El Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) está trabajando con la Secretaría de Medio Ambiente para que aparezcan figuras que permitan a los estados argentinos y a las instituciones nacionales ...
El Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) está trabajando con la Secretaría de Medio Ambiente para que aparezcan figuras que permitan a los estados argentinos y a las instituciones nacionales, armar proyectos que puedan pagar por el servicio ambiental que brinda un determinado ambiente.
De acuerdo a lo explicado por el vicepresidente del organismo, Amadeo Nicora: “Si a un empresario se le pide que no deforeste determinadas hectáreas porque se considera que está brindando un servicio ambiental para la sociedad global, ésta debe recompensarle por ese esfuerzo que hace el empresario al quitar esa franja de los planes de producción”, opinó.
Nicora dijo que ese concepto se llama “deforestación evitada”, aclarando que en la Convención de Cambio Climático todavía no está contemplado ese concepto para recibir pagos de servicios ambientales.
“Desde el INTA estamos planteando que ese concepto debe ser expuesto por la Argentina ante la Convención para poder realizar proyectos y salir a captar fondos de la sociedad global que se beneficia de los servicios ambientales para que cuando un empresario o un pequeño o mediano productor desmonte, por ejemplo, 50 hectáreas y tenga suelo con potencialidades para desmontar 150, que se le pague por los servicios ambientales que brindan esas 100 restantes”, explicó.
La realidad formoseña
Respecto de la realidad ambiental formoseña dijo que esta provincia tiene 7.200.000 hectáreas y unas 5.000.000 de hectáreas de monte.”No superan las 250.000 hectáreas el total de suelo habilitado, es decir el 5 % de la superficie total de monte disponible”, precisó.
Hizo notar el funcionario que es necesario interpretar el concepto de que para preservar algo hay que intensificarlo para evitar la presión sobre toda la biomasa de toda la actividad productiva.
“En un campo, en una unidad productiva, si no se hace nada todos los animales y la actividad que allí se genera actúa sobre toda la biomasa. Por eso, si se quiere preservar hay que definir primero que es lo que se va a cuidar y lo que se va a intensificar”, insistió Nicora para aclarar que en lo que se va a intensificar se hará una fuerte presión sobre la biomasa pero dejando cuidada y protegida una superficie determinada.
“Ese es el concepto que ha movido a la provincia de Formosa hasta hora”, relató para memorar sus épocas de ministro de la Producción de Formosa y dar fe que las autorizaciones para la habilitación de suelos cuentan con análisis de suelos, proyectos productivos. “Desde el inicio de la gestión de Insfrán se tomaron las decisiones de la habilitación de nuevos suelos en base a proyectos productivos, análisis de suelos, dejando reservas de montes”, insistió.
Comentó, asimismo, que hay un programa de ordenamiento territorial que tiene que ser un proceso de construcción ya que nadie puede imponer aunque hacia ese camino se avanza.
“Estoy convencido que lo que se esta haciendo va por el buen camino y los habitantes actuales de esta sociedad necesitamos generar eventos productivos ,riquezas y fuentes de trabajo porque quienes nos imponen que cuidemos el medio ambiente cuando nos piden que paguemos la deuda no nos piden que lo hagamos con ambiente sino con dólares”, remarcó el vicepresidente del INTA.
“Por lo tanto, nosotros tenemos que generar recursos para tender ese requerimiento y todos los que son naturales en una sociedad” concluyó.