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El Instituto Provincial de la Vivienda (IPV) realizó ayer el acto de apertura de ofertas ayer para la construcción de 500 viviendas rurales PAIPPA, en 17 localidades distribuidas a lo largo y ancho de la provincia, en la continuidad de este trabajo oficial de mejoramiento de la calidad de vida de los trabajadores rurales, a quienes se les construye su casa en la propia chacra.
Con esta política, al margen de la dignificación de las familias rurales formoseñas con una adecuada vivienda, se propende a evitar el desarraigo de las familias campesinas y con ese objetivo, se construyen las unidades habitacionales conforme a las costumbres y tradiciones de los beneficiarios.
El acto respectivo se cumplió en la sede del Instituto Provincial de la Vivienda de la capital, donde estuvieron presentes el titular del organismo, ingeniero Martín Muracciole; el escribano mayor de la Casa de Gobierno, Héctor Gallardo; funcionarios del diversas áreas del IPV y empresarios o bien representantes de grupos constructores.
Tras la revisión técnica y legal de lo correspondiente a esta licitación, que prevé la construcción de más casas en las chacras de familias campesinas formoseñas, el ingeniero Muracciole habló con la prensa. En la oportunidad, destacó que "tenemos hoy la apertura de los diferentes grupos en toda la provincia para construir 500 viviendas rurales. Se las construirán en forma dispersa, en diferentes localidades  y conforman un total de medio millar de beneficiarios".
"Este es el resultado de un trabajo de muchos años, desde aquel plan de ayuda PAIPPA a lo que es hoy el Instituto (Programa de Acción Integral para el Pequeño Productor Agropecuario)  que ha definido al trabajador paippero. Se lo ha seguido en forma oficial durante años y en ese marco se trabaja intensamente con  el Instituto Provincial de Colonización y Tierras Fiscales", especificó el funcionario dando cuenta del crecimiento institucional del organismo y por ende, de sus beneficiarios, que supera las 8.500 personas.
Sobre el acto de ayer, indicó que "hoy estamos licitando para construir las viviendas en terrenos que tienen el título o la posibilidad certera de tenerlo a nombre del beneficiario. El paippero tendrá así, ya a esta altura, el título de su propiedad y también la vivienda. Se ha visto que nuestro hombre de campo tiene habitaciones amplias, bastante aireadas como una galería central. Lo que hemos hecho es respetar esta idea, reuniendo todos estos conceptos en una caca rural", puntualizó en referencia a las características edilicias a tener en cuenta al momento de construir las casas en las chacras".
Sobre las características más sobresalientes, precisó que "tienen estas viviendas una galería central, habitaciones amplias, el fogón o cocina cubierto, bajo techo, con baño instalado pero prácticamente separado de la casa. El hombre del campo necesita tener el baño al alcance más bien cuando llega de algún ligar. Desmonta del caballo y hace uso de su baño, se lava y entra a su casa aseada e higiénica. Todos estos factores se tienen en cuenta al momento de construir las viviendas PAIPPA".
Finalmente, subrayó que "ya hemos construido muchas y han tenido una aceptación plena y todas las pequeñas modificaciones que nos han solicitado o sugerido han sido tomados muy en cuenta y tenemos como resultado el modelo que estamos licitando hoy".