Esta provincia ha sido incluida en el Plan Nacional de Manejo del Algarrobo por lo que en el CEDEVA de Laguna Yema y en el de Misión Tacaaglé se realizarán plantaciones con miras a su estudio de progenie.
Esta provincia ha sido incluida en el Plan Nacional de Manejo del Algarrobo al designársela, junto a otras de la región chaqueña, para que en el Centro de Validación de Tecnologías Agropecuarias de Laguna Yema y próximamente en el de Misión Tacaaglé se realicen plantaciones con miras a su estudio de progenie, esto es de sus particularidades genéticas, para la obtención en el futuro de madera de alta calidad y la recuperación del ecosistema.
El ingeniero Aníbal Verga, responsable de dicho programa, destacó durante el encuentro que Formosa se está posicionando como la principal productora de algarrobo del país explicando que la propuesta surge para responder a la escasez en la oferta de madera de calidad; la creciente presión sobre el bosque nativo; las extensiones de tierras improductivas abandonada por la agricultura y el deterioro de la capacidad productiva del bosque remanente.
Así lo reveló el ingeniero Ricardo Vailatti, profesional del PRODECO, al término de la Segunda Jornada de Producción de Algarrobo realizada en la sede del CEDEVA de Yema durante la cual también se dieron a conocer los resultados estadísticos de estudios que se vienen realizando allí sobre ganancia de peso de cabrillas en alimentación bajo dosel de algarrobo, en este caso con pastos Gaston Panic.
Sobre el particular dijo que los resultados son muy alentadores para lo cual se compara cuales es la ganancia de peso y el comportamiento de los animales bajo el algarrobo con relación al pastoreo tradicional en los montes nativos de la provincia.
Vailatti dijo que hay un plan para llegar a las 2.000 hectáreas y que la dinámica que alcance dependerá del interés que vaya tomando esta actividad a medida que se vaya intensificando la difusión de los alcances del plan de incentivo así como de las ventajas de plantar algarrobo desde el punto de vista ganadero, pero con un manejo de la planta lograr en términos de largo plazo, unos 20 años, turnos de corte importantes.
Las exposiciones
Durante las jornadas, se ofrecieron, además, charlas sobre poda y manejo de plantas haciéndose hincapié en la Ley 25.080 y acerca del apoyo que brinda el gobierno de la provincia para el desarrollo forestal en Formosa.
Participaron de las jornadas el presidente del programa Nacional del Algarrobo, ingeniero Aníbal Verga del INTA Córdoba; el coordinador general del Programa de Desarrollo del Centro Oeste Formoseño, ingeniero Jorge Balonga; el administrador del CEDEVA Yema, Héctor Taboada; representantes del INTA y de las universidades de Formosa y Santiago del Estero; representantes de distintas ONG que trabajan con el tema algarrobo en las comunidades aborígenes y productores forestales así como pequeños productores líderes con los que se trabaja en esa zona para la promoción del algarrobo. También estuvieron estudiantes de la Escuela Agro técnica wichí y docentes.
La jornada incluyó charlas en gabinete sobre la situación del cultivo del algarrobo en Formosa a cargo del ingeniero Gustavo Rhiner y manejo de las forestaciones jóvenes de prosopis alba gris", por parte del ingeniero Víctor Pérez, ambos de la dirección de Bosques de la provincia.
También expuso el doctor Sebastián de la Rosa , del CEDEVA de Yema, sobre "ensayo de suplementario en cabras con chauchas de algarrobo y manejo silvopastoril".
Luego se desarrollaron las actividades de campo con la recorrida realizada a la plantación de ensayo nacional de progenie y al huerto semillero del CEDEVA.
Vailatti, al consultársele acerca de la realidad del algarrobo, manifestó que si se continúa por el camino de la no forestación el algarrobo será historia en poco tiempo ya que en la actualidad los diámetros de corte cada vez son menores, razón por la cual se encaró un plan que incluye, en el caso provincial, el fomento de la forestación.
Aclaró que esa decisión no solamente se ha impulsado a partir de la madera en sí, sino desde el apoyo a los denominados sistemas silvopastoriles, revelando que en la actualidad se cuenta con 900 hectáreas forestadas reales y certificadas que fueron logradas en los últimos tres años.
Son atendidas por productores que recibieron los correspondientes subsidios nacionales a través de la ley 25.080 y el aporte crediticio del gobierno provincial para dar inicio a este plan de forestación.
Acción articulada
El ingeniero Vailatti rescató como valiosa la acción articulada entre la Nación y las provincias para promover el mejoramiento genético de los cultivares de algarrobo para estar en condiciones de entregarles a los productores en un futuro no muy lejano arboles cada vez mejores que impliquen menores gastos de mano de obra en el manejo de las plantas y para lograr mejores fustes para los aserraderos.
