El primer mandatario formoseño realizó un balance de las políticas en ejecución y de las obras construidas a lo largo y ancho del territorio así como la referencia a la responsable ejecución del presupuesto que arrojó un resultado positivo de cerca de 58 millones de pesos.
El gobernador Gildo Insfrán dejó inauguradas ayer por la mañana las sesiones ordinarias de la Legislatura provincial correspondientes al año 2013. Tal como es de estilo, el mandatario concurrió al Parlamento provincial en un trayecto que recorrió a pie desde la Casa de Gobierno, acompañado de ministros y otros funcionarios del gobierno provincial.
Durante su alocución, manifestó su gratitud al pueblo de Formosa por el apoyo que brinda a su gobierno para significar que "Mucho hemos hecho y mucho más haremos" para subrayar que las realizaciones dan fe del compromiso con el pueblo, con las mujeres por creer que era posible un presente mejor para ellas y con los jóvenes a los que definió como los nuevos soñadores que se van transformando en garantes de la consolidación y trascendencia en el tiempo del modelo propio.
Tras solicitar que no se permita que nadie pretenda atar a los formoseños al atraso y al pasado, opinó que las rémoras del odio solo pueden afectar a quien no encuentra otro solaz que la satisfacción de mezquinas pretensiones.
Insfrán dijo que en la construcción del bien común los formoseños han dado mucho por lo que resulta necesario afianzar los vínculos con solidaridad para continuar transformando la realidad local en beneficio de todos.
Alertó, sin embargo acerca de la existencia de mensajes de desunión y discordia que expresan intenciones e ideas alejadas del camino que los formoseños decidieron transitar y construir colectivamente.
"A muchas de estas voces quizás las podamos entender pues hacen del conflicto y el agravio su medio de vida y de hacer política, pero difícil es comprender que unos pocos formoseños se sumen a ese método en defensa de sus intereses personales y sectoriales", expresó.
Interpreta el gobernador que siempre resulta fácil destruir lo que se construyó en estos años con sacrificio y en armonía entre todos, no obstante lo cual reiteró, enfáticamente, que su compromiso con la paz social no tiene doblez. "Es un legado que los formoseños reconocemos y cuidamos porque así nos han inculcado nuestros mayores y porque somos consecuentes con nuestra doctrina, coherentes con nuestro pensamiento y consistentes en la acción", acotó.
Ataque a medios
Significó que los logros colectivos han hecho que las usinas mediáticas del poder se ocupen de Formosa.
"Nos atacan -explicó- porque aquí se demuestra lo que se consigue con un proyecto federal comprometido con los reales intereses del pueblo, lo que se logra con un accionar planificado y continuidad en la gestión"
"Nos quieren doblegar, especulando que con ello habremos de renunciar a la lucha", reflexiona el mandatario para auto responder: "¡Qué poco saben de nosotros!".
En ese sentido, argumenta que cuanto más dura es la descalificación artera v maliciosa " más fuertes y unidos nos volvemos", para parafrasear a perón cuando enseñaba que renunciar a la política es renunciar a la lucha y que renunciar a la lucha es renunciar a la vida porque la vida es lucha.
Los acontecimientos
Insfrán aludió a la crítica realidad del mundo y a sus consecuencias dañinas para los sectores más débiles de la sociedad y comparó a esa ola de desocupados y expulsados de sus lugares de trabajo con las políticas adoptadas por el gobierno nacional para contener los efectos de esa emergencia global.
Mencionó que este año ocurrirán dos hechos que deben ser celebrados. Por un lado los 30 años de recuperación de la democracia y los diez años de la firma del acta de reparación histórica con el ex presidente Néstor Kirchner en lo que considera un reconocimiento al derecho inalienable de los formoseños a tener igualdad de oportunidades con el resto de la Nación.
Explicó que son dos referencias históricas significativas que sirven para comprender los desafíos y logros de las políticas de desarrollo provincial que sintetizó en una frase: "Vivimos tiempos en que los formoseños recuperamos el terreno perdido y nos preparamos para los grandes desafíos que se avecinan".
