En el marco de la campaña de prevención contra el dengue que realiza el Ministerio de Desarrollo Humano, esta semana se llevarán a cabo en diferentes sectores de la capital y también en zonas fronterizas de la provincia, tareas de fumigación y descacharrizado.
Este martes, los brigadistas estarán visitando los domicilios de los vecinos del barrio San Antonio, donde se realizará las fumigaciones dentro de las casas y en los patios, además de los descacharrizados correspondientes. Por otra parte, las fumigaciones espaciales en calles y espacios públicas se efectuarán también en este mismo barrio. Todas las tareas serán acompañadas por la entrega de materiales educativos-informativos para la prevención del Dengue, repelentes y larvicidas.
Además, en el área portuaria capitalina, la brigada sanitaria estará fumigando las zonas de paso Formosa -Alberdi y las embarcaciones que se trasladan hacia el vecino país. Del mismo modo, idénticas tareas se concretarán en la ciudad fronteriza de Clorinda. La cartera sanitaria local pone especial énfasis en estos puntos geográficos, teniendo en cuenta la situación actual que sufre el Paraguay con respecto a la enfermedad del Dengue, por lo cual es prioridad, el establecimiento de un cordón sanitario que evite la circulación del virus hacia nuestro territorio.
Desde la cartera Sanitaria se sugiere a la población a continuar con las medidas preventivas tendientes a eliminar todos los posibles criaderos del mosquito transmisor del Dengue, el Aedes aegypti. Hasta el momento, no hay vacunas que puedan prevenir esta enfermedad, tampoco medicación ni tratamiento específico; por lo tanto la eliminación de los criaderos de este insecto constituye la medida fundamental para detener al Dengue.
Por ello, se recuerda que el Aedes aegypti tiene hábitos domiciliarios, para poner sus huevos, desarrollarse y habitar elige aquellos objetos que formen paredes y que contengan agua limpia y quieta, prefiriendo, además, lugares frescos y sombríos. Se alimenta (pica), preferentemente, en los horarios en que el sol calienta con menos intensidad (amanecer y atardecer). Sin embargo dentro de las casas, y en los espacios que están al resguardo del sol, este mosquito puede tener actividad en cualquier momento del día.
Una de las pautas más importantes es evitar la picadura del mosquito, a través del cuidado personal. Para lo cual es necesario colocarse repelente, cuya aplicación debe ser renovada cada tres horas. Además, de ser posible debe colocarse en las casas telas mosqueras en puertas y ventanas y utilizar mosquiteros; también se debe ahuyentar a estos insectos colocando tabletas matamosquitos, o rociando con insecticidas adecuados para el uso doméstico o espirales.
Sumado a esto, para evitar contraer esta enfermedad se solicita a la ciudadanía, incorporar y concretar el hábito diario de revisar dentro y fuera de las casas, como asimismo los lugares de trabajo u otras actividades, desechando el agua estancada de cualquier tipo de recipiente; se requiere también eliminar todo objeto que se encuentre en desuso y tapar herméticamente aquellos que se usan a diario.
Piden atención a enfermedades diarreicas en el periodo estival.
Por otra parte desde el ministerio de Desarrollo de Formosa se recuerda que en verano el clima, favorece la diseminación de las bacterias que provocan las diarreas, debido a esto son más frecuentes en este periodo. Además, con las altas temperaturas aumenta el riesgo de deshidratación. Por eso en caso de diarrea es importante acudir al médico y no auto-medicarse, ya que puede ser el síntoma de otras enfermedades, como ser del cólera.
Las enfermedades diarreicas son infecciones del tracto digestivo ocasionadas por bacterias, virus o parásitos, cuyo principal síntoma es la diarrea, que se manifiesta por la deposición de 3 o más veces al día de heces sueltas o líquidas. Sin embargo, cabe aclarar que la deposición frecuente de heces de consistencia sólida no es diarrea, ni tampoco la deposición de heces de consistencia suelta y "pastosa" de los bebés amamantados.
Hay tres tipos clínicos de enfermedades diarreicas: la diarrea acuosa aguda, que dura varias horas o días, como en el caso del cólera; la diarrea con sangre aguda, también llamada diarrea disentérica o disentería; y la diarrea persistente, que dura 14 días o más. La diarrea suele durar varios días y de acuerdo a su frecuencia puede privar al organismo del agua y las sales necesarias para la supervivencia.
La mayoría de las personas que fallecen por enfermedades diarreicas en realidad mueren por una grave deshidratación y pérdida de líquidos. El grupo más vulnerable a las consecuencias que acarrean estas enfermedades son los niños malnutridos o inmunodeprimidos, quienes presentan mayor riesgo de enfermedades diarreicas potencialmente mortales. Por este motivo, a nivel mundial, las enfermedades diarreicas son la segunda causa de muerte en niños menores de cinco años.
Los agentes infecciosos causantes de la diarrea son variados y se transmiten habitualmente por la vía fecal-oral, es decir, a través de la ingesta de agua o alimentos contaminados con materia fecal, o mediante la contaminación directa de las manos u objetos utilizados diariamente.
