Se renueva el gesto oficial con la comunidad por la festividad de Reyes con la distribución de juguetes para los niños de todo el territorio formoseño.
Coincidiendo con la festividad de Reyes- que marca la culminación de las cristianas celebraciones de fin de año que arrancaron el 8 de diciembre- el gobierno de la provincia prosigue con la serie de adhesiones directas a la vida comunitaria con la distribución de más de 180.000 juguetes para los niños del nivel inicial y de la escuela primaria de todo el territorio formoseño.
Quienes trabajaron en las coordinación de estas actividades, revelaron que los regalos para el mundo infantil se entregarán hoy a partir de las 9 horas en las distintas escuelas urbanas y rurales distribuidas a lo largo y ancho de la provincia a partir del criterio de la igualdad de oportunidades y de afirmar el concepto justicialista de que "los únicos privilegiados son los niños", todo ello bajo la premisa de los preceptos de inclusión social y equidad que el gobierno provincial que caracterizan a las acciones en las distintas áreas.
De este modo continua los gestos de "real inclusión" y de "equidad" a través de una larga agenda de actos y acontecimientos públicos que arrancaron el 8 de diciembre pasado con la participación de las autoridades en las ceremonias litúrgicas llevadas a cabo con motivo de la celebración del Día de la Inmaculada Concepción que tuvo su epilogo con la multitudinaria misa concelebrada y presidida por el obispo de Formosa en el Anfiteatro de la Juventud.
También a partir de entonces se promovió el armado de pesebres navideños para rescatar el significado moral trascendente que tuvo para la humanidad el nacimiento en Belén de Jesús, uno de los cuales fue organizado en la misma planta baja de la Casa de Gobierno y otros en el centro Cultural Vuelta Fermosa en lo que constituye un mensaje de afirmación del valor de la familia como célula básica de la sociedad.
Mientras tanto, la Cantata Navideña- con coros y conjuntos - recorrió los barrios, distintos sectores de la zona céntrica y hasta el interior provincial, con villancicos y temas navideños que fueron mixturados con aspectos íntimamente ligados a la identidad cultural de los formoseños y que convocan a la amistad la paz, las buenas relaciones, el sentido de solidaridad y de altruismo, el respeto a los mayores y a los símbolos patrios, el amor a los padres y al terruño y al compromiso con Formosa para que alcance su destino de grandeza.
En los finales de 2008, se repitió el pesebre viviente en la plazoleta de la Cruz del Norte donde centenares de personas hicieron caso omiso a la inestabilidad del tiempo y se mantuvieron firmes para seguir las alternativas de la misa y del mensaje del cura párroco de la Iglesia Catedral "Nuestra Señora Carmen", padre Raúl Méndez.
Fue un acontecimiento emotivo porque congregó a la familia toda, desde los recién nacidos pasando por sus padres, padrinos y hasta sus abuelos y bisabuelos, todos ellos autoconvocados en un acontecimiento que ya ha echado raíces en la agenda cultural y sentimental de los formoseños.
También la Municipalidad de Formosa se sumó a los festejos al igual que el resto de las comunas del interior.
Esta capital lució iluminada, con el tradicional árbol de Navidad con luces multicolores en la fuente del Irupé ubicada en pleno centro de la plaza San Martín y con adornos a lo largo de las plazoletas y paseos de las avenidas ciudadanas.
Se recreó un clima familiar que fue complementado, exitosamente, con un operativo que movilizó a jefes, oficiales, suboficiales, agentes y cadetes de la Policía de la provincia y que permitió que las jornadas festivas se desarrollaran con normalidad y orden, con accidentes mínimos y cifras decrecientes respecto de años anteriores.
Además, estuvo en alerta todo el sistema de salud con los distintos hospitales y centros de salud dispuestos para reaccionar frente a cualquier emergencia a partir de los transportes que realizaban las unidades del SIPEC.
Esa es la razón por la que esta culminación de los festejos de fin de año con la entrega de juguetes que renuevan la ilusión de los mas pequeños y remarca la alegría en los más grandecitos, constituye también el cierre de una gestión planificada que se pergeño con el propósito de estimular a la comunidad acerca de la validez y significación de los valores espirituales en un momento de la vida del mundo donde el desapego de ellos está conmoviendo el orden y la paz.
Las autoridades reconocieron que esta celebración desde finales de 2008 y principios de 2009 marcan un estilo de relación que tiene su hoja de ruta en el mismo modelo formoseño para el desarrollo provincial que, además de los planes de obras y acciones de gobierno, recrea lo que se ha dado en llamar el nuevo hombre formoseño dotado de ese bagaje virtuoso que le permite pensar con expectativas positivas el tiempo que se avecina y sobre todo encarar con fortaleza las actuales contingencias para las cuales se ha previsto un plan de creación de trabajo.
