Nueva planta de agua potable.

Demandará una inversión millonaria para ejecutarse un nuevo sistema maestro de agua potable, serán dos obras a realizarse de manera simultánea y que triplicará la capacidad actual. Así lo explicó el administrador del ENOHSA, Edgardo Bortolozzi...

El administrador del Ente Nacional de Obras Hídricas y Saneamiento (ENOHSA), Edgardo Bortolozzi, explicó en detalle todos los aspectos relativos al nuevo sistema maestro de agua potable que tendrá Formosa, obra de magnitud tal que acaba de anunciarse y que demandará una inversión superior a los 68 millones de pesos.
Dejó en claro el funcionario, que años atrás supo ocupar la titularidad del Servicio Provincial de Agua Potable y que ahora dirige el organismo nacional, que no se tratará simplemente de una planta de agua potable, sino de “todo un sistema maestro de optimización completo de producción y distribución de agua potable en toda la ciudad capital”.
A modo de introducción, explicó Bortolozzi que “crónicamente la ciudad adolece de un déficit de provisión de agua potable, lo que hace que, especialmente en temporada de altas temperaturas, comiencen a verificarse los problemas de presión y caudales en las áreas periféricas, generando un deterioro en el servicio”, añadiendo que “si bien esta situación fue tratada de resolver con diferentes intervenciones del estado provincial y Aguas de Formosa, ha llegado a un punto tal que resulta imposible afectar un volumen adicional, ya que está al límite la toma, el acueducto de aducción y todo lo que es la planta de producción, que por ahí podría admitir un ligero incremento”.
Para fortalecer esto recordó que la planta actual data del año 1943 y terminó de ejecutarse en 1950, y se trata de una infraestructura creada para atender a una población de 110.000 habitantes, cuando la realidad de Formosa capital habla de 220.000 habitantes.


Dos obras


Sostuvo que “con construir sólo una planta no resolvemos la situación. Por eso la obra se compone de dos partes, una de ellas es un nuevo sistema de producción de agua potable, que estará ubicada en el área del barrio Eva Perón, puntualmente en su límite noreste. Se trata de una nueva planta con su propia toma desde el río Paraguay, además de su acueducto de aducción, y con una planta de producción con capacidad de producir 6000 metros cúbicos por hora, ante los 2300 actuales del que dispone hoy la ciudad”.
“A esta obra, que tiene un presupuesto de casi 44 millones de pesos, hay que adicionarle la segunda parte, que aclaro se ejecutará de manera simultánea, se trata de todo un esquema de nexos maestros y centros de distribución, el que en su caso demandará una inversión superior a los 24 millones de pesos, o sea un global aproximado de millones entre ambas”.
Explicó sobre esta segunda obra de manera sencilla: “La planta produce agua potable, pero para llevar ese líquido a la canilla de cada vecino hay que tener los conductos adecuados y las redes maestras, las cuales forman parte del proyecto como una segunda obra, ya que se tratan de licitaciones independientes pero simultáneas”.
Indicó Bortolozzi que “çel proyecto ya está terminado, se están haciendo algunos ajustes y teniendo en cuenta el “mega-plan” de viviendas que se ejecutará en la ciudad. En función de estas nuevas radicaciones estamos ajustando nuevos diámetros y diseños, y así evitar fallas de origen”.


Vulnerabilidad baja


Abundó diciendo en torno a la actual infraestructura que se dispone que “la proyección a los próximos 25 años es una tendencia hacia la transformación de lo que hoy es la planta central de producción de la ciudad en un centro de distribución. O sea que quedará una infraestructura que sólo estará absorbiendo picos de demanda”.
Destacó Bortolozzi que “Formosa estará teniendo una ventaja muy grande y que muy pocas ciudades disponen, y creo que sólo Paraná donde desde el ENOHSA estamos ejecutando una obra, es que tendrá una vulnerabilidad muy baja en todo el sistema, y me refiero a riesgo de corte. Esto porque dispondrá de dos sistemas con muy buena capacidad de incorporación de agua en forma inmediata”.
“La actual planta quedará trabajando en una primera instancia a valores nominal o no forzada, y por cierto que tendrá que desarrollar una calidad de servicio excelente en cualquier punto de la ciudad”, subrayó.