Existen diferentes aspectos que pueden facilitar la transmisión de las enfermedades que provocan la diarrea, como es el caso, por ejemplo de la infección, ya que la diarrea es un síntoma de infecciones ocasionadas por diversos organismos bacterianos, virales y parásitos, que en su mayoría se transmiten por agua con contaminación fecal. La infección es más común cuando hay escasez de agua limpia para beber, cocinar y lavar. Las dos causas más comunes de enfermedades diarreicas son los rotavirus y la bacteria Escherichia coli.
Otra de las causas es la malnutrición. En este caso, los niños que la padecen son mucho más vulnerables a las enfermedades diarreicas. A su vez, cada episodio de diarrea empeora su estado nutricional. Por otra parte, la fuente de agua apta para el consumo humano es otro de los factores que ocasiona diarreas. El agua contaminada con heces humanas procedentes, por ejemplo, de aguas residuales, fosas sépticas o letrinas, es particularmente peligrosa. Las heces de animales también contienen microorganismos capaces de ocasionar enfermedades diarreicas.
Las enfermedades diarreicas pueden también transmitirse de persona a persona, en particular en condiciones de higiene personal deficiente. Los alimentos elaborados o almacenados en condiciones antihigiénicas son otra causa principal de diarrea. Los alimentos pueden contaminarse por el agua de riego. También pueden ocasionar enfermedades diarreicas los pescados y mariscos provenientes de aguas contaminadas.
Tratamiento
Entre las medidas claves para tratar las enfermedades diarreicas es importante tener en cuenta la hidratación. Para ello deben suministrarse a las personas líquidos abundantes, también el consumo de solución de sales de rehidratación oral (SRO), en caso de no existir deshidratación o de que ésta sea moderada. Las SRO son una mezcla de agua segura, sal y azúcar, que se absorben en el intestino delgado y reponen rápidamente el agua y los electrolitos perdidos en las heces.
Mientras que para los casos de deshidratación severa o estado de shock, deben administrarse fluidos intravenosos. Otro de los factores importantes son los complementos de zinc, ya que reducen en un 25 % la duración de los episodios de diarrea y están asociados a una disminución del 30 % del volumen de las heces.
Por otra parte, es también de suma importancia, la ingesta de alimentos ricos en nutrientes ya que el círculo vicioso de la malnutrición y las enfermedades diarreicas pueden romperse continuando con la administración de alimentos nutritivos. En los bebés y niños pequeños, es necesario no interrumpir la lactancia materna durante los episodios de diarrea, esto debe continuar aún, una vez que los niños están sanos.
Desde el Ministerio de Desarrollo Humano se recomienda que frente a la presencia de diarrea, debe acudirse inmediatamente a la consulta médica al centro de salud u hospital más cercano, en especial cuando estos síntomas se presentan en bebés o niños pequeños, embarazadas y personas con enfermedades crónicas, debido a que estos grupos resultan los más afectados por las consecuencias que acarrean las diarreas
Además, en el área portuaria capitalina, la brigada sanitaria estará fumigando las zonas de paso Formosa -Alberdi y las embarcaciones que se trasladan hacia el vecino país. Del mismo modo, idénticas tareas se concretarán en la ciudad fronteriza de Clorinda. La cartera sanitaria local pone especial énfasis en estos puntos geográficos, teniendo en cuenta la situación actual que sufre el Paraguay con respecto a la enfermedad del Dengue, por lo cual es prioridad, el establecimiento de un cordón sanitario que evite la circulación del virus hacia nuestro territorio.
Desde la cartera Sanitaria se sugiere a la población a continuar con las medidas preventivas tendientes a eliminar todos los posibles criaderos del mosquito transmisor del Dengue, el Aedes aegypti. Hasta el momento, no hay vacunas que puedan prevenir esta enfermedad, tampoco medicación ni tratamiento específico; por lo tanto la eliminación de los criaderos de este insecto constituye la medida fundamental para detener al Dengue.
Por ello, se recuerda que el Aedes aegypti tiene hábitos domiciliarios, para poner sus huevos, desarrollarse y habitar elige aquellos objetos que formen paredes y que contengan agua limpia y quieta, prefiriendo, además, lugares frescos y sombríos. Se alimenta (pica), preferentemente, en los horarios en que el sol calienta con menos intensidad (amanecer y atardecer). Sin embargo dentro de las casas, y en los espacios que están al resguardo del sol, este mosquito puede tener actividad en cualquier momento del día.
Una de las pautas más importantes es evitar la picadura del mosquito, a través del cuidado personal. Para lo cual es necesario colocarse repelente, cuya aplicación debe ser renovada cada tres horas. Además, de ser posible debe colocarse en las casas telas mosqueras en puertas y ventanas y utilizar mosquiteros; también se debe ahuyentar a estos insectos colocando tabletas matamosquitos, o rociando con insecticidas adecuados para el uso doméstico o espirales.
Sumado a esto, para evitar contraer esta enfermedad se solicita a la ciudadanía, incorporar y concretar el hábito diario de revisar dentro y fuera de las casas, como asimismo los lugares de trabajo u otras actividades, desechando el agua estancada de cualquier tipo de recipiente; se requiere también eliminar todo objeto que se encuentre en desuso y tapar herméticamente aquellos que se usan a diario.
