Clausuran Jornadas sobre Desarrollo Local y Regional.

Al hablar en la clausura de las Jornadas sobre Desarrollo Local y regional llevadas a cabo con los auspicios del gobierno de la provincia y de la UNAF, la ministro de Economía, Inés Beatriz Lotto de Vecchietti, afirmó que en la planificación...

Al hablar en la clausura de las Jornadas sobre Desarrollo Local y regional llevadas a cabo con los auspicios del gobierno de la provincia y de la UNAF, la ministro de Economía, Inés Beatriz Lotto de Vecchietti, afirmó que en la planificación realizadora debe tenerse en cuenta la realidad de los pueblos en la convicción de que ninguna meta economicista habrá de prosperar si no se apoya en un tejido social fortalecido.
Admitió que la propuesta de crear redes o entornos territoriales que surgió del encuentro que finalizó ayer después de tres jornadas, se convierte en valiosa para que haya una comprensión y ejecución compartida y colectiva de los emprendimientos orientados a afianzar los vínculos entre los países y los bloques.
“Este encuentro” -dijo-se ha convertido en una nueva oportunidad para los participantes y quienes seguimos de cerca su evolución, alumbremos un poco más este camino de fraternidad que por los intereses que siempre han existido en la historia de los pueblos, sufre alteraciones y postergaciones en sus metas”.
Vecchietti confió que para “quienes abrazamos la doctrina que preconiza la justicia social, aprendimos que nadie se realiza en una sociedad que no se realiza”, subrayando que “aplicado este concepto al plano local, podemos decir que ninguna provincia se realiza en una Nación que no lo logra y mucho menos en una Región que no alcanza a avanzar más aceleradamente en sus objetivos iniciales”.


La conveniencia
y el bien común


La ministro hizo notar que en la organización de los esquemas de integración  se observa que muchas veces la conveniencia le gana al bien común.
“De allí que esta propuesta de crear redes o entornos territoriales que se propone desde estas jornadas, se conviertan en una nueva razón para entender que los grandes proyectos nacen de abajo hacia arriba, que las metas economicistas nunca alcanzarán arraigo si previamente no se fortalece el tejido social, cultural y sentimental de nuestras comunidades”, enfatizó..
Resaltó que la creación de la Universidad Nacional de Formosa es un ejemplo de las cosas que le ocurren a los pueblos cuando no hay una comprensión acabada de cómo se cumple con los objetivos comunes.
“Es que esta casa de estudios superiores debió esperar treinta años para que se comprendiese acerca de la necesidad de su existencia”, ejemplificó.
Al exponer ante una calificada audiencia en el Hotel Internacional de Turismo, describió que la provincia, con sus 50 años de vida, hace solamente dos que comenzó a ser tenida en cuenta por el gobierno nacional, para significar, enseguida, que la Reparación Histórica acordada entre el presidente de la Nación y el gobernador de la Provincia es, junto con la fundación de Formosa ocurrida en 1879 y la provincialización de 1955, la gran conquista de los formoseños que supieron unir esos tres conceptos, dejando de lado la individualidad que torna al ser humano no solidario y desorganizado.


El modelo formoseño


La ministro Vecchietti, comentó a los presentes que en diciembre de 1995 el doctor Gildo Insfrán puso a consideración de los formoseños una propuesta, un plan, un modelo, un  proyecto provincial que fue comprendido y votado en sucesivos comicios.
“Ese modelo, que está contenido en la propia Constitución Provincial, había sido elaborado a partir de ideas propias, de las disponibilidades financieras existentes y, sobre todo, desde la calificación de provincia inviable que había recibido Formosa por parte de quienes miraban a la periferia como desarticulada de la Nación”, indicó.
“Hoy, este modelo formoseño coincide plenamente con los mandamientos del proyecto Nacional impulsado desde hace poco mas de dos años por el doctor Néstor Kirchner y esa es la razón por la que confiamos en que sus contenidos se aceleren de modo tal que cuanto antes permita acrecentar la calidad de vida de nuestros comprovincianos y podamos armonizar nuestros sueños y realidades con los hermanos de la región”, anheló.


No solamente obras


Aclaró Vecchietti que no se refería  solamente a obras de infraestructura sino a medidas innovadoras y transformadoras que, a su criterio, están corrigiendo las inequidades para que cada formoseño, viva donde viva, se realice en su propia tierra.
Cree que este criterio aplicado a la Nación y la región es el que hay que enarbolar para que la integración sea efectiva-como el federalismo interno- y no meramente declamativa.
“De lo que se trata, entonces, es de fortalecer las bases que nos identifican en lo cultural, en lo educativo, en lo científico, en lo tecnológico, en lo que tiene que ver con el desarrollo humano. Porque el hombre formoseño es el centro de todos los esfuerzos y acciones del Estado que trabaja a partir de un criterio sistémico, para que no haya compartimientos estancos ni áreas indiferentes sino que todos accionemos integrados para que el resultado sea más efectivo y beneficioso para la gente”, exhortó.


La suma de aportes


Respecto a esa modalidad colectiva de actuar, considera que cada uno, desde su lugar de responsabilidad, debe sumar aportes intelectuales y prácticos para que no solamente se abogue por el desarrollo local sino también el regional, “ya que de ese modo estaremos arrumbando los comportamientos egoístas y sectoriales para que prevalezca lo comunitario, lo colectivo, lo solidario, lo fraterno”.
Relató que el gobernador de Formosa hablaba de estos temas como presidente de CRECENEA Litoral con sus pares del Brasil,  señalándoles que a los problemas de integración hay que responder con más integración.
“Y de allí que insista en la necesidad de que apliquemos  estas propuestas novedosas- como han surgido de estas jornadas- porque permitirán que profundicemos nuestras reflexiones acerca del escenario en el que nos toca convivir, compartir y protagonizar para que de ese modo influyamos en forma directa en todas aquellas situaciones que frenan nuestras intenciones de unirnos solidariamente para recrear una sociedad mejor”, subrayó.
Admite que el camino es largo, aunque también sugiere que no hay que detenerse.
“Es cierto que la meta, el objetivo, la llegada son importantes. Pero también lo es el avanzar los tramos del camino de este proceso que es irreversible pero que adelantará sus réditos en la medida que cada uno de nosotros comprenda la dimensión de su compromiso”, concluyó.

01-10-2005 | Cargada en Cultura - Fuente: Subsecretaría de Comunicación Social