Distinguieron a Lavaque con el premio Laurel de Plata 2007.

Juan Carlos Lavaque, un docente comprometido con su comunidad del extremo oeste del territorio, fue distinguido por el Rotary Club Formosa con el premio Laurel de Plata 2007. Se trata de una merecida distinción ...

Juan Carlos Lavaque, un docente comprometido con su comunidad del extremo oeste del territorio, fue distinguido por el Rotary Club Formosa con el premio Laurel de Plata 2007.
Se trata de una merecida distinción para alguien que conduce con responsabilidad y decisión la escuela de frontera 5 "Capitán Pagé" de El Quebracho, a 602 kilómetros de esta ciudad, un establecimiento que ha sido ponderado a nivel continental por su gestión social y por el modo como ha conseguido articular la vida de sus 600 habitantes, la mitad de ellos criollos y el resto aborígenes de la etnia wichí.
Allí concurren unos 140 alumnos que aprenden a leer y escribir pero también a tomar conocimientos sobre productividad de modo tal que lo que perciben lo transmitan al seno familiar, inaugurando una metodología rápida de transferencia de conocimientos que influye decididamente en el quehacer social.
Así por ejemplo, se encara la apicultura con tanta habilidad que la escuela ha logrado cosechar miel que es vendida en la zona al igual que dulces artesanales, como los elaborados con mamón que cultivan en la huerta del establecimiento.
Otra de las experiencias surgidas por iniciativas de Lavaque tiene que ver con la siembra de pacúes en la tradicional cañada lugareña, lográndose organizar la actividad de tal manera que los aborígenes fueron los encargados de vigilar su evolución y de consumirlos merced a una modalidad de aprovechamiento racional.
Tres años atrás, el gobernador Gildo Insfrán visitó El Quebracho porque Lavaque había logrado que a través de la asociación de productores ganaderos de la zona se organizase una fábrica de charque, la única en el país que se encarga de esa tarea a partir de la carne vacuna. Allí también mostró su habilidad para asignar responsabilidades ya que la mitad del personal eran criollos y el otro 50 % aborígenes wichí.
Las iniciativas de Juan Carlos Lavaque son inagotables a punto tal que fue idea suya la de generar electricidad por intermedio de paneles que aprovechan la luz del sol así como también de recrear, en una zona de "silencio", un circuito cerrado de televisión propio.
Además, ha conseguido establecer una forma de organización comunitaria que le permite recrear programas turísticos aprovechando las cercanías con el bañado La Estrella y para mostrar la vida familiar de los aborígenes.
24-06-2007 | Cargada en Sociales - Fuente: Subsecretaría de Comunicación Social