, se espera que en las próximas 72 horas a lo máximo, se puedan normalizar las operaciones. Se expuso que una vez que los profesionales de la División de Radioayuda del Palomar hayan finalizado las tareas, un avión verificador perteneciente a la Fuerza Aérea Argentina estará sobrevolando la ciudad a fin de determinar fehacientemente que los equipos funcionan con normalidad, tarea esta de fiscalización y verificación que será la que finalmente determine la vuelta a la operatividad del aeropuerto formoseño.
Se comentó incluso que de no haber sido por las persistentes lluvias de los últimos días, se habría podido acelerar las labores de reparación, aunque como el ministro Ibáñez lo señalara, se confía en que desde el lunes o martes se haya podido superar el problema y la grilla de vuelos semanales se normalice.