Un importante volumen de ventas se registró en las ferias francas especiales que por la tradicional conmemoración de Semana Santa.
En ese marco, los consumidores formoseños pudieron encontrar productos característicos de la época como harina de maíz, choclo desgranado, huevos caseros y queso criollo, además de chivitos, ovejas y lechones.
A éstos se sumaron otros como hortalizas, verduras, frutas, miel de abeja, escabeches, mermeladas, embutidos, etcétera.
"Además de verdura, fruta y productos como choclo, harina de maíz y queso casero, trajimos chivitos, lechones y ovejas, que para media mañana vendimos todos", comentó un productor clorindense que ofreció sus productos en la feria del barrio La Paz.
Por su parte, el coordinador ejecutivo del Instituto PAIPPA, Carlos Sotelo, valoró a las ferias francas como "un lugar de encuentro entre los productores y los consumidores, con los precios justos para ambos y productos frescos de primera calidad".
"La comercialización es el último eslabón de la cadena productiva y es allí donde muchas veces se suele fracasar, sobre todo, por la intermediación. Por eso, estas ferias francas evita esta intermediación, promoviendo la relación directa entre el productor y el consumidor. Ésa es la gran ventaja que se les da a ambos", enfatizó el funcionario.