La mencionada comunidad experimenta últimamente una destacada expansión comunitaria, acompañada por las obras públicas que el Gobierno proyectó para los lugareños.
A pocos kilómetros de San Martín Dos, al noroeste provincial, se encuentra la comunidad aborigen de Osvaldo Quiroga, la cual en los últimos tiempos viene experimentado una importante expansión comunitaria, nuevo escenario que es acompañado por una serie de obras públicas que el gobierno diseñó para los lugareños.
Un centenar de familias -medio millar de personas- son las que allí habitan, y una de las facetas salientes reside en el interesante desarrollo que muestra por ejemplo el segmento productivo lugareño. Además del algodón (que tuvo un creciente hectareaje respecto al año pasado- le han sumado otros cultivos como el de hortalizas en general, que no sólo se centra en el aprovechamiento hogareño, sino para colocar los excedentes en los comercios de la zona, con lo cual sus ingresos se han visto robustecidos.
El mismo gobierno les ha cedido importantes hectáreas de reserva a los habitantes, a quienes además se les apoya con combustibles y semillas para que puedan ir consolidando sus esquemas productivos que de manera acentuada ha ingresado en una faceta de creciente diversificación.
Otro importante avance y muy valorado por los lugareños ha sido la llegada -el año pasado- del tendido de la red eléctrica, con lo cual no sólo ha significado un salto cualitativo en la calidad de vida, sino que además abre nuevos horizontes en torno a otros proyectos que antes se veían condicionados al no disponerse de este servicio.
El importante complejo educativo (contiene los niveles Inicial, Primario y Secundario) en ejecución y que en algunos meses más estará concluido, moderna estructura que incorporará además un playón deportivo, que sustituirá a la precaria escuela actual, es otro superlativo avance que también marca la atención a la creciente matrícula escolar.
Un centenar de familias -medio millar de personas- son las que allí habitan, y una de las facetas salientes reside en el interesante desarrollo que muestra por ejemplo el segmento productivo lugareño. Además del algodón (que tuvo un creciente hectareaje respecto al año pasado- le han sumado otros cultivos como el de hortalizas en general, que no sólo se centra en el aprovechamiento hogareño, sino para colocar los excedentes en los comercios de la zona, con lo cual sus ingresos se han visto robustecidos.
El mismo gobierno les ha cedido importantes hectáreas de reserva a los habitantes, a quienes además se les apoya con combustibles y semillas para que puedan ir consolidando sus esquemas productivos que de manera acentuada ha ingresado en una faceta de creciente diversificación.
Otro importante avance y muy valorado por los lugareños ha sido la llegada -el año pasado- del tendido de la red eléctrica, con lo cual no sólo ha significado un salto cualitativo en la calidad de vida, sino que además abre nuevos horizontes en torno a otros proyectos que antes se veían condicionados al no disponerse de este servicio.
El importante complejo educativo (contiene los niveles Inicial, Primario y Secundario) en ejecución y que en algunos meses más estará concluido, moderna estructura que incorporará además un playón deportivo, que sustituirá a la precaria escuela actual, es otro superlativo avance que también marca la atención a la creciente matrícula escolar.