El novedoso pesebre recrea el nacimiento de Jesús y revaloriza a la familia como célula básica de la comunidad.
Desde el 25 de diciembre, en la jornada de Navidad, el Niño Jesús ya fue integrado al pesebre que fuese armado en vísperas del 8 de diciembre en el hall de la planta baja de la sede del poder Ejecutivo, en Belgrano y José María Uriburu.
El novedoso pesebre recrea el nacimiento de Jesús y revaloriza a la familia como célula básica de la comunidad.
Este año el armado estuvo a cargo de alumnos de la carrera de Artes Visuales del Instituto Superior de Arte dirigidos por su regente, Alfredo Cerdán.
Había llamado la atención de los chicos que lo visitaban diariamente que si bien es cierto aparecían las figuras de los tres reyes magos así como de María y José en el humilde establo que evoca el trascendente hecho de Belén, en Medio Oriente, que no estuviese el Niño Dios.
Y fueron los mayores y las mujeres policías que se encargan de la seguridad en el acceso a la Casa de Gobierno quienes le explicaban que todo sería completado tras la medianoche del 24.
Así fue y ya el pesebre luce completo, con la figura central de Jesús.
Esta iniciativa del Ministerio Secretaria General del PEP, se suma a las que se llevan a cabo en distintos puntos de la ciudad, entre ellos en la Cruz del Norte, donde se erige el pesebre más grande del país y en el Centro Cultural "Vuelta Fermosa" en la zona portuaria donde también se monta uno de grandes dimensiones.
Esta ponderación de la Navidad como acontecimiento esencial para el reencuentro y el accionar común de los seres humanos en la conformación de una sociedad cálida y unida.
Además, se destaca que la reafirmación de los hechos del pasado religioso, al que el pueblo formoseño está íntimamente ligado, no solamente tiene significación para fortalecer el enriquecimiento espiritual comunitario de modo tal que se embarque en la empresa del bien común sirviendo, sobre todo, a los anhelos de solidaridad que surgen de las distintas franjas sociales y al mismo tiempo a los que necesitan de gestos y acompañamientos altruistas para que abracen la justicia social.
La exaltación del nacimiento de Jesús, como prenda de unidad de los formoseños, tendrá su correlato con otras presentaciones, como las que van a ocurrir en la Cruz del Norte y en la zona portuaria, así como en los propios hogares de miles de familias formoseñas.
El novedoso pesebre recrea el nacimiento de Jesús y revaloriza a la familia como célula básica de la comunidad.
Este año el armado estuvo a cargo de alumnos de la carrera de Artes Visuales del Instituto Superior de Arte dirigidos por su regente, Alfredo Cerdán.
Había llamado la atención de los chicos que lo visitaban diariamente que si bien es cierto aparecían las figuras de los tres reyes magos así como de María y José en el humilde establo que evoca el trascendente hecho de Belén, en Medio Oriente, que no estuviese el Niño Dios.
Y fueron los mayores y las mujeres policías que se encargan de la seguridad en el acceso a la Casa de Gobierno quienes le explicaban que todo sería completado tras la medianoche del 24.
Así fue y ya el pesebre luce completo, con la figura central de Jesús.
Esta iniciativa del Ministerio Secretaria General del PEP, se suma a las que se llevan a cabo en distintos puntos de la ciudad, entre ellos en la Cruz del Norte, donde se erige el pesebre más grande del país y en el Centro Cultural "Vuelta Fermosa" en la zona portuaria donde también se monta uno de grandes dimensiones.
Esta ponderación de la Navidad como acontecimiento esencial para el reencuentro y el accionar común de los seres humanos en la conformación de una sociedad cálida y unida.
Además, se destaca que la reafirmación de los hechos del pasado religioso, al que el pueblo formoseño está íntimamente ligado, no solamente tiene significación para fortalecer el enriquecimiento espiritual comunitario de modo tal que se embarque en la empresa del bien común sirviendo, sobre todo, a los anhelos de solidaridad que surgen de las distintas franjas sociales y al mismo tiempo a los que necesitan de gestos y acompañamientos altruistas para que abracen la justicia social.
La exaltación del nacimiento de Jesús, como prenda de unidad de los formoseños, tendrá su correlato con otras presentaciones, como las que van a ocurrir en la Cruz del Norte y en la zona portuaria, así como en los propios hogares de miles de familias formoseñas.