Reiteró que el modelo formoseño y el proyecto nacional se encuentran hermanados por una clara unidad de concepción.
"Por eso hemos apoyado a Néstor y apoyamos a Cristina desde el primer momento, con firmeza y convicción", reconoció.
Nuevas exigencias
El gobernador no ocultó su orgullo por la coherencia y la armonía con la que se administra el interés general, sin distinciones de ninguna naturaleza, sobre todo porque se aprecia que en cada ciudad, pueblo o paraje de la geografía provincial se han erigido obras altamente significativas para la vida de las comunidades.
Sin embargo, reconoce que las realizaciones logradas generan nuevas exigencias a las que considera naturales ante cada proceso de crecimiento ya que es consciente que "cuanto más avanzamos, mayores son los compromisos que nos planteamos".
En ese sentido, trajo a cuento el valor de la palabra empeñada y el modo como el gobierno fue puesto a prueba por el pueblo en ese sentido.
"Sabe el pueblo que la improvisación y la excusa fácil no forman parte de nuestra manera de gestionar", recalcó.
Trascartón anunció que se continuará con la construcción de lo que resta aún por hacer "desde el diálogo, el respeto y el cumplimiento de la Constitución que fija los derechos, deberes y obligaciones que todos sin excepciones, debemos cumplir".
Al mismo tiempo, advirtió que se aceptarán discursos ni propuestas que nieguen la relación y el contacto que hermanan a todos como formoseños para resaltar que se han integrado todas las culturas en un nuevo paradigma, derribando las fronteras del olvido y la exclusión con la realización de un modelo propio.
"Estamos convencidos que las culturas que habitan nuestra tierra son complementarias, no antagónica", confió para subrayar que todas ellas enriquecen el ser formoseño y que por esa razón se asumió el trabajo de la interculturalidad como herramienta legítima de integración, reconociendo la complejidad de los procesos históricos.
En esa dirección, precisó que ello incluye la política provincial en materia indígena a la que califica como pionera en el país así como integral porque está orientada a dar respuestas concretas a sus problemas reales y cotidianos.
Aquí se detuvo para aclarar que ese aspecto es el que diferencia a los formoseños de aquellos que desde la teoría, la distancia o el interés intentan condenar a las comunidades a una forma de subsistencia alejada de las necesidades actuales, pregonando una cosmovisión atávica de lo indígena, con resultados concretos y mensurables.
Durante su alocución, manifestó su gratitud al pueblo de Formosa por el apoyo que brinda a su gobierno para significar que "Mucho hemos hecho y mucho más haremos" para subrayar que las realizaciones dan fe del compromiso con el pueblo, con las mujeres por creer que era posible un presente mejor para ellas y con los jóvenes a los que definió como los nuevos soñadores que se van transformando en garantes de la consolidación y trascendencia en el tiempo del modelo propio.
Tras solicitar que no se permita que nadie pretenda atar a los formoseños al atraso y al pasado, opinó que las rémoras del odio solo pueden afectar a quien no encuentra otro solaz que la satisfacción de mezquinas pretensiones.
Insfrán dijo que en la construcción del bien común los formoseños han dado mucho por lo que resulta necesario afianzar los vínculos con solidaridad para continuar transformando la realidad local en beneficio de todos.
Alertó, sin embargo acerca de la existencia de mensajes de desunión y discordia que expresan intenciones e ideas alejadas del camino que los formoseños decidieron transitar y construir colectivamente.
"A muchas de estas voces quizás las podamos entender pues hacen del conflicto y el agravio su medio de vida y de hacer política, pero difícil es comprender que unos pocos formoseños se sumen a ese método en defensa de sus intereses personales y sectoriales", expresó.
Interpreta el gobernador que siempre resulta fácil destruir lo que se construyó en estos años con sacrificio y en armonía entre todos, no obstante lo cual reiteró, enfáticamente, que su compromiso con la paz social no tiene doblez. "Es un legado que los formoseños reconocemos y cuidamos porque así nos han inculcado nuestros mayores y porque somos consecuentes con nuestra doctrina, coherentes con nuestro pensamiento y consistentes en la acción", acotó.
