El Programa de Trasplante Renal del Hospital de Alta Complejidad "Presidente Juan Domingo Perón" refleja y ostenta orgulloso en su haber médico, nada más y nada menos que 112 trasplantes renales.
Este logro coloca a la institución en la cúspide de la medicina en tal sentido, con el condimento fuerte que se trata de un hospital público y de muy joven existencia.
El mencionado programa fue puesto en funcionamiento en el año 2007 por habilitación del Instituto Nacional Central Único Coordinador de Ablación e Implante INCUCAI y desde ese día cada cirugía se ha convertido en una victoria, lo que arroja como saldo una satisfacción compartida luego de un intenso y comprometido trabajo en equipo.
Tal es así que en lo que va del año lleva sumado 8 intervenciones sumando un total de 112 trasplantes renales de los cuales 44 son con donante vivo relacionado y 68 con donante cadavérico.
La capacitación del cuerpo de profesionales y las políticas sanitarias llevadas adelante por el Ministerio de Desarrollo Humano respaldan este proceso y convierten al HAC en Centro de Referencia del NEA en materia de trasplantes.
El Jefe del Equipo de Trasplante Renal del HAC Dr. Federico Cicora destacó la importancia de los trabajos realizados y el acceso que hoy pueden tener los pacientes con o sin cobertura social. Además remarcó el proceso previo que conduce esta compleja intervención que está compuesta por varios pasos logísticos de diversa índole, con un ordenamiento sistematizado, que requieren de acciones coordinadas en cada una de sus etapas.
"La cirugía de implante es un acto de la más alta especialidad técnica, consiste en unir los vasos sanguíneos del órgano implantado a los vasos del receptor, hacer que la sangre vuelva a circular en el interior del injerto y que éste nuevamente recupere su funcionalidad, realmente un milagro de la vida y la medicina" explico el profesional
Existen dos tipos de trasplantes uno con donante vivo relacionado, involucra a un familiar directo hasta tercer grado de parentesco, que sea compatible biológicamente con el receptor; la segunda opción es la donación de órganos de una persona ya fallecida, quien en vida se haya manifestado a favor de la donación de órganos y tejidos y cuyo fallecimiento haya ocurrido en una unidad de terapia intensiva tras una enfermedad neurológica aguda como ser un traumatismo craneano o un accidente cerebrovascular, que afecta la vitalidad cerebral pero no el funcionamiento de los demás órganos del cuerpo los que son mantenidos artificialmente una vez llegada la muerte, con la finalidad de lograr un trasplante.
"Este es un proceso muy complejo y requiere coordinación entre un equipo local que realiza la evaluación de la funcionalidad de los órganos, análisis de compatibilidad biológica y descarta la presencia de enfermedades transmisibles como enfermedades oncológicas. Un segundo equipo es del INCUCAI, que se encarga de recabar todos los datos del donante, realizando una lista de posibles candidatos al trasplante los que se ordenan en sentido de prioridad según algunos criterios que involucran inicialmente la compatibilidad biológica, el tiempo en lista de espera a nivel nacional, la gravedad del cuadro actual del paciente y en algunos casos la regionalidad, dando prioridad inicialmente a los pacientes de la región donde se realizo la donación".
Luego agregó "un sin número de especialistas participan de esta intervención, cirujanos, enfermeras, anestesiólogos, banco de sangre, laboratorio, ambulancias y aviones para el traslado de los órganos y equipo médico todos coordinados por el organismo antes mencionado"
Una vez realizado el procedimiento el paciente pasa a sala de cuidados intensivos para su recuperación donde permanece monitoreado y controlado minuto a minuto por un lapso de 72 hs a una semana, iniciando en este momento el tratamiento inmunosupresor.
Luego de un paso por la sala general donde se constata que todo haya salido satisfactoriamente y el paciente se encuentra recuperado, retorna a su vida cotidiana bajo un estricto control a cargo del equipo de trasplante del hospital, el que realiza evaluaciones periódicas del progreso del paciente trasplantado.
