Al hablar en la apertura del II Encuentro de Pueblos Originarios de América, el ministro Alberto Areco al dar la bienvenida a las delegaciones...
Al hablar en la apertura del II Encuentro de Pueblos Originarios de América, el ministro Alberto Areco al dar la bienvenida a las delegaciones continente advirtió que se había intentado que tuviesen una visión diferente del propósito de los formoseños y de los americanos de establecer una unidad definitiva y sólida, bajo una sola bandera que ampare a todos en paz, seguridad y justicia social.
“Queremos constituir un puente de unión entre los pueblos originarios y esta nueva conciencia occidental, tratando de rescatar nuestras raíces .,nuestra cultura, en un marco de mutuo respeto y basados fundamentalmente en una profunda espiritualidad, en un sitio donde no tienen lugar ni el odio ni el resentimiento pues estamos convencidos de que solamente sirve ponerle el alma a estas cosas si el objetivo es construir”,remarcó.
Evocó expresiones del pilagá Ramón Tapiceno quien aludió a una leyenda que según los ancianos y sabios se iba a producir en este punto de la América del Sur y que existe la casi convicción de que es el lugar es Formosa.
Al contar la leyenda, el funcionario dijo que “ en algún lugar del sur de la inmensa y generosa América iba a ocurrir el encuentro del águila ,el cóndor y el quetzal, las tres aves sagradas con todo lo que ellas representan, cargadas de sabiduría, con la cosmovida del centro, del norte y del sur”.
“Y aquí estamos tobas, wichí y pilagas y descendientes de guaraníes, orgullosos de poder recibir a nuestros hermanos de América, de poder abrirles las puertas de esta Formosa, que es la de entrada al país y de recibirlos en esta casa nuestra que es también la de todos ustedes”,certificó.
“Estamos unidos en un evento único y más integrales de América como lo han dicho ustedes mismo”, acotó para significar que este año el encuentro esta cargado de espiritualidad.
“Sé que muchos se han sorprendido porque esta iniciativa ha surgido del propio seno del gobierno provincial y algunos sin conocernos, sin haber estado en la provincia, sin saber de nuestra realidad trataron de darles una perspectiva diferente de lo que está ocurriendo aquí”,insistó en obvia alusión a algunas posturas críticas acerca del foro que está en marcha.
Areco reconoció que seguramente faltan cosas por hacer como en otras provincias y países.”Pero desde ningún aspecto se puede hablar de discriminación”, enfatizó.
“Si existiese, la hay para el criollo y para el aborigen. Si faltase algo, ocurre para ambos”, avanzó.
Indicó que todo lo que se ha construido a partir del modelo formoseño y lo que se distribuyó desde las decisiones políticas del gobernador Insfrán se hizo equitativamente en todo el territorio, incluyéndose a las comunidades nativas de los tobas, pilagas y wichí.
Aseguró que “hay algunos que creen o por lo menos hablan románticamente de algo que ya no tienen y nosotros en Formosa somos 40.000 almas indígenas y muchos descendientes de guaraníes, algunos, como yo, en función de gobierno”.
El ministro confió que se trata que la provincia responda a su doctrina de gobierno, que haya una verdadera justicia social.
“Escuchamos atentamente las vicisitudes y los padeceres de algunos hermanos de otros países. Seguramente si hay algún error, trataremos de corregir y de construir entre todos en esta America, ya no simplemente en la Argentina, porque es el continente el que nos tiene que abrazar a todos”, recalcó.
Alberto Areco tras insistir en su bienvenida dijo que Formosa es el lugar donde los indígenas de América pueden reunirse con absoluta confianza.”Nosotros estamos abiertos y tratamos de compartir, de respetar la diversidad cultural y de que también nos respeten”, expresó Areco para solicitar luego que “nos ayuden en esto ,disfruten de Formosa y cuenten, cuando se vayan de aquí, que no es lo que les quisieron decir”.
Al final, también agradeció el apoyo de Insfrán para la realización del evento e hizo notar que coincide con su manera de pensar y de sentir.
“Queremos constituir un puente de unión entre los pueblos originarios y esta nueva conciencia occidental, tratando de rescatar nuestras raíces .,nuestra cultura, en un marco de mutuo respeto y basados fundamentalmente en una profunda espiritualidad, en un sitio donde no tienen lugar ni el odio ni el resentimiento pues estamos convencidos de que solamente sirve ponerle el alma a estas cosas si el objetivo es construir”,remarcó.
Evocó expresiones del pilagá Ramón Tapiceno quien aludió a una leyenda que según los ancianos y sabios se iba a producir en este punto de la América del Sur y que existe la casi convicción de que es el lugar es Formosa.
Al contar la leyenda, el funcionario dijo que “ en algún lugar del sur de la inmensa y generosa América iba a ocurrir el encuentro del águila ,el cóndor y el quetzal, las tres aves sagradas con todo lo que ellas representan, cargadas de sabiduría, con la cosmovida del centro, del norte y del sur”.
“Y aquí estamos tobas, wichí y pilagas y descendientes de guaraníes, orgullosos de poder recibir a nuestros hermanos de América, de poder abrirles las puertas de esta Formosa, que es la de entrada al país y de recibirlos en esta casa nuestra que es también la de todos ustedes”,certificó.
“Estamos unidos en un evento único y más integrales de América como lo han dicho ustedes mismo”, acotó para significar que este año el encuentro esta cargado de espiritualidad.
“Sé que muchos se han sorprendido porque esta iniciativa ha surgido del propio seno del gobierno provincial y algunos sin conocernos, sin haber estado en la provincia, sin saber de nuestra realidad trataron de darles una perspectiva diferente de lo que está ocurriendo aquí”,insistó en obvia alusión a algunas posturas críticas acerca del foro que está en marcha.
Areco reconoció que seguramente faltan cosas por hacer como en otras provincias y países.”Pero desde ningún aspecto se puede hablar de discriminación”, enfatizó.
“Si existiese, la hay para el criollo y para el aborigen. Si faltase algo, ocurre para ambos”, avanzó.
Indicó que todo lo que se ha construido a partir del modelo formoseño y lo que se distribuyó desde las decisiones políticas del gobernador Insfrán se hizo equitativamente en todo el territorio, incluyéndose a las comunidades nativas de los tobas, pilagas y wichí.
Aseguró que “hay algunos que creen o por lo menos hablan románticamente de algo que ya no tienen y nosotros en Formosa somos 40.000 almas indígenas y muchos descendientes de guaraníes, algunos, como yo, en función de gobierno”.
El ministro confió que se trata que la provincia responda a su doctrina de gobierno, que haya una verdadera justicia social.
“Escuchamos atentamente las vicisitudes y los padeceres de algunos hermanos de otros países. Seguramente si hay algún error, trataremos de corregir y de construir entre todos en esta America, ya no simplemente en la Argentina, porque es el continente el que nos tiene que abrazar a todos”, recalcó.
Alberto Areco tras insistir en su bienvenida dijo que Formosa es el lugar donde los indígenas de América pueden reunirse con absoluta confianza.”Nosotros estamos abiertos y tratamos de compartir, de respetar la diversidad cultural y de que también nos respeten”, expresó Areco para solicitar luego que “nos ayuden en esto ,disfruten de Formosa y cuenten, cuando se vayan de aquí, que no es lo que les quisieron decir”.
Al final, también agradeció el apoyo de Insfrán para la realización del evento e hizo notar que coincide con su manera de pensar y de sentir.