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El Día de la Enfermera, que ayer se celebró, tuvo alcances emotivos en toda la provincia de Formosa en el marco de los festejos que ayer se registraron en hospitales, centros de salud y salas de primeros auxilios.
La celebración, con agasajos, tuvo lugar dentro de las cotidianas actividades de estos auxiliares de la salud, que siempre se muestra predispuestos a aliviar el dolor físico y psíquico de los pacientes, demostrando un alto espíritu solidario y enorme vocación profesional.
Se realizaron celebraciones temprano, con apresurados brindis y desayunos por las exigencias del trabajo en los principales centros de salud, aunque las fiestas más animadas, distendidas y numerosas tuvieron lugar anoche.
En la capital, se compartieron pequeños y cortos agasajos para no entorpecer la marcha de la atención de la salud, en el Hospital de Alta Complejidad “Juan Domingo Perón”; en el Hospital Central;  en todos los centros de salud y salas de primeros auxilios, que se repitieron en todo el interior provincial.
En el caso del HAC, allí la celebración fue muy emotiva, porque desde las 10 de ayer, se llevó a cabo un sentido homenaje al cuerpo de enfermeros. El máximo responsable del moderno hospital, Dr. José Luis Décima, estuvo al frente del homenaje, con distinciones a los mejores compañeros dentro de estos auxiliares y se tributó una sentida recordación a quién en vida fuera el enfermero Angel Gabriel Núñez, quién pereció como consecuencia de un grave accidente este año.
Estuvieron además los directores asociados Diego Gorvein y Carlos Benítez, además de los responsables de diversas áreas.
El tenor de esta celebración, emotiva por las distinciones a quienes sobresalen en la actividad por sus dotes humanas y profesionales, por las sentidas recordaciones a quienes ya no están y por brindar un espacio reducido a la fecha porque las actividades exigen, se observó en todos los centros de salud de la provincia en una fecha tan particular para toda la sociedad.