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Diariamente se reciben  4.500 kilogramos de banana comprada a los campesinos pertenecientes al Programa de Acción Integral para los pequeños Productores Agropecuarios –PAIPPA- para la elaboración de mermelada que posteriormente el ministerio de Desarrollo Humano distribuye a los hospitales, centros de salud, escuelas, casas de la solidaridad y comedores comunitarios de toda la provincia.
Ayer se había cumplido el tercer día de recepción de 400 cajones diarios que, de acuerdo con una decisión del gobernador Insfrán, se paga a razón de tres pesos por unidad a quienes cultivan hasta tres hectáreas, de modo tal de generar equilibrio y precios compensatorios en el mercado estacional de este fruto que abunda en la zona norte de Formosa.
De acuerdo con las pautas de producción, inicialmente se está procesando un total de 3.000 kilogramos diarios aunque se estudia la posibilidad de aumentarla ante la gran cantidad de fruto que se ofertan en los predios “paipperos”,estimándose que esta actividad se prolongará, por lo menos, 45 días más.
La planta de Nutrir, ubicada en el Parque Industrial de esta ciudad, funcionaba ayer a pleno en dos turnos de ocho horas cada uno y se estima que las compras y el proceso de producción de mermelada se habrá de extender hasta los primeros días de octubre.
La licenciada en nutrición Dora Argüello, responsable del área de Producción de “Nutrir” confirmó que desde el lunes pasado se inició la elaboración de la mermelada de banana, procesándose cuatro toneladas y media diarias procedentes de cuatrocientos cajones que fueron comprados a los “paipperos”.
Comparten la responsabilidad de la planta el técnico en Bromatología, Ricardo Acosta, y el bioquímico Guillermo Etcheverría en Control de Calidad y Sebastián Rodrigo Gómez, en el área Contable.

El proceso integral

Tras la descarga en planta y la recepción en canastos plásticos, se pasa al área de selección donde ocho operarios se dedican a desellejar el fruto, a razón de 65 kilogramos por hora.
“Enseguida se pasa al área de Producción donde se realiza el procesamiento y licuado de las bananas en las moledoras metálicas distribuyéndose a razón de 500 kilogramos del fruto triturado por “paila” ,tras lo cual se continúa en el área de Formulación  donde se vuelve a pesar el producto obtenido con el agregado de insumos tales como azúcar, cacao, esencia de vainilla y un poco de ácido cítrico que es el que permiten que sea mínima la oxidación”, relató.
Desde el momento de la descarga hasta la terminación del producto transcurren siete horas , refiriendo Arguello que la mayor demora , cuatro horas, ocurre en la sección dedicada a quitarle la piel al fruto, precisando que se comienza a trabajar a las 5 de la mañana para trabajar de continuo hasta las 12 del mediodía.
Explicó que la cocción propiamente dicha demanda tres horas y media por cada paila que contiene 700 kilogramos de producto a las que debe agregarse una hora más para el esterilizado.

360 latas por día

La licenciada Arguello comentó que por cada jornada de trabajo se obtienen 360 latas de 10,5 kilogramos cada una que tiene un rendimiento de 350 raciones, promediándose 30 gramos por cada una de ellas, aunque se está estudiando la posibilidad de aumentar la capacidad productiva.
“Hasta hoy ( por ayer) completamos la elaboración de 700 latas”, confirmó.
Explicó que en el manejo de las cargas que se recepcionan se toma cuidado especial respecto del proceso de maduración que traen, para aclarar que las bananas que llegan muy verdes tienen excesiva cantidad de una sustancia que gelifique aceleradamente la mermelada, por lo que en estos casos se reservan los cajones hasta que alcancen el punto óptimo.
“Creo que hay que destacar el hecho de que desde la planta de “Nutrir” estamos prestando la asistencia de este servicio alimentario para los niños, ancianos y enfermos de toda la provincia y al mismo tiempo la significación social que alcanza ya que utilizamos solamente materia prima formoseña, cultivada por nuestros pequeños productores del PAIPPA, resaltó.
En ese sentido, dijo que las formulaciones se realizan en función de los ciclos productivos, dando el ejemplo de la Nutrisopa para la que se utiliza carne, arroz, poroto, coreanito, zapallito, perejil y cebolla de verdeo.”En la época de noviembre-citó- aprovechamos la cosecha de tomates para hacer la línea de salsa portuguesa y bolognesa”.

La conservación

Sobre los términos de conservación de los productos de “Nutrir” reveló que una de las ventajas que tienen es que no contienen ningún tipo de conservantes químicos.
“Por eso es que ponemos atención en el proceso de esterilización ya que de ese modo logramos la inocuidad del producto”, expresó.
De todos modos, recomendó que cada vez que se abren las latas se trata de consumir su contenido en su totalidad o en su defecto que se lo traslade a envases de plástico o de vidrio para guardarlas en la heladera por el término de dos o tres días sin que sufra alteraciones dañinas.
Finalmente, la licenciada Argüello comentó que con los resultados preliminares de la encuesta nacional de Nutrición y Salud, en “Nutrir” se está poniendo el acento en los productos fortificados ya que una de las carencias verificadas en la Argentina es la del calcio.
De allí que las líneas de leche de vainilla y chocolate están siendo fortificadas con calcio y fósforo, indicando que cada ración cubrirá el 50% del requerimiento de calcio de las personas que la consuman y de ese modo se dará respuesta a los mandamientos de la consulta que se acaba de conocer con los resultados de todo el país.