Habrán mayores controles conjuntos en la veda de pesca.

Desde los primeros minutos del próximo viernes 10 entrará en vigencia el periodo de veda de pesca, el cual se extenderá hasta el 30 de diciembre, lapso en el cual se ejercerán mayores controles conjuntos ...

Desde los primeros minutos del próximo viernes 10 entrará en vigencia el periodo de veda de pesca, el cual se extenderá hasta el 30 de diciembre, lapso en el cual se ejercerán mayores controles conjuntos entre instituciones de nuestro país y el Paraguay.
De acuerdo a lo informado por el titular de la Dirección de Faunas y Parques de la Provincia, Juan Carlos Orozco, según lo consensuado entre las autoridades de ambos países (foto), “se admitirá la pesca de subsistencia en ese periodo”, aclarando que “se trata de la pesca de costa y no embarcada, con el propósito de satisfacer el consumo familiar, es decir que estamos hablando de autorizar al pescador de escasos recursos que así lo acredite”.
Indicó que “también hemos acordado llevar controles de fiscalización conjuntos entre fuerzas e instituciones de nuestro país y del Paraguay, en un número superior a otras temporadas”, añadiendo que inspecciones de este tipo ya se han llevado a cabo entre la Prefectura de Puerto Pilcomayo, la Fiscaliza del Ministerio Publico del Paraguay y la Dirección de Fauna y Parques de Formosa.


Estudio de la carga
de peces en el río


Por otra parte, aunque dentro de las acciones de defensa del recurso ictícola, continúa desarrollándose un amplio estudio para determinar la carga de peces y que posibilidades de presión puede llegar a tener en la pesca extractiva en aguas del río Paraguay y una porción del Paraná, el cual estará concluyéndose a mediados del año venidero.
De acuerdo a lo explicado por el responsable del Instituto de Icticología del Nordeste (UNNE), doctor José Bechara, este análisis forma parte del acuerdo entre esta institución y todas las provincias de la cuenca Paraná-Paraguay. Indicó que este estudio ya en marcha “tiene una base de un año, y luego de que se obtengan todos los datos se podrá tener un resultado cierto y con base científica”.
Afirmó que “la información con la que contamos sobre el río Paraguay es muy escasa, y corresponde a los meses más frío del año, donde los peces tienen menor actividad, por lo cual no podemos sacar conclusiones a partir de los datos que disponemos hasta ahora”.
Explicó Bechara que “es importante el tamaño de la muestra, la cual debe ser suficientemente grande y como se hace, ya que la misma debe ser obtenida a través de un procedimiento pre-establecido. Además, tenemos que cerrar un círculo anual completo, porque los peces migran en los ríos y tienen periodos en que pasan por determinada zona”.
Abundó diciendo que “si queremos tener una evaluación completa de determinada especie, tenemos que tomar el ciclo integro y estudiar los diferentes tramos”.
Respecto al el estudio que se está haciendo en la zona de Formosa, dijo que “los resultados se tendrán en julio o agosto del año que viene, tras lo cual se dispondrán las medidas que se crean necesarias”, agregando que de la misma “se obtendrán elementos muy necesarios y actualizados –los cuales no se tienen- para la toma de decisiones”. 
Sostuvo asimismo que “el pez es un recurso renovable, y cuando uno los extrae, la capacidad productiva del río aumenta, ya que lo que uno saca la naturaleza lo repone. Y cuando más extrae más rápidamente repone, hasta que se llega a un punto en que uno elimina la parte importante del capital y las especies no pueden reponerse”, para aludir a que “con en este estudio lo que tratamos es de determinar, lo más fehacientemente posible, en que punto se encuentra este aspecto de reposición”.
Aunque advirtió que “esto depende de las condiciones del río, fundamentalmente del caudal que transporta durante el verano y la primavera, que son las épocas de reproducción y crecimiento de los peces”.
“Entonces resulta importante disponer de caudales significativos de agua durante estos periodos, ya que si son bajos durante muchos años seguidos, como ha venido ocurriendo durante los últimos ocho años, esto va a repercutir sobre la cantidad de determinadas especies”, afirmó, para abundar indicando Bechara que “el río dispone de unas 300 especies, algunas son puramente de río y las beneficia que haya menos agua, lamentablemente estas no son las más buscadas para pescar, como por ejemplo las viejas del agua”.

06-11-2006 | Cargada en Novedades - Fuente: Subsecretaría de Comunicación Social