Un importante número de niños pertenecientes a la Escuela Adventista de esta ciudad protagonizaron ayer un colorido desfile sobre la avenida 25 de Mayo ...
Un importante número de niños pertenecientes a la Escuela Adventista de esta ciudad protagonizaron ayer un colorido desfile sobre la avenida 25 de Mayo, ataviados con indumentarias y portando carteles con mensajes claros sobre los buenos hábitos de vida y la necesidad de cuidar el medio ambiente.
Este tipo de actividades es una constante en este establecimiento, en el entendimiento de que el papel de la educación en la formación de valores que hacen a una vida sana y también creando conciencia sobre la importancia de proteger el medio ambiente, tienen su impacto en el desarrollo de acciones sociales en general.
Es que la formación de valores y de buenos hábitos que se inicia en el hogar se va consolidando en la escuela y en la comunidad misma, con lo cual este tipo de propuestas de interesar al común de la gente, sin dudas constituye un valioso aporte para ir creando una base sólida sobre aspectos que tienen que ver con una vida sana, un espíritu conservacionista basado en el respeto de todas las formas de vida.
Aroldo Cabermater, director del establecimiento, el profesor Sebastián Ruiz Díaz, dos de los docentes, entre varios otros y también padres, que estuvieron acompañando a los escolares, significaron que todo lo vinculado al cuidado del medio ambiente, la importancia de promover la no contaminación, además de aspectos relacionados a generar conciencia por una vida sana, son temáticas de permanente abordaje en la escuela.
Incluso este tipo de actividades de generar conciencia en la ciudadanía, de antemano demanda un trabajo interactivo en clases a partir de ideas que los mismos niños traen a clase, y cada área en la escuela hacen su aporte dentro de una tarea articulada donde la comunidad educativa toda también contribuye activamente.
El agua, el buen descanso, el aire puro y su estrecha relación al no fumar o beber alcohol por todos los efectos nocivos a la salud, eran mensajes recurrentes a través de carteles, algunos de ellos alusivos de colores amarillos agradeciendo al Sol por todo lo bueno que significa para la vida sobre la tierra, otros que por ejemplo señalaban "aire, tierra, plantas, agua, animales, me ayudas a cuidarlos", y los referidos al "prohibido fumar y beber alcohol", eran mensajes claros de los niños.
Este tipo de actividades es una constante en este establecimiento, en el entendimiento de que el papel de la educación en la formación de valores que hacen a una vida sana y también creando conciencia sobre la importancia de proteger el medio ambiente, tienen su impacto en el desarrollo de acciones sociales en general.
Es que la formación de valores y de buenos hábitos que se inicia en el hogar se va consolidando en la escuela y en la comunidad misma, con lo cual este tipo de propuestas de interesar al común de la gente, sin dudas constituye un valioso aporte para ir creando una base sólida sobre aspectos que tienen que ver con una vida sana, un espíritu conservacionista basado en el respeto de todas las formas de vida.
Aroldo Cabermater, director del establecimiento, el profesor Sebastián Ruiz Díaz, dos de los docentes, entre varios otros y también padres, que estuvieron acompañando a los escolares, significaron que todo lo vinculado al cuidado del medio ambiente, la importancia de promover la no contaminación, además de aspectos relacionados a generar conciencia por una vida sana, son temáticas de permanente abordaje en la escuela.
Incluso este tipo de actividades de generar conciencia en la ciudadanía, de antemano demanda un trabajo interactivo en clases a partir de ideas que los mismos niños traen a clase, y cada área en la escuela hacen su aporte dentro de una tarea articulada donde la comunidad educativa toda también contribuye activamente.
El agua, el buen descanso, el aire puro y su estrecha relación al no fumar o beber alcohol por todos los efectos nocivos a la salud, eran mensajes recurrentes a través de carteles, algunos de ellos alusivos de colores amarillos agradeciendo al Sol por todo lo bueno que significa para la vida sobre la tierra, otros que por ejemplo señalaban "aire, tierra, plantas, agua, animales, me ayudas a cuidarlos", y los referidos al "prohibido fumar y beber alcohol", eran mensajes claros de los niños.