Desde las expresiones de funcionarios nacionales de la secretaría de Agricultura y Ganadería de la Nación se ha destacado la acción desarrollada en la provincia a favor de los pequeños productores.
En el ámbito de la Sociedad Rural Argentina donde Formosa ha montado un stand que habilitará oficialmente este viernes así como en la reciente EXPO PARAGUAY 2005 y desde las expresiones de funcionarios nacionales de la secretaría de Agricultura y Ganadería de la Nación se ha destacado la acción desarrollada en la provincia a favor de los pequeños productores, calificándolas como un modelo a imitar para promover la aceleración de la inclusión social.
Hace pocos días hizo lo propio en esta ciudad el presidente del INTA, Carlos Alberto Cheppi, quien reveló que ese organismo ha creado centros de referencia para apoyar el proceso de cualificación productiva de los pequeños y medianos productores, el gobernador no ocultó su orgullo porque Formosa fue pionera en la puesta en ejecución de ese programa, una idea suya lanzada en 1996 en General Belgrano.
“El PAIPPA es la herramienta de inclusión social más importante que hemos logrado nosotros a partir del 14 de septiembre de 1996, cuando se hizo su lanzamiento en General Belgrano. Nació aquí como una cosa doméstica, y hoy con esto que acabamos de suscribir, este programa que se ha convertido en un Instituto, ahora está tomando una mayor dimensión, dado que ha superado las fronteras de la provincia, transformándose en un modelo a imitar para poder ir replicando en otros lugares donde se hace necesario ir dando igualdades de posibilidades a argentinos”,enfatizó.
Las 8.500 familias que conforman el PAIPPA fueron incluídas en la distribución de los créditos para el cultivo de algodón de la campaña 2004-2005 otorgadas con recursos por 25 millones de pesos afectados por el Fondo Fiduciario Provincial para el ciclo.
Ocurrió en Villafañe donde, además, se decidió darle jerarquía institucional al PAIPPA con la creación del Instituto que coordina todas las actividades vinculadas con la producción, educación, salud y viviendas de los pequeños productores.
Viviendas rurales
En materia habitacional un reciente anuncio del gobernador confirma que este año tiene continuidad el plan de construcción de las casas PAIPPA a partir de un modelo original concebido por el IPV.
Según las declaraciones de su titular, arquitecto Sergio Reynaldo Giménez, a las unidades ya entregadas- las primeras de las cuales fueron adjudicadas en Campo Hardy- se les sumarán 6.000 nuevas unidades que se irán licitando en paquetes de 300.
Además de lo que significan para la familia rural, estas realizaciones dan trabajo, además, a los ladrilleros, carpinteros y albañiles de la provincia con lo que se genera un proceso amplio de reactivación laboral, aumentando los índices de ocupación.
El aporte técnico brindado por el ministerio de la producción a través de sus técnicos ha permitido que también entre las 8.500 familias del PAIPPA se lleve a cabo el proceso de diversificación productiva.
Tradicionalmente dedicados al cultivo de pocas hectáreas de algodón con métodos rústicos, los minifundistas- a quienes se les está entregando la tierra en propiedad- han ampliado la cantidad y calidad de algodón y han logrado rendimientos excelentes con las plantaciones de maíz y frutos y hortalizas que comercializan en las ferias francas y a las plantas del plan Nutrir.
Lo mismo ocurre con los pequeños productores del oeste que recibieron apoyo para montar la única planta elaboradora de charqui del país en El Quebracho mientras avanzan en la fabricación de dulces con frutos de ñla zona y también miel de características orgánicas.
Producción apicola
La actividad apicola se extenderá pronto a todos los componentes del PAIPPA ya que se la considera importante para la nutrición familiar y como un nuevo componente económico agregado al agrícola y también al ganadero con la puesta en marcha de un plan de apoyo para la cría de caprinos y bovinos.
Se ha previsto en el proyecto una entrega individual inicial de cuatro colmenas por familia con un núcleo mínimo de 10.000 abejas por cada cajón. En el primer ciclo se pretende que los paipperos se habitúen al manejo de los rudimentos de la apicultura para avanzar, en sucesivas etapas, a contar con por lo menos 20 colmenas que por ciclo producen básicamente 600 kilogramos que suman 1.800 pesos-a los valores actuales- a los otros ingresos de los campesinos.
En la programación figuran, además, las recientemente creadas escuelas rurales que facilitarán el afincamiento de las familias campesinas en su medio; la incorporación de la acuicultura con la cría de peces en estanque y la atención de la salud a través del denominado Seguro de Salud PAIPPA que les permite cobertura médica y la entrega gratuita de medicamentos en la red provincial de hospitales.
Promover lo colectivo
El gobernador Insfrán se manifiesta optimista respecto del cambio familiar que deriva del PAIPPA, sobre todo porque se ha dejado de lado el individualismo para crear conciencia asociativa al considerar que la acción integrada y la producción a escala favorece a los pequeños productores en cuanto a la rentabilidad de su producción y el mejoramiento tecnológico para modernizar sus explotaciones. Dijo hace poco que debe procurarse que ese proceso sea sustentable, que se respete el ecosistema y fundamentalmente promueva la inclusión social para que el jefe de familia, a través de su propio trabajo vaya recomponiendo con el sustento diario, la célula fundamental de toda comunidad organizada, que es la familia.
“Si no somos capaces de recuperar la institución familia como la célula básica de la organización comunitaria, no hay otro sistema factible para lograr una Argentina justa y soberana como queremos todos los argentinos”, advirtió.