Balance "consagratorio" dejó la edición 28º de la Fiesta Nacional del Pomelo.

Se marcó la definitiva "consagración" de la propuesta de gobierno que durante tres jornadas concitó la atención de miles de personas de diferentes puntos de Formosa, del país y la vecina Paraguay.

Cuando anoche transitaba el festival y la elección de la reina marcando el cierre de la 28 edición de la Fiesta Nacional del Pomelo en Laguna Blanca, el balance estaba marcando la definitiva "consagración" de la propuesta de gobierno que durante tres jornadas concitó la atención de miles de personas, tanto de diferentes puntos de Formosa como del país y la vecina Paraguay.
Un marco espectacular nuevamente envolvió a la fiesta, que se ha transformado en un verdadero imán para el turismo, el comercio, la industria, la producción y la música, no solo local, sino también de una amplia franja del país. Es que hubo gente de varias provincias que vinieron a apreciar la propuesta, y mucha otra que armo su stand ofreciendo sus producciones ante tamaña concurrencia durante tres días.
"La Fiesta del Pomelo ya no es un mero festival artístico: Es una enorme vidriera regional. La vigésimo octava edición de la Fiesta Nacional del Pomelo ya no se trata solamente de un evento que congrega mucho público por la calidad de los músicos. Ese perfil que ya tiene mas de un cuarto de siglo fue virando positivamente es una poderosa atracción comercial, industrial, agropecuaria, turística, didáctica, productiva y de servicios", sostuvo el ministro de Turismo, Alberto Areco.
Para tal aseveración, sostuvo que "con observar su evolución año tras año y detenerse en las ultimas ediciones, queda elocuentemente graficado el perfil consagratorio."
Un universo de expositores de los diferentes rubros sobresalieron en la tradicional fiesta, conformando un atractivo para el público consumidor, quienes coincidentemente significaron que cada uno de lo stands estaban completamente adecuados a las exigencias actuales y asimilando perfectamente las necesidades actuales del mercado.
Ahora, el público puede encontrar en este festival que nació en 1972, la más diversa oferta para su gusto, que van desde artesanías locales, frutas curiosidades que muchos ignoran se la cultivan en Formosa, miel natural, la ganadería en plena evolución en Formosa y listos para su exportación junto al producto de los laboratorios en materia genética, productos fabricados acá con materia prima también local, herramientas para el sector rural mecanizado, muebles de madera de primera calidad y diseño de avanzada y la competitiva presencia de empresas de servicios, gastronomía de alto nivel con productos locales como las carnes de búfalo, pacú y yacaré, por mencionar algunos rubros que causaron sensación.
El viernes a la noche, el gobernador Gildo Insfrán inauguró la tradicional fiesta que dejo de ser solamente un evento artístico, sino una mega-muestra donde el productor, el industrial, los prestadores de servicios, y varios otros rubros, además de las actividades de recreación y entretenimientos al por mayor, hizo que el enorme y cómodo predio del polideportivo "Evita" ampliado a 15 hectáreas se vea prácticamente desbordado.
Los asistentes pudieron apreciar como los productores de esa zona norte provincial, trabajan con frutas exóticas y tropicales, que ya trascienden las fronteras y con un creciente y firme horizonte de llegar al exterior con el sello de Formosa, además de diferentes emprendimientos de productores que se van consolidando para acceder a los mercados más exigentes.
Una infinidad de ofertas estuvieron a la vista y de los más diversos orígenes, pero siempre ligados a la producción agroganadera, la industria forestal, el turismo y la manufactura, actividades en alza en Formosa y que conforma la base de su economía.
Nadie se mostró ajeno a tan importante evento. Los vecinos residentes lagunenses solidariamente abrieron su amabilidad y sus hogares para albergar a las centenares de personas que ya no halló reservas para hospedarse y del mismo modo, respondió a las requisitorias de los turistas. A propósito de turistas, muchos aprovecharon la oportunidad para conocer las bondades paradisíacas de atractivos como el Parque Nacional Pilcomayo y Paí Curuzú.
En este marco, se resaltó la labor del diputado provincial Carlos Hugo Insfrán, quien preside la comisión organizadora de la fiesta, encargado de diagramar un impecable trabajo para que las tres jornadas resultaran un éxito total.
Merece destacarse además lo que se organizó para los niños, en el contexto de la Expo Pomelito, donde se apreció el ingenio infantil en diversos acometimientos. Al margen de lo que el público observó en este sentido, los menores tuvieron también tiempo para el solaz, el juego y la didáctica a través de varios entretenimientos, además de tomar parte junto a sus padres de los programas como el de los paracaidistas y de doma y jineteada.
Resultaron muy auspiciosas las noches festivaleras, ya que la multitud vivo permanentemente a los grupos representantes de la música popular argentina. Paralelamente, en un escenario de menor dimensión, otros grupos musicales también deleitaron al publico, que actuaron en ese lugar no por una cuestión de calidad sino simplemente porque la enorme cantidad de músicos que rinden homenaje a la fiesta hace que se adopte esta alternativa.
Los quilates de los grupos musicales que se presentaron reflejaron su afinidad entre el público, desde el ballet de Laguna Blanca, el querido Padre Zinni, Abel Pintos, Teresa Parodi, además de los muchos otros de diferentes zonas de nuestra provincia y la región, tuvieron aceptación masiva tanto entre la juventud como en personas en otra franja de edad. La fiesta fue total y como tal, alcanzó para todos, hasta bien entrada la madrugada.
14-07-2008 | Cargada en Noticias - Fuente: Subsecretaría de Comunicación Social