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Dirigentes justicialistas y barriales a cargo del comedor comunitario “María Eva” del barrio San Agustín de esta capital, entregaron ayer medio centenar de sobre de semillas para las huertas familiares y al mismo tiempo, comenzaron con las actividades de la cunicultura, es decir, con la cría y explotación de conejos.
En el mencionado centro comunitario funciona además una olla comunitaria que beneficia a casi 100 familias de este humilde lugar, situado al noreste de la capital.
Los trabajadores sociales, que responden al dirigente y funcionario justicialista Dr. Jorge Oscar Ibáñez, entregaron las semillas a personas que deben desarrollar en sus predios las huertas comunitarias, acción solidaria que comenzó hace un par de años y que busca paliar la situación a través de esta iniciativa del pequeño cultivo para el sustento familiar.
Petty Fleitas, la responsable del centro comunitario, explicó que se llevará a cabo desde ayer, un nuevo año de trabajo con la cría de conejos, mientras alimentaba a unos 60 ejemplares de diferentes razas enjauladas. Dio a conocer las cualidades de la carne de conejo, a la que calificó como sabrosa y agradable al paladar, y consideró que el sabor es una intermedia entre la  carne de pescado y el ave de corral.
Afirmó que la carne de conejo debe ser considerada ya a nivel nacional y mundial como la alternativa a las tradicionales y recomendó a los formoseños volcarse a la cría de estos conejos para conocer las bondades del producto elaborado en diferentes platos. Destacó que el consumo de alimentos por parte de cada ejemplar no es considerable, y no va más allá de unos 200 gramos por cabeza, desmitificando la creencia que los conejos son máquinas devoradoras de todo lo que encuentran.
El centro comunitario “María Eva” del barrio San Agustín hace 7 años que funciona como tal, brindando alimentos a los vecinos mediante las ollas populares y colaborando con la economía de las humildes familias residentes allí.