Continúa campaña de desparasitación.

El gobierno de la provincia continúa con la campaña de desparasitación iniciada la semana pasada, y tras indicarse que en la fecha se estará asistiendo a los chicos de entre 2 y 14 años de una decena ...

El gobierno de la provincia continúa con la campaña de desparasitación iniciada la semana pasada, y tras indicarse que en la fecha se estará asistiendo a los chicos de entre 2 y 14 años de una decena de barrios de la ciudad, se anticipó que se ha diseñado un cronograma que para mediados de mayo estará alcanzando a la totalidad de los conglomerados de esta capital, es decir a más de sesenta barriadas.
En la fecha abarcará la asistencia a los barrios Itatí I y II, San Antonio, Santa Lucia, San Agustín, Las Delicias, La Floresta, El Resguardo, San Miguel y Fleming. Mañana en tanto será el turno del 20 de Julio, 8 de Octubre, Juan Domingo Perón, Luján, Municipal, Santa Rosa, Marioano MNoreno y Laguna Siam.
La campaña agresiva para liberar a personas de parásitos mediante acciones concretas, comenzó en el 2002 y se lo desarrolla hasta ahora, con medicamentos producidos en Laformed.
“Se comenzaron los trabajos de desparasitación en las diferentes barriadas y esto se va a hacer extensivo al resto de la ciudad capital en una primera etapa y posteriormente en el interior de la provincia. Si bien esto no es ninguna novedad, en el año 2002, con el programa Nutrir, que era la asistencia especial a los chicos con problemas de nutrición, se ha hecho un relevamiento de la población infantil y se ha realizado un tratamiento masivo con antiparasitarios, tanto con Metronidazol como Mebendazol, para cubrir un gran espectro, es decir la mayor cantidad de parásitos posibles, para poder tratarlos correctamente con estos medicamentos producidos por nuestro laboratorio provincial que es Laformed”, se explicó desde el Ministerio de Desarrollo Humano a través de su asesor, el doctor Luis Kaiser.
Añadió que “a partir de allí se siguió manteniendo la desparasitación, ya no en forma masiva sino dirigida a quienes iban necesitando periódicamente volver a repetir el tratamiento y hasta la fecha eso sigue vigente.
Además de los antiparasitarios también se hizo la asistencia con polivitamínicos, con hierro, con zinc, también muchos de ellos producidos por nuestro propio laboratorio”.
“Lo que hoy se está haciendo- sostuvo-  es una actividad muy similar, en el conjunto con el ministerio de Salud y Ambiente de la Nación, donde este programa va a proveer fundamentalmente Mebendazol, es decir una de estas drogas antiparasitarias, que actúa sobre un espectro de parásitos, fundamentalmente sobre las lombrices, sobre los gusanos. El más conocido en la provincia es el ascarix, que es una de las lombrices que más hay en cuanto a prevalencia, en cuanto a cantidad”.
Luego explicó Káiser que “Nación ha lanzando un programa donde provee fundamentalmente Mebendazol y cubre un porcentaje determinado de población de las provincias. En el caso particular de Formosa, están incluidos cinco departamentos y solamente la población con necesidades básicas insatisfechas”.



Esfuerzo de complementación


Posteriormente sostuvo que “el gobierno provincial, a través del Ministerio de Desarrollo Humano, ha hecho el esfuerzo de complementar esto y lo hace extensivo a todos los niños de 2 a 14 años de toda la provincia, independientemente de las necesidades básicas insatisfechas o no. Eso va a cubrir a los niños de 2 a 14 años en todo el territorio provincial. En esta primera etapa, también con Mebendazol, que es el mismo medicamento que lo estamos haciendo en conjunto con Nación, y posteriormente, como esto se va a repetir cada seis meses durante dos años vamos a incorporar el Metronidazol”.
Vuelvo a reiterar que los productos que incorpora la provincia son fabricados en el laboratorio provincial, situado en el Parque Industrial, al suroeste de la capital.
“El Mebendazol tiene la ventaja de no tener ningún efecto colateral más allá del gusto desagradable que tiene; las madres saben lo que cuesta darle el Mebendazol a los chicos porque, independientemente del laboratorio que los fabrique, el gusto en sí del medicamento no es óptimo, no es más agradable para los chicos. No obstante esto la posibilidad de que el chico lo vomite porque no le guste o por otras cosas es muy bajo, menos del 1 por ciento, es decir que el éxito del medicamento es más que aceptable, es excelente; puso de relieve Káiser.
Por último, dijo que  “por otra parte, como no se absorbe el medicamento, actúa como cualquier otra cosa que se ingiere, en que pasa de la boca al final del tubo digestivo, uno elimina el Mebendazol, es como una pintura que mata los parásitos y se vuelve a eliminar. Es decir no pasa a la sangre porque no tiene una dosis tóxica. Por poner un ejemplo, uno le puede dar un litro de Mebendazol, sin tener consecuencias posteriores que no sean para los objetivos establecidos”. Finalizó.

02-05-2006 | Cargada en Salud - Fuente: Subsecretaría de Comunicación Social