Quienes trabajaron en las coordinación de estas actividades, revelaron que los regalos para el mundo infantil se entregarán hoy a partir de las 9 horas en las distintas escuelas urbanas y rurales distribuidas a lo largo y ancho de la provincia a partir del criterio de la igualdad de oportunidades y de afirmar el concepto justicialista de que "los únicos privilegiados son los niños", todo ello bajo la premisa de los preceptos de inclusión social y equidad que el gobierno provincial que caracterizan a las acciones en las distintas áreas.
De este modo continua los gestos de "real inclusión" y de "equidad" a través de una larga agenda de actos y acontecimientos públicos que arrancaron el 8 de diciembre pasado con la participación de las autoridades en las ceremonias litúrgicas llevadas a cabo con motivo de la celebración del Día de la Inmaculada Concepción que tuvo su epilogo con la multitudinaria misa concelebrada y presidida por el obispo de Formosa en el Anfiteatro de la Juventud.
También a partir de entonces se promovió el armado de pesebres navideños para rescatar el significado moral trascendente que tuvo para la humanidad el nacimiento en Belén de Jesús, uno de los cuales fue organizado en la misma planta baja de la Casa de Gobierno y otros en el centro Cultural Vuelta Fermosa en lo que constituye un mensaje de afirmación del valor de la familia como célula básica de la sociedad.
Mientras tanto, la Cantata Navideña- con coros y conjuntos - recorrió los barrios, distintos sectores de la zona céntrica y hasta el interior provincial, con villancicos y temas navideños que fueron mixturados con aspectos íntimamente ligados a la identidad cultural de los formoseños y que convocan a la amistad la paz, las buenas relaciones, el sentido de solidaridad y de altruismo, el respeto a los mayores y a los símbolos patrios, el amor a los padres y al terruño y al compromiso con Formosa para que alcance su destino de grandeza.
En los finales de 2008, se repitió el pesebre viviente en la plazoleta de la Cruz del Norte donde centenares de personas hicieron caso omiso a la inestabilidad del tiempo y se mantuvieron firmes para seguir las alternativas de la misa y del mensaje del cura párroco de la Iglesia Catedral "Nuestra Señora Carmen", padre Raúl Méndez.
Fue un acontecimiento emotivo porque congregó a la familia toda, desde los recién nacidos pasando por sus padres, padrinos y hasta sus abuelos y bisabuelos, todos ellos autoconvocados en un acontecimiento que ya ha echado raíces en la agenda cultural y sentimental de los formoseños.
También la Municipalidad de Formosa se sumó a los festejos al igual que el resto de las comunas del interior.
Esta capital lució iluminada, con el tradicional árbol de Navidad con luces multicolores en la fuente del Irupé ubicada en pleno centro de la plaza San Martín y con adornos a lo largo de las plazoletas y paseos de las avenidas ciudadanas.
Se recreó un clima familiar que fue complementado, exitosamente, con un operativo que movilizó a jefes, oficiales, suboficiales, agentes y cadetes de la Policía de la provincia y que permitió que las jornadas festivas se desarrollaran con normalidad y orden, con accidentes mínimos y cifras decrecientes respecto de años anteriores.
Además, estuvo en alerta todo el sistema de salud con los distintos hospitales y centros de salud dispuestos para reaccionar frente a cualquier emergencia a partir de los transportes que realizaban las unidades del SIPEC.
Esa es la razón por la que esta culminación de los festejos de fin de año con la entrega de juguetes que renuevan la ilusión de los mas pequeños y remarca la alegría en los más grandecitos, constituye también el cierre de una gestión planificada que se pergeño con el propósito de estimular a la comunidad acerca de la validez y significación de los valores espirituales en un momento de la vida del mundo donde el desapego de ellos está conmoviendo el orden y la paz.
Las autoridades reconocieron que esta celebración desde finales de 2008 y principios de 2009 marcan un estilo de relación que tiene su hoja de ruta en el mismo modelo formoseño para el desarrollo provincial que, además de los planes de obras y acciones de gobierno, recrea lo que se ha dado en llamar el nuevo hombre formoseño dotado de ese bagaje virtuoso que le permite pensar con expectativas positivas el tiempo que se avecina y sobre todo encarar con fortaleza las actuales contingencias para las cuales se ha previsto un plan de creación de trabajo.