La Sociedad Rural de Formosa elevó recientemente un proyecto que elaboró en forma conjunta con la Fundación Vida Silvestre para la realización el estudio poblacional de yacaré negro y overo en la provincia de Formosa.
La Sociedad Rural de Formosa elevó recientemente un proyecto que elaboró en forma conjunta con la Fundación Vida Silvestre para la realización el estudio poblacional de yacaré negro y overo en la provincia de Formosa.
El mismo se encuentra a disposición de las autoridades del Ministerio de la Producción, de la Dirección de Fauna y de la Dirección de Industria y Comercio de la provincia.
Esto no hace más que dar continuidad a un trabajo que se encaró desde hace varios meses la Sociedad Rural de Formosa en un proyecto cuyo objetivo es la conservación de la fauna silvestre y convertirla con el transcurrir del tiempo en una nueva actividad productiva.
En ese sentido, ya se estuvieron realizando contactos y se comenzó a trabajar con la Dirección de Fauna de la Provincia y varias fundaciones cuyo fin son, precisamente, la conservación de ese tipo de animales.
Por ello, la entidad que agrupa a los hombres de campo realiza una invitación para que todos los socios y no socios, productores de la provincia, acerquen una serie de datos relacionados con ese tema tales como que animales autóctonos hay en su propiedad, cuales son, el número de individuos aproximadamente de cada especie que podemos encontrar, etc. para ir armando una base de datos y comenzar a crear en los propios productores y su personal una conciencia de conservación de esos animales, muchos de ellos al borde de la extinción.
Dentro de este contexto, el proyecto que más impulso tiene es el de la cría y conservación del yacaré. Son numerosos los estudios que hay en esa materia, pero no existen muchos antecedentes de ese tipo en nuestra provincia, a excepción de uno realizado este año por Syrosky, que nos permitan contrastar estadísticamente la dinámica de las poblaciones silvestre de yacarés en las últimas décadas, existiendo una apreciación generalizada –por parte de los pobladores rurales-, acerca del crecimiento de las mismas en la provincia.
De acuerdo a los datos recogidos por la Sociedad Rural, en la actualidad, solo se cazan individuos de manera aislada, para consumo local de la carne, o en mayor grado, por conflictos y molestias que se generan con los pobladores que viven próximos a los cuerpos o cursos de aguas ocupados por esos reptiles, debido a que esto predan sobre animales domésticos como patos, gallinas, perros, corderos, etc.
Hoy en día, los mercados y el desarrollo tecnológico están impulsando un intenso avance de la frontera agropecuaria en toda la región, con la consecuente transformación y fragmentación de los humedales para ser incorporados a la producción agrope0cuaria tradicional, representando esta acción la mayor amenaza para las poblaciones de yacarés junto con el resto de la fauna autóctona que habita los humedales formoseños.
La revalorización económica de estos ambientes húmedos, que actualmente son considerados de baja productividad económica permitirá desarrollar nuevas estrategias de conservación y desarrollo sustentable. En ese sentido, el yacaré –junto a otras especies silvestres- ha demostrado tener un importante potencial como incentivo para la conservación de los ambientes naturales y las especies de fauna que estos contienen, al brindar a los productores y a la población rural en general, nuevas alternativas productivas, posibilidades de diversificación y novedosas fuentes de ingresos.
El mismo se encuentra a disposición de las autoridades del Ministerio de la Producción, de la Dirección de Fauna y de la Dirección de Industria y Comercio de la provincia.
Esto no hace más que dar continuidad a un trabajo que se encaró desde hace varios meses la Sociedad Rural de Formosa en un proyecto cuyo objetivo es la conservación de la fauna silvestre y convertirla con el transcurrir del tiempo en una nueva actividad productiva.
En ese sentido, ya se estuvieron realizando contactos y se comenzó a trabajar con la Dirección de Fauna de la Provincia y varias fundaciones cuyo fin son, precisamente, la conservación de ese tipo de animales.
Por ello, la entidad que agrupa a los hombres de campo realiza una invitación para que todos los socios y no socios, productores de la provincia, acerquen una serie de datos relacionados con ese tema tales como que animales autóctonos hay en su propiedad, cuales son, el número de individuos aproximadamente de cada especie que podemos encontrar, etc. para ir armando una base de datos y comenzar a crear en los propios productores y su personal una conciencia de conservación de esos animales, muchos de ellos al borde de la extinción.
Dentro de este contexto, el proyecto que más impulso tiene es el de la cría y conservación del yacaré. Son numerosos los estudios que hay en esa materia, pero no existen muchos antecedentes de ese tipo en nuestra provincia, a excepción de uno realizado este año por Syrosky, que nos permitan contrastar estadísticamente la dinámica de las poblaciones silvestre de yacarés en las últimas décadas, existiendo una apreciación generalizada –por parte de los pobladores rurales-, acerca del crecimiento de las mismas en la provincia.
De acuerdo a los datos recogidos por la Sociedad Rural, en la actualidad, solo se cazan individuos de manera aislada, para consumo local de la carne, o en mayor grado, por conflictos y molestias que se generan con los pobladores que viven próximos a los cuerpos o cursos de aguas ocupados por esos reptiles, debido a que esto predan sobre animales domésticos como patos, gallinas, perros, corderos, etc.
Hoy en día, los mercados y el desarrollo tecnológico están impulsando un intenso avance de la frontera agropecuaria en toda la región, con la consecuente transformación y fragmentación de los humedales para ser incorporados a la producción agrope0cuaria tradicional, representando esta acción la mayor amenaza para las poblaciones de yacarés junto con el resto de la fauna autóctona que habita los humedales formoseños.
La revalorización económica de estos ambientes húmedos, que actualmente son considerados de baja productividad económica permitirá desarrollar nuevas estrategias de conservación y desarrollo sustentable. En ese sentido, el yacaré –junto a otras especies silvestres- ha demostrado tener un importante potencial como incentivo para la conservación de los ambientes naturales y las especies de fauna que estos contienen, al brindar a los productores y a la población rural en general, nuevas alternativas productivas, posibilidades de diversificación y novedosas fuentes de ingresos.