Con resultados altamente satisfactorios, llegó a su fin el Festival Internacional de Teatro en Formosa, dejando una huella de creatividad y expresión artística. A lo largo de este evento, 11 obras provenientes de Brasil, Paraguay y Argentina iluminaron los escenarios de nuestra ciudad, capturando la atención y el aplauso del público.
Presenciar este destacado evento ha sido fundamental para una reflexión profunda acerca del papel fundamental que el teatro desempeña en la identidad y el crecimiento de los trabajadores culturales de nuestra provincia. Más allá de su capacidad de entretener, el teatro personifica un recurso valioso para la riqueza cultural y social, mereciendo una dedicación política constante.
Este festival internacional se logró gracias a la organización conjunta del Instituto Nacional del Teatro y el Gobierno de la provincia de Formosa. Este evento no solo representó una serie de actuaciones, sino también mostró la diversidad y la innovación que caracterizan al sector teatral. Desde locales producciones hasta compañías internacionales, compartiendo narrativas, emociones y experiencias que trascienden fronteras. En este contexto, el arte se convierte en un puente que une a personas de diversas procedencias, creencias y culturas, fomentando un diálogo global enriquecedor.
Este evento brindó una oportunidad invaluable para fortalecer al sector cultural teatral de la provincia, al asignar los recursos y el apoyo adecuados. Esto logró la creación de espacios para la formación de artistas, que incluyeron capacitaciones, foros, mesas de debate, presentaciones de libros y textos publicados, como parte del programa de actividades especiales dentro del marco del festival.
El cierre del festival estuvo a cargo de la obra "Guerra contra el olvido", una pieza que arroja luz sobre un capítulo crucial de la historia argentina: la guerra de Malvinas. Utilizando personajes femeninos que desempeñaron papeles fundamentales durante el conflicto bélico y que, lamentablemente, no han sido reconocidas como heroínas de guerra ni excombatientes, la obra teje una narrativa impactante entrelazando la historia de un soldado formoseño y una enfermera que sirvió en el Buque Almirante Irizar. Siguiendo el estilo del Coro Trágico del teatro griego, las voces de mujeres a las que se intentaron silenciar resonaron poderosamente en la obra. Cuatro voces representan a la mujer, narran sus historias de guerra, una historia colectiva que nos interpela, con el objetivo de preservarla del olvido.
El elenco está compuesto por Silvia Gabazza, Silvana Guanes, Rocío Ruiz y Carolina Sosa como actrices, con la participación de Lorena Greatti en iluminación y Gabriel Sosa en coreografías, maquillaje y peinados. La dirección de esta magnífica obra está a cargo de Marcela Delturco, quien también es la autora de la pieza.
Es importante destacar que Kajay Teatro es un colectivo teatral conformado por trabajadoras culturales formoseñas. La palabra "Kajay" proviene del idioma wichí y significa "fuerte", un símbolo apropiado para la potencia, el impacto y la resiliencia que este grupo y sus integrantes han demostrado en su trayectoria y en la escena cultural.