La directora de Ceremonial del PE, Blanca del Carmen Tomás, acaba de ser distinguida nacionalmente por su dilatada experiencia y valiosos aportes en el diseño del digesto protocolar de carácter federal en vigencia.
Justamente la directora del Poder Ejecutivo Provincial fue una de las que trabajó en lo que luego quedaría contenido en el decreto nacional 2979 del año 1993, de Ordenamiento General de Precedencia Protocolar, que fija las relaciones protocolares de todo el país.
La labor de Tomás en el diseño de este instrumento legal que le dio un orden a lo protocolar, además de establecer las precedencias, representación y la competencia del conjunto de formalidades para los actos públicos y solemnes, con plena vigencia en nuestros tiempos. En la misma línea en la continuidad de iniciativas tendientes a jerarquizar la profesión con cursos y tecnicaturas especificas de formación, fueron aspectos que fundamentaron su reconocimiento.
Quien le otorgó los certificados de distinción fue la
fundación CIDEC (Centro Interdisciplinario de Estudios Culturales), prestigiosa institución de investigación y entrenamiento ejecutivo y profesional dedicado a facilitar la comunicación inter-cultural y las relaciones corporativas, profesionales y ejecutivas en general. Fue en el marco del 7° Congreso Iberoamericano y 1° Foro Internacional ALARP sobre ceremonial, relaciones públicas, hospitalidad, imagen y organización de eventos.
Incluso se significó -en el acto realizado este jueves en el Salón Auditorio de La Prove-Banco de la Provincia de Buenos Aires-, el sitial de "decana" en la función que le cabe, dado que Tomás se desempeñó como directora de Ceremonial en la Legislatura Provincial de 1992 a 1995, y desde este ultimo año a la fecha, se mantiene como directora de Ceremonial del PE.
Tras recibir los certificados de reconocimiento, agradeció a la fundación CIDEC y renovó su compromiso de seguir trabajando por los nuevos desafíos planteados, que al mismo tiempo exige a una permanente formación. Expuso que todo ello se enmarca en el contexto social que promueve el intercambio y las relaciones humanas a través de normas que se deben observar para el correcto desarrollo de los actos ceremoniales.
Tomás finalizó subrayando que "la consigna es continuar robusteciendo este proceso que iniciamos hace muchos años a fin de contribuir a la formación de recursos humanos en esta disciplina, respondiendo así a todos los actores involucrados en su accionar con vistas a un perfecciona miento continuo. Todo ello en pro de la organización de actos que se adecuen a los distintos momentos de la vida del estado y refuercen la identidad institucional".