Desde el Instituto PAIPPA destacan réditos de programa solidario.

La instalación de una hilandería y tejeduría en General Belgrano cuya habilitación se prevé para septiembre, es considerada como un nuevo paso dado para ser consecuentes desde el estado con el "paippero" ...

La instalación de una hilandería y tejeduría en General Belgrano cuya habilitación se prevé para septiembre, es considerada como un nuevo paso dado para ser consecuentes desde el estado con el "paippero" que se prepara para la etapa agroindustrial que se viene , sobre todo a partir de del agregado de valor que están logrando en el ámbito familiar donde se aprecia efectiva la capacitación para elaborar dulces ,quesos y encurtidos.
Así lo considera el coordinador del Instituto PAIPPA, Alberto Zorrilla, quien hizo notar que el objetivo trazado por el mentor del programa, el gobernador Insfrán, es crear las condiciones para que en el futuro se organice una gran empresa con diez mil asociados que esté manejada por ellos mismos en el contexto de una realidad que los presentará en la comunidad como hombres libres de todo tipo de dependencia.
Al abordar la cuestión de la mecanización agrícola, Zorrilla dijo que está para los que puedan sostenerla y que mientras tanto, hasta que se llegue allí, hay que aplicar metodologías que sean liberadoras razón por la cual se ha diseñado una sembradora directa a tracción a sangre y rolos que son herramientas (foto)que se van poniendo a disposición de los pequeños productores organizados para que inicien un proceso de acumulación y de mayor producción para continuar con otra tecnología aunque en forma progresiva y que signifique liberación.

Nuevo gentilicio

"Hoy el pequeño productor se identifica con un nuevo gentilicio,
el ser "paippero", opinó para añadir que la interpretaba como " toda una identidad, es una postura ética" para acotar que " se le dio una identidad a alguien que no la tenía y el ser "paippero" implica con valorizar el sentido de pertenencia".
El programa ideado por el gobernador surgió ante la evidencia de que unas 6.500 familias- que viven en las y de las chacras- dedicadas al cultivo del algodón en pequeñas superficies no reunía los recursos necesarios como para responder a las demandas de la canasta familiar, apreciando que la involución los excluía socialmente y de todos los circuitos económicos y financieros y al mismo tiempo les impedía avanzar en el mejoramiento de la calidad de sus producciones y sus condiciones de vida pese a constituir el estrato mayoritario de la amplia franja de protagonistas de la producción.
Zorrilla dijo que en estos años se han logrado avances evidentes aunque reconoció que el PAIPPA no alcanzó los niveles de dinámica deseados a causa de la grave crisis registrada en el país entre 1999 y 2002 no obstante lo cual se ha observado empieza a darse vuelta uno de los aspectos perniciosos apreciado por Gildo Insfrán en 1996 cual es la prevalencia de un acendrado individualismo entre los pequeños productores."Estábamos preparados para avanzar a pasos más acelerados", manifestó."Sin embargo, la crisis nos obligó a distribuir alimentos", consignó.
En ese sentido, confirmó que los acontecimientos nacionales obligó a la reactivación de los grupos familiares que promedian los diez integrantes, habiéndose conformado hasta ahora 185.

Aumentan los beneficiarios

Zorrilla hizo notar además que el PAIPPA en principio abarcaba exclusivamente a las 6.500 familias agricultoras a las que se sumaron por decisión política del poder Ejecutivo los pequeños ganaderos del oeste lo que ha llevado el componente humano a unas 10.000 familias que totalizan unas 65.000 personas, es decir el 15 % de la población provincial.
Para conocer con precisión cuantos son estamos trabajando detalladamente en un relevamiento integral y hasta ahora ya hemos definido la existencia real de 4.332 familias y seguiremos en esa gestión", contó el funcionario.
En cuanto al componente educativo, recordó que antes del PAIPPA el nivel inicial no existía en las colonias como tampoco la EGB Rural mientras que el ciclo polimodal no respondía a las necesidades lugareñas."Queremos una escuela atractiva, donde se puedan aplicar los conocimientos y se pueda aprender a vivir en ella, en el ambiente rural ", sintetizó.
"Hoy en casi todas las colonias funciona el nivel inicial, se ha implementado la EGB 3 Rural y en el nivel polimodal aumentó la cantidad de establecimientos, aunque se enfatiza ahora en la adecuación de las modalidades tomándose como referencia lo que acontece en El Quebracho y en El Alba, con unidades educativas proyectadas hacia el desarrollo social por alumnos que aplican en su comunidad lo que aprenden y ponen en práctica en la escuela.
"En cuanto al nivel superior-dijo- la ruralidad está dentro de las prioridades del sistema para lo cual ya hemos formalizado un convenio con la Universidad Nacional de Formosa", mientras que se trabaja coordinadamente con el Ministerio de Educación para desarrollar un efectivo programa de alfabetización para aquellos o que son analfabetos o que tienen la educación incompleta.
En materia de salud, Zorrilla hizo notar que a través del Seguro PAIPPA no solamente que se crearon las condiciones para la atención medica integral en todos los hospitales y centros de salud de la red provincial sino que también se les entregan medicamentos en forma gratuita.
"Pero también se actúa de modo preventivo y curativo con visitas médicas programadas a las colonias y con la organización de talleres sobre salud comunitaria", precisó.