Ataque a medios
Significó que los logros colectivos han hecho que las usinas mediáticas del poder se ocupen de Formosa.
"Nos atacan -explicó- porque aquí se demuestra lo que se consigue con un proyecto federal comprometido con los reales intereses del pueblo, lo que se logra con un accionar planificado y continuidad en la gestión"
"Nos quieren doblegar, especulando que con ello habremos de renunciar a la lucha", reflexiona el mandatario para auto responder: "¡Qué poco saben de nosotros!".
En ese sentido, argumenta que cuanto más dura es la descalificación artera v maliciosa " más fuertes y unidos nos volvemos", para parafrasear a perón cuando enseñaba que renunciar a la política es renunciar a la lucha y que renunciar a la lucha es renunciar a la vida porque la vida es lucha.
Los acontecimientos
Insfrán aludió a la crítica realidad del mundo y a sus consecuencias dañinas para los sectores más débiles de la sociedad y comparó a esa ola de desocupados y expulsados de sus lugares de trabajo con las políticas adoptadas por el gobierno nacional para contener los efectos de esa emergencia global.
Mencionó que este año ocurrirán dos hechos que deben ser celebrados. Por un lado los 30 años de recuperación de la democracia y los diez años de la firma del acta de reparación histórica con el ex presidente Néstor Kirchner en lo que considera un reconocimiento al derecho inalienable de los formoseños a tener igualdad de oportunidades con el resto de la Nación.
Explicó que son dos referencias históricas significativas que sirven para comprender los desafíos y logros de las políticas de desarrollo provincial que sintetizó en una frase: "Vivimos tiempos en que los formoseños recuperamos el terreno perdido y nos preparamos para los grandes desafíos que se avecinan".
Reiteró que el modelo formoseño y el proyecto nacional se encuentran hermanados por una clara unidad de concepción.
"Por eso hemos apoyado a Néstor y apoyamos a Cristina desde el primer momento, con firmeza y convicción", reconoció.
Nuevas exigencias
El gobernador no ocultó su orgullo por la coherencia y la armonía con la que se administra el interés general, sin distinciones de ninguna naturaleza, sobre todo porque se aprecia que en cada ciudad, pueblo o paraje de la geografía provincial se han erigido obras altamente significativas para la vida de las comunidades.
Sin embargo, reconoce que las realizaciones logradas generan nuevas exigencias a las que considera naturales ante cada proceso de crecimiento ya que es consciente que "cuanto más avanzamos, mayores son los compromisos que nos planteamos".
En ese sentido, trajo a cuento el valor de la palabra empeñada y el modo como el gobierno fue puesto a prueba por el pueblo en ese sentido.
"Sabe el pueblo que la improvisación y la excusa fácil no forman parte de nuestra manera de gestionar", recalcó.
Trascartón anunció que se continuará con la construcción de lo que resta aún por hacer "desde el diálogo, el respeto y el cumplimiento de la Constitución que fija los derechos, deberes y obligaciones que todos sin excepciones, debemos cumplir".
Al mismo tiempo, advirtió que se aceptarán discursos ni propuestas que nieguen la relación y el contacto que hermanan a todos como formoseños para resaltar que se han integrado todas las culturas en un nuevo paradigma, derribando las fronteras del olvido y la exclusión con la realización de un modelo propio.
"Estamos convencidos que las culturas que habitan nuestra tierra son complementarias, no antagónica", confió para subrayar que todas ellas enriquecen el ser formoseño y que por esa razón se asumió el trabajo de la interculturalidad como herramienta legítima de integración, reconociendo la complejidad de los procesos históricos.
En esa dirección, precisó que ello incluye la política provincial en materia indígena a la que califica como pionera en el país así como integral porque está orientada a dar respuestas concretas a sus problemas reales y cotidianos.
Aquí se detuvo para aclarar que ese aspecto es el que diferencia a los formoseños de aquellos que desde la teoría, la distancia o el interés intentan condenar a las comunidades a una forma de subsistencia alejada de las necesidades actuales, pregonando una cosmovisión atávica de lo indígena, con resultados concretos y mensurables.