Redefinición contractual


Sostuvo que “Lo que está haciendo el ENOHSA a partir de la decisión del señor presidene Néstor Kirchner, es ejecutar infraestructuras maestras de agua potable para mejorar la calidad de vida a cada uno de los argentinos”.
Tras ello dejó en claro que “la situación de la concesión, o sea quién opera el servicio en cada punto del país, donde tenemos 3500 centros poblados con sus propios esquemas jurídicos para prestar el servicio: cooperativas, municipios, privados, empresas mixtas, en una cuestión anexa para nosotros”.
Es así que afirmó que en el caso de Formosa “si esta inversión estaba prevista que la hiciera Aguas de Formosa, de hecho tendrá que haber una redefinición de la relación contractual, en la cual se redefinan metas, alcances y se plantee un nuevo contrato”.
Sobre este aspecto advirtió que “todas las concesiones de los ´90 en líneas generales no planteaban obras, sino metas de cobertura. O sea que la empresa que tomara determinada concesión tendría que cubrir durante tantos años una determinada cobertura en agua y cloacas, lo que vulgarmente decimos una mancha”, advirtiendo no obstante que “estas manchas se han incumplido salvajemente de un extremo a otro del país, lo que resta por saber si lo hicieron en un 10, 20 o 90 por ciento. Es algo que pasa en el conurbano bonaerense y en todos los distritos”.
“Ahora con la nueva visión del señor presidente de ser un servicio esencial, estratégico y vital, las alternativas de fuste eran dos: La primera, seguir con una estrategia economicista de la cosa y tratar de que los concesionarios pusieran toda la inversión para cumplir con esos contratos, que de hecho se está haciendo por un lado en cada poder concedente y, por la otra, tratar de ejecutar la mayor cantidad de infraestructura para reducir la brecha de todos esos ocho millones de argentinos que no tienen agua potable o esos 22 millones que carecen de cloaca”, ponderó.


Cloacas


Sobre otro de los servicios, en este caso el cloacal, explicó Bortolozzi que “lo que estamos haciendo es un proceso de crecimiento natural no salvaje, definiendo en líneas generales la infraestructura que cada jurisdicción necesita, o sea que se cubre una demanda y de inmediato se habilita a una siguiente, algo que el gobernador Gildo Insfrán remarca siempre”.
“En la planificación integral que estamos haciendo en el ENOHSA de cada una de las jurisdicciones, está justamente el de cerrar esa brecha. El sistema de cloacas está en carpeta, hay un proyecto integral que está desarrollando la provincia, pero primero está el tema agua”, abundó.
Comentó aquí que en nuestra ciudad, en los barrios La Pilar y Obrero en el marco del “Plan Agua más Trabajo” de manera conjunta con el municipio a través de la tarea de cooperativistas se está ejecutando una extensión de redes cloacales. “Se trata de un piloto en zonas donde ya existe infraestructura maestra y se requiere una expansión”, indicó.
También marcó el hecho de que desde Asunción hacia abajo, o sea a lo largo de los ríos Paraná y Paraguay no existe una sola planta de tratamiento de efluentes cloacales, ya que “este es un país que vivió de espaldas al saneamiento”, marcando que “existen 8 millones de argentinos sin agua potable, por lo que es evidente lo lejos que estamos de tener plantas de tratamiento de residuos cloacales en las grandes ciudades. Formosa, al igual que otras grandes ciudades, como Resistencia, Rosario, Corrientes o Santa Fe, tendrán un sistema de este tipo, aunque se trata de un proceso titánico de inversiones”, concluyó.

15-08-2005 | Cargada en Obras - Fuente: Subsecretaría de Comunicación Social