Explicó que no es necesario el desmonte para plantar algarrobo y que hay mucha posibilidad de hacerlo en suelos degradados y en otros exclusivos de pastoreo que no tiene capacidad agrícola que pueden aprovecharse para ese exponente del bosque nativo, sin que se modifique el uso ganadero original que el productor le está dando.
El ingeniero Aníbal Verga, responsable de dicho programa, destacó durante el encuentro que Formosa se está posicionando como la principal productora de algarrobo del país explicando que la propuesta surge para responder a la escasez en la oferta de madera de calidad; la creciente presión sobre el bosque nativo; las extensiones de tierras improductivas abandonada por la agricultura y el deterioro de la capacidad productiva del bosque remanente.
Así lo reveló el ingeniero Ricardo Vailatti, profesional del PRODECO, al término de la Segunda Jornada de Producción de Algarrobo realizada en la sede del CEDEVA de Yema durante la cual también se dieron a conocer los resultados estadísticos de estudios que se vienen realizando allí sobre ganancia de peso de cabrillas en alimentación bajo dosel de algarrobo, en este caso con pastos Gaston Panic.
Sobre el particular dijo que los resultados son muy alentadores para lo cual se compara cuales es la ganancia de peso y el comportamiento de los animales bajo el algarrobo con relación al pastoreo tradicional en los montes nativos de la provincia.
Vailatti dijo que hay un plan para llegar a las 2.000 hectáreas y que la dinámica que alcance dependerá del interés que vaya tomando esta actividad a medida que se vaya intensificando la difusión de los alcances del plan de incentivo así como de las ventajas de plantar algarrobo desde el punto de vista ganadero, pero con un manejo de la planta lograr en términos de largo plazo, unos 20 años, turnos de corte importantes.
Las exposiciones
Durante las jornadas, se ofrecieron, además, charlas sobre poda y manejo de plantas haciéndose hincapié en la Ley 25.080 y acerca del apoyo que brinda el gobierno de la provincia para el desarrollo forestal en Formosa.
Participaron de las jornadas el presidente del programa Nacional del Algarrobo, ingeniero Aníbal Verga del INTA Córdoba; el coordinador general del Programa de Desarrollo del Centro Oeste Formoseño, ingeniero Jorge Balonga; el administrador del CEDEVA Yema, Héctor Taboada; representantes del INTA y de las universidades de Formosa y Santiago del Estero; representantes de distintas ONG que trabajan con el tema algarrobo en las comunidades aborígenes y productores forestales así como pequeños productores líderes con los que se trabaja en esa zona para la promoción del algarrobo. También estuvieron estudiantes de la Escuela Agro técnica wichí y docentes.
La jornada incluyó charlas en gabinete sobre la situación del cultivo del algarrobo en Formosa a cargo del ingeniero Gustavo Rhiner y manejo de las forestaciones jóvenes de prosopis alba gris", por parte del ingeniero Víctor Pérez, ambos de la dirección de Bosques de la provincia.
También expuso el doctor Sebastián de la Rosa , del CEDEVA de Yema, sobre "ensayo de suplementario en cabras con chauchas de algarrobo y manejo silvopastoril".
Luego se desarrollaron las actividades de campo con la recorrida realizada a la plantación de ensayo nacional de progenie y al huerto semillero del CEDEVA.
Vailatti, al consultársele acerca de la realidad del algarrobo, manifestó que si se continúa por el camino de la no forestación el algarrobo será historia en poco tiempo ya que en la actualidad los diámetros de corte cada vez son menores, razón por la cual se encaró un plan que incluye, en el caso provincial, el fomento de la forestación.
Aclaró que esa decisión no solamente se ha impulsado a partir de la madera en sí, sino desde el apoyo a los denominados sistemas silvopastoriles, revelando que en la actualidad se cuenta con 900 hectáreas forestadas reales y certificadas que fueron logradas en los últimos tres años.
Son atendidas por productores que recibieron los correspondientes subsidios nacionales a través de la ley 25.080 y el aporte crediticio del gobierno provincial para dar inicio a este plan de forestación.
Acción articulada
El ingeniero Vailatti rescató como valiosa la acción articulada entre la Nación y las provincias para promover el mejoramiento genético de los cultivares de algarrobo para estar en condiciones de entregarles a los productores en un futuro no muy lejano arboles cada vez mejores que impliquen menores gastos de mano de obra en el manejo de las plantas y para lograr mejores fustes para los aserraderos.
Explicó que no es necesario el desmonte para plantar algarrobo y que hay mucha posibilidad de hacerlo en suelos degradados y en otros exclusivos de pastoreo que no tiene capacidad agrícola que pueden aprovecharse para ese exponente del bosque nativo, sin que se modifique el uso ganadero original que el productor le está dando.