Las viviendas

Otro de los aspectos que abarca el PAIPPA tiene que ver con la construcción de las viviendas rurales en la propia chacra de los productores, habiéndose terminado 700 unidades mientras que 1.342 están en plena ejecución, estimándose alcanzar las 6.500 en el marco de un proceso que cobró dinámica con la vigencia de la reparación histórica y la visión federal del presidente Néstor Kirchner.
"El doctor Insfrán prometió darles la tierra en propiedad y sin costo alguno y desde 1996 se han otorgado títulos a centenares de productores por varios miles de hectáreas", relató mientras confirma que hay un trabajo permanente para que esa privatización se acentúe teniendo en cuenta la significación que tiene para los campesinos para su arraigo en las colonias y localidades donde viven y trabajan junto con sus seres queridos.
En la faz productiva se ha mejorado en la distribución de la semilla, se ha promocionado simiente de muy buena calidad, el CEDEVA también produce semillas para los pequeños productores y plantines de citrus que ha permitido diversificar la producción sin dejar de mantener un cultivo estratégico como es el algodón, calificado como "el gran producto" ya que dispone de un sentido social que otros no lo tienen porque distribuye el dinero en la comunidad.
Zorrilla comentó que se están desarrollando, además, otras técnicas productivas de carácter conservacionista con laboreo mínimo, cobertura y recuperación de los suelos, manejo del agua con la recuperación de antiguas represas y ejecutando perforaciones principalmente en las zonas más críticas, como es el caso del oeste.
Admitió que tiene un claro sentido de integración social la incorporación de los productores ganaderos de los tres departamentos del oeste ya que antes no eran muy tenidos en cuenta en los planes oficiales ni en forma integral.

Plan Ganadero

"Con el modelo de provincia, la integración de los pequeños productores dentro de un plan ganadero general-expresó-esta realidad comienza a tener un aspecto diferente que los incentiva a mejorar sus instalaciones y pasturas, es decir un manejo mas racional del ganado, tanto en el caso de los caprinos cuanto de los bovinos".
El coordinador del PAIPPA relató, asimismo, que dentro de esa gestión de apoyo figura la construcción de mataderos a los que se van a adosar dos frigoríficos de rumiantes menores, como es el caso de las cabras, que el Instituto agrega a los que viene haciendo el ministerio de la Producción junto con otros organismos institucionales con los que se trabaja articuladamente.
Alberto Zorrilla estima que ha cambiado la relación entre la rentabilidad de los productores, sobre todos de los algodoneros y el valor de la canasta familiar que en 1996 arrojaba un evidente déficit, calculando que en la actualidad, por campaña, los ingresos se estiman en unos 6.000 a 7.000 pesos, incluyéndose los que provienen de las ferias francas.

Decrece el individualismo

Zorrilla insiste en que el tema del individualismo es cultural y por eso cuesta sacarlo de adentro de cada uno de los productores.
"La gente se asocia en la medida que vea beneficios en la sociedad y en este momento hay un clima de asociatividad, la gente se ha dado cuenta que sola no va a salir de la crisis y que si puede lograrse en grupo", apuntó.
Indicó que hay ejemplos concretos como el de quienes vienen a las ferias francas asociándose para el transporte y el flete y les da buenos resultados.
Eso hace que hoy hablar de asociativismo ya sea un término que llama la atención y la gente comienza a preguntar de que se trata porque le cuesta todavía tomar compromisos permanentes.
Son grupos que se organizan y se desarman en base al interés que genera su conformación y al movimiento interno del grupo que es lo que le da cohesión y permanencia.
"La etapa del individualismo empieza a darse vuelta porque la gente empieza a mirar el asociativismo como una posibilidad mejor que la de vivir individualmente y como en todos los casos hay grupos que tienen una mayor dinámica que otros en la organización y otros que están expectantes para determinar que ocurre con sus vecinos como para poder también ellos ingresar en el sistema", refiere.
Otra de las cosas que a criterio de Zorrilla se está comprendiendo es que si no se le da valor agregado a su producción van a seguir manteniéndose en el primer eslabón de la cadena productiva y el último de la comercial que siempre arroja pérdidas.
Por eso hay mucha demanda de capacitación en transformación principalmente de alimentos, porque la gente ya verifica la ventaja de transformar su materia prima.

Énfasis en la educación

En cuanto al tema educativo se admite que es el más complicado y al mismo tiempo el eje de todo el sistema.
Por ello se propone un aspecto curricular y de modelo de escuela que es un poco lo que en la actualidad se puede apreciar en El Quebracho, Ramón Lista y también en El Alba y algunas otras escuelas que están trabajando en esa dirección.
"Nosotros creemos que la escuela tiene que brindarle un espacio al joven para que pueda aplicar sus conocimientos en asociativismo, en administración, en producción, en transformación de los alimentos, dentro del mismo establecimiento para lo cual hay que darles un predio donde trabaje y vea que el esfuerzo realizado le beneficia", anunció.
"Los chicos tienen que dejar de ver el fracaso de sus padres. Ellos se van porque los ven trabajar, esforzarse, padecer, sufrir sin grandes beneficios. Y por eso la escuela tiene que darle otra visión... Debe convencerlo que el esfuerzo y el trabajo en el campo siempre da buenos resultados y que puede mejorar el nivel y la calidad de vida", subrayó.
10-07-2007 | Cargada en Sociales - Fuente: Subsecretaría de Comunicación Social