Más allá que la situación de comunidades como la de Misión Pozo Yacare tiene a mejorar, producto que se viene dando un descenso de las aguas desbordadas del río Bermejo en ese extremo oeste provincial, se mantiene el alerta ...
Más allá que la situación de comunidades como la de Misión Pozo Yacare tiene a mejorar, producto que se viene dando un descenso de las aguas desbordadas del río Bermejo en ese extremo oeste provincial, se mantiene el alerta en todo sentido, sobre todo a partir de que pudieran registrarse nuevas lluvias.
De acuerdo a lo explicado por el titular del Comando de Emergencia, comisario inspector Angel Peña, “la comunidad de Pozo Yacaré continua
aislada, aunque es alentador el hecho de que se haya producido una bajante de las aguas, y ello queda en evidencia en el corte de la ruta 39, se redujo a dos kilómetros, cuando hace un par de días era de diez”, subrayando que “el cuadro de situación tiende a mejorar”.
Sostuvo que “la situación está controlada, más allá que el pico de crecida del río Bermejo ha sido importante, por supuesto alimentado por los grandes volúmenes de la alta cuenca, dejando aislada a toda la comunidad la semana anterior. Esto hizo que se hayan visto afectadas unas 111 familias que totalizan 500 personas aproximadamente, de los cuales un 80% son aborígenes y el 20% restante criolla, donde no se verificó riesgo alguno en materia sanitaria, inclusive el dictado de clases se sigue desarrollando”.
Explicó que “se venía haciendo un seguimiento del comportamiento del río Bermejo, es por ello que hubo una respuesta inmediata y de manera coordinada con el comité de emergencia que está funcionando en Ingeniero Juárez y al frente del cual se halla el intendente Cristino Mendoza”.
Aludió Peña que para poder hacer llegar la ayuda de víveres, medicamentos y otros elementos necesarios en este tipo de situación están utilizando canoas y vehículos como Unimos y tractores, ello debido al corte de la ruta 39.
“El día sábado se estabilizó el agua, para luego comenzar un paulatino descenso de las aguas, y lentamente todo tiende a mejorar”, indicó, para agregar que “de todas maneras el monitoreo es permanente, dado que por ejemplo acaba de producirse nuevas e importantes precipitaciones que podría incidir en un nuevo e importante pico producto de un repunte de las aguas”.
Advirtió que “el agua estuvo próximo a la comunidad, y como es algo que los especialistas pronostican ocurrirá de manera permanente, ya se está construyendo un nuevo asentamiento en proximidades de la intersección de las rutas 39 y 9, es decir a unos 15 kilómetros al norte de donde se encuentra actualmente esta población”, añadiendo que “ya se construyó una escuela y está en marcha las obras para las viviendas, y más allá de la idiosincrasia de la población, que mayoritariamente es aborigen, hace que se muestren renuentes a salir del lugar, ellos conviven con la naturaleza y la pesca, la caza, son dos actividades tradicionales que hace que no quieran dejar la zona, comprenderán que este traslado debe hacerse por su bienestar”.