Piden atención a enfermedades diarreicas en el periodo estival.
Por otra parte desde el ministerio de Desarrollo de Formosa se recuerda que en verano el clima, favorece la diseminación de las bacterias que provocan las diarreas, debido a esto son más frecuentes en este periodo. Además, con las altas temperaturas aumenta el riesgo de deshidratación. Por eso en caso de diarrea es importante acudir al médico y no auto-medicarse, ya que puede ser el síntoma de otras enfermedades, como ser del cólera.
Las enfermedades diarreicas son infecciones del tracto digestivo ocasionadas por bacterias, virus o parásitos, cuyo principal síntoma es la diarrea, que se manifiesta por la deposición de 3 o más veces al día de heces sueltas o líquidas. Sin embargo, cabe aclarar que la deposición frecuente de heces de consistencia sólida no es diarrea, ni tampoco la deposición de heces de consistencia suelta y "pastosa" de los bebés amamantados.
Hay tres tipos clínicos de enfermedades diarreicas: la diarrea acuosa aguda, que dura varias horas o días, como en el caso del cólera; la diarrea con sangre aguda, también llamada diarrea disentérica o disentería; y la diarrea persistente, que dura 14 días o más. La diarrea suele durar varios días y de acuerdo a su frecuencia puede privar al organismo del agua y las sales necesarias para la supervivencia.
La mayoría de las personas que fallecen por enfermedades diarreicas en realidad mueren por una grave deshidratación y pérdida de líquidos. El grupo más vulnerable a las consecuencias que acarrean estas enfermedades son los niños malnutridos o inmunodeprimidos, quienes presentan mayor riesgo de enfermedades diarreicas potencialmente mortales. Por este motivo, a nivel mundial, las enfermedades diarreicas son la segunda causa de muerte en niños menores de cinco años.
Los agentes infecciosos causantes de la diarrea son variados y se transmiten habitualmente por la vía fecal-oral, es decir, a través de la ingesta de agua o alimentos contaminados con materia fecal, o mediante la contaminación directa de las manos u objetos utilizados diariamente.
Existen diferentes aspectos que pueden facilitar la transmisión de las enfermedades que provocan la diarrea, como es el caso, por ejemplo de la infección, ya que la diarrea es un síntoma de infecciones ocasionadas por diversos organismos bacterianos, virales y parásitos, que en su mayoría se transmiten por agua con contaminación fecal. La infección es más común cuando hay escasez de agua limpia para beber, cocinar y lavar. Las dos causas más comunes de enfermedades diarreicas son los rotavirus y la bacteria Escherichia coli.
Otra de las causas es la malnutrición. En este caso, los niños que la padecen son mucho más vulnerables a las enfermedades diarreicas. A su vez, cada episodio de diarrea empeora su estado nutricional. Por otra parte, la fuente de agua apta para el consumo humano es otro de los factores que ocasiona diarreas. El agua contaminada con heces humanas procedentes, por ejemplo, de aguas residuales, fosas sépticas o letrinas, es particularmente peligrosa. Las heces de animales también contienen microorganismos capaces de ocasionar enfermedades diarreicas.
Las enfermedades diarreicas pueden también transmitirse de persona a persona, en particular en condiciones de higiene personal deficiente. Los alimentos elaborados o almacenados en condiciones antihigiénicas son otra causa principal de diarrea. Los alimentos pueden contaminarse por el agua de riego. También pueden ocasionar enfermedades diarreicas los pescados y mariscos provenientes de aguas contaminadas.
Tratamiento
Entre las medidas claves para tratar las enfermedades diarreicas es importante tener en cuenta la hidratación. Para ello deben suministrarse a las personas líquidos abundantes, también el consumo de solución de sales de rehidratación oral (SRO), en caso de no existir deshidratación o de que ésta sea moderada. Las SRO son una mezcla de agua segura, sal y azúcar, que se absorben en el intestino delgado y reponen rápidamente el agua y los electrolitos perdidos en las heces.
Mientras que para los casos de deshidratación severa o estado de shock, deben administrarse fluidos intravenosos. Otro de los factores importantes son los complementos de zinc, ya que reducen en un 25 % la duración de los episodios de diarrea y están asociados a una disminución del 30 % del volumen de las heces.
Por otra parte, es también de suma importancia, la ingesta de alimentos ricos en nutrientes ya que el círculo vicioso de la malnutrición y las enfermedades diarreicas pueden romperse continuando con la administración de alimentos nutritivos. En los bebés y niños pequeños, es necesario no interrumpir la lactancia materna durante los episodios de diarrea, esto debe continuar aún, una vez que los niños están sanos.
Desde el Ministerio de Desarrollo Humano se recomienda que frente a la presencia de diarrea, debe acudirse inmediatamente a la consulta médica al centro de salud u hospital más cercano, en especial cuando estos síntomas se presentan en bebés o niños pequeños, embarazadas y personas con enfermedades crónicas, debido a que estos grupos resultan los más afectados por las consecuencias que acarrean las diarreas