En cada de una de las acciones realizadas, se deposita la confianza y el éxito alcanzado en más de una centenar de intervenciones.
El mencionado programa fue puesto en funcionamiento en el año 2007 por habilitación del Instituto Nacional Central Único Coordinador de Ablación e Implante INCUCAI y desde ese día cada cirugía se ha convertido en una victoria, lo que arroja como saldo una satisfacción compartida luego de un intenso y comprometido trabajo en equipo.
Tal es así que en lo que va del año lleva sumado 8 intervenciones sumando un total de 112 trasplantes renales de los cuales 44 son con donante vivo relacionado y 68 con donante cadavérico.
La capacitación del cuerpo de profesionales y las políticas sanitarias llevadas adelante por el Ministerio de Desarrollo Humano respaldan este proceso y convierten al HAC en Centro de Referencia del NEA en materia de trasplantes.
El Jefe del Equipo de Trasplante Renal del HAC Dr. Federico Cicora destacó la importancia de los trabajos realizados y el acceso que hoy pueden tener los pacientes con o sin cobertura social. Además remarcó el proceso previo que conduce esta compleja intervención que está compuesta por varios pasos logísticos de diversa índole, con un ordenamiento sistematizado, que requieren de acciones coordinadas en cada una de sus etapas.
"La cirugía de implante es un acto de la más alta especialidad técnica, consiste en unir los vasos sanguíneos del órgano implantado a los vasos del receptor, hacer que la sangre vuelva a circular en el interior del injerto y que éste nuevamente recupere su funcionalidad, realmente un milagro de la vida y la medicina" explico el profesional
Existen dos tipos de trasplantes uno con donante vivo relacionado, involucra a un familiar directo hasta tercer grado de parentesco, que sea compatible biológicamente con el receptor; la segunda opción es la donación de órganos de una persona ya fallecida, quien en vida se haya manifestado a favor de la donación de órganos y tejidos y cuyo fallecimiento haya ocurrido en una unidad de terapia intensiva tras una enfermedad neurológica aguda como ser un traumatismo craneano o un accidente cerebrovascular, que afecta la vitalidad cerebral pero no el funcionamiento de los demás órganos del cuerpo los que son mantenidos artificialmente una vez llegada la muerte, con la finalidad de lograr un trasplante.
"Este es un proceso muy complejo y requiere coordinación entre un equipo local que realiza la evaluación de la funcionalidad de los órganos, análisis de compatibilidad biológica y descarta la presencia de enfermedades transmisibles como enfermedades oncológicas. Un segundo equipo es del INCUCAI, que se encarga de recabar todos los datos del donante, realizando una lista de posibles candidatos al trasplante los que se ordenan en sentido de prioridad según algunos criterios que involucran inicialmente la compatibilidad biológica, el tiempo en lista de espera a nivel nacional, la gravedad del cuadro actual del paciente y en algunos casos la regionalidad, dando prioridad inicialmente a los pacientes de la región donde se realizo la donación".
Luego agregó "un sin número de especialistas participan de esta intervención, cirujanos, enfermeras, anestesiólogos, banco de sangre, laboratorio, ambulancias y aviones para el traslado de los órganos y equipo médico todos coordinados por el organismo antes mencionado"
Una vez realizado el procedimiento el paciente pasa a sala de cuidados intensivos para su recuperación donde permanece monitoreado y controlado minuto a minuto por un lapso de 72 hs a una semana, iniciando en este momento el tratamiento inmunosupresor.
Luego de un paso por la sala general donde se constata que todo haya salido satisfactoriamente y el paciente se encuentra recuperado, retorna a su vida cotidiana bajo un estricto control a cargo del equipo de trasplante del hospital, el que realiza evaluaciones periódicas del progreso del paciente trasplantado.
En cada de una de las acciones realizadas, se deposita la confianza y el éxito alcanzado en más de una centenar de intervenciones.