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Con motivo de celebrar hoy -10 de abril- 33 años de vida el Instituto Provincial de la Vivienda, resulta propicia la fecha para señalar varios de los logros en materia de obras que el gobierno provincial a través de este organismo ejecutó y sigue ejecutando. Es así por ejemplo que surgen indicadores más que elocuentes, como ser el aumento de un 400% de productividad en materia habitacional de la actual gestión que encarna el gobernador Gildo Insfrán.
En efecto, el nuevo aniversario del organismo lo encuentra en plena tarea de consolidación de la infraestructura y el equipamiento urbano, además de la terminación de varios de los planes de viviendas iniciados.
El interventor del IPV, Sergio Reinaldo Giménez dijo que “con la actual gestión de gobierno, bajo la óptica sistémica impulsada por el gobernador Gildo Insfrán, se logró aumentar la productividad en materia de viviendas en un 400% anual”, marco en el cual abundó explicando que “esto significa que en el periodo 1996-1999 se produjo la misma cantidad de viviendas que en los veinte años inmediatos anteriores”.
Anticipó Giménez que “los planes actuales para toda la provincia, tienen a la vista completar las 20.000 unidades habitacionales, lo que arrojaría la cifra global de un millón de metros cuadrados construidos durante la gestión de nuestro actual mandatario provincial”.
“La producción en materia de soluciones habitacionales del gobierno del doctor Insfrán ha gestionado e iniciado un total de 12.000 viviendas, de las cuales 10.262 están terminadas y en ejecución, quedando el resto en etapa de iniciación, dado que son las últimas de programas como de emergencia y por autoconstrucción”, añadiendo que a estas se le deben sumar otras 10.000 más que se encuentran en marcha en esta ciudad y todo el interior, las cuales comprenden a varios programas y planes.
Indicó que “los resultados arrojan más de 2.500 viviendas por año, lo que representa un alza en la productividad de más del 400% por año, cifra que supera todos los indicadores de la provincia, la región y a nivel nacional inclusive”.

Lo social

De todos modos aclaró que el IPV “no solamente se limitó a producir viviendas, puesto que conforme al plan de gobierno en el marco de un ambicioso programa de infraestructura y equipamiento social para toda la provincia, se ejecutaron otro tipo de obras que posibilitaron que muchos formoseños mejoraran su calidad de vida, las cuales también exceden lo realizado en el mismo lapso antes citado”.
Puntualizó que “los trabajos comprendieron aspectos sobre la planificación urbana y la arquitectura, por ejemplo las redes de energía eléctrica, desagües cloacales, desagües pluviales (canal Collucci totalmente hormigoneado), calles, accesos, veredas y otros; añadiendo que “también se intervino de manera activa en todo lo relativo a equipamiento social, o sea edificios para la educación y la salud, otros para el esparcimiento, inclusive guarderías, edificio comunitarios, casas solidarias, parques y plazas”.
Mencionó por ejemplo la pavimentación en arterias de la ciudad en los barrios Don Bosco, , Independencia y San Miguel, prolongación de avenida Lelong hasta la zona del Paraíso de los Niños, completamiento de la avenida Italia, además de otros trabajos similares en el interior, alcanzándose un total de 550 cuadras.
Aludió a los trabajos de terminación de la Escuela Nº58, el albergue del Parque Infantil, la nueva escuela en el barrio Simón Bolivar y otras en sectores cercanos como el República Argentina, Antenor Gauna y Eva Perón, entre otros.
En materia de salud se indicó la ejecución de las áreas de Pediatría y Ginecología, así como el Lactario y otras dependencias en el Hospital de la Madre y el Niño.
Dentro del programa de equipamiento social se hicieron 66 edificio para la salud, educación, cultos religiosos y centros comunitarios, por un total de 33.000 metros cuadrados.
La cantidad de terreno utilizado para todos estos emprendimientos ascendió a los 3.6 millones de metros cuadrados.
En cuanto a la apertura de calles representan un global de 1.2 millones de metros cuadrados, 307.860 metros de cables para instalaciones eléctricas, más de tres millones de metros de conductos para desagües cloacales.
Asimismo, estas construcciones demandaron la utilización de más de un millón de ladrillos producidos por ladrilleros formoseños, así como también los más de 150.000 metros cuadrados de aberturas (puertas, ventanas, rejas, etc.).
“La mano de obra directa e indirecta que resulta de todo este volumen construido, representan 30.000 puestos de trabajo”, afirmó, para recordar que “la construcción residencial es una de las mayores actividades multiplicadoras y generadoras de empleo en otras ramas de la actividad económica, dado que además de insumir un mínimo de 200 materiales diferentes, utiliza el flete, moviliza el crédito, las finanzas, el comercio y otros servicios”.