Ayer 22 de marzo se recordó el Día Mundial del Agua, fecha que desde la esfera de gobierno se consideró oportuna para ratificar la estratégica política de estado en el aprovechamiento y manejo de los recursos hídricos. Sobre el particular se aludió ...
Ayer 22 de marzo se recordó el Día Mundial del Agua, fecha que desde la esfera de gobierno se consideró oportuna para ratificar la estratégica política de estado en el aprovechamiento y manejo de los recursos hídricos.
Sobre el particular se aludió al manejo que se realiza en todo el territorio para terminar con el desequilibrio que existe en la distribución del agua de lluvia y de espejos superficiales, como también en aprovechar los acuíferos subterráneos, como ya ocurre en el oeste y a las obras destinadas al mejoramiento del servicio de aguas corrientes potabilizadas en los centros urbanos.
Las obras de reactivación y regulación para el aprovechamiento de las aguas de varios riachos que cursan la zona norte del territorio, apuntando a disponer de agua suficiente para consumo humano, dado el rápido crecimiento urbano, como así también satisfacer las necesidades productivas, se enmarcan dentro de las acciones en pleno desarrollo.
La obra hidrovial sobre la ruta 28 es una prueba palpable de cómo se puede manejar los recursos hídricos, ya que la misma aún sin estar concluida, logró atenuar el impacto de crecidas extraordinarias sobre la población, y ya se vislumbra como miles de hectáreas con déficit hídrico, se están convirtiendo en productivas merced al reaseguro del vital líquido que estos trabajos están permitiendo.
La construcción de las defensas definitivas en El Colorado, a la vera del río Bermejo, también el anillo contra inundaciones entre El Palmar y El Potrillo y la construcción de 55 kilómetros de correderas fluviales en la que participaron activamente pobladores aborígenes de la zona de María Cristina y El Potrillo, se cuentan entre los proyectos en pleno desarrollo y ya terminados en otros, con lo cual se está disminuyendo sensiblemente la cantidad de personas afectadas por este fenómeno natural.
Asimismo, se cuenta que se ha mejorado el sistema de captación de aguas en la toma de El Potrerito con la construcción de un nuevo canal de 2.000 metros. Ello nos permitirá conducir con mayor eficacia las aguas del Bermejo, hasta el embalse de Laguna Yema y por lo tanto garantizar mayor provisión de agua a través del sistema de canales a las localidades y emprendimientos productivos de la ruta 81, entre Laguna Yema y Las Lomitas.
En cuanto a la infraestructura para la provisión de agua potable, una obra de envergadura está próxima a iniciarse, y se trata de la nueva planta potabilizadora para Formosa, con un horizonte de cobertura superior a las próximas dos décadas.
También continua el programa de perforaciones profundas con excelentes resultados, agregándose a las perforaciones ya realizadas en las localidades de María Cristina y Lote 8, las de El Chorro, El Potrillo y Pozo de Maza, encontrándose en ejecución la perforación en Fraga. Los resultados son más que interesantes, ya que están permitiendo satisfacer los requerimientos de agua potable de excelente calidad a más de 60 comunidades del extremo oeste formoseño.
Por otra parte, también se continúa con la optimización y ampliación de redes de agua potable en las localidades de General Belgrano, Los Chiriguanos, Fontana y Herradura y que se han construido dos plantas potabilizadoras nuevas en las localidades de Villa Escolar y Perín.
Sobre el particular se aludió al manejo que se realiza en todo el territorio para terminar con el desequilibrio que existe en la distribución del agua de lluvia y de espejos superficiales, como también en aprovechar los acuíferos subterráneos, como ya ocurre en el oeste y a las obras destinadas al mejoramiento del servicio de aguas corrientes potabilizadas en los centros urbanos.
Las obras de reactivación y regulación para el aprovechamiento de las aguas de varios riachos que cursan la zona norte del territorio, apuntando a disponer de agua suficiente para consumo humano, dado el rápido crecimiento urbano, como así también satisfacer las necesidades productivas, se enmarcan dentro de las acciones en pleno desarrollo.
La obra hidrovial sobre la ruta 28 es una prueba palpable de cómo se puede manejar los recursos hídricos, ya que la misma aún sin estar concluida, logró atenuar el impacto de crecidas extraordinarias sobre la población, y ya se vislumbra como miles de hectáreas con déficit hídrico, se están convirtiendo en productivas merced al reaseguro del vital líquido que estos trabajos están permitiendo.
La construcción de las defensas definitivas en El Colorado, a la vera del río Bermejo, también el anillo contra inundaciones entre El Palmar y El Potrillo y la construcción de 55 kilómetros de correderas fluviales en la que participaron activamente pobladores aborígenes de la zona de María Cristina y El Potrillo, se cuentan entre los proyectos en pleno desarrollo y ya terminados en otros, con lo cual se está disminuyendo sensiblemente la cantidad de personas afectadas por este fenómeno natural.
Asimismo, se cuenta que se ha mejorado el sistema de captación de aguas en la toma de El Potrerito con la construcción de un nuevo canal de 2.000 metros. Ello nos permitirá conducir con mayor eficacia las aguas del Bermejo, hasta el embalse de Laguna Yema y por lo tanto garantizar mayor provisión de agua a través del sistema de canales a las localidades y emprendimientos productivos de la ruta 81, entre Laguna Yema y Las Lomitas.
En cuanto a la infraestructura para la provisión de agua potable, una obra de envergadura está próxima a iniciarse, y se trata de la nueva planta potabilizadora para Formosa, con un horizonte de cobertura superior a las próximas dos décadas.
También continua el programa de perforaciones profundas con excelentes resultados, agregándose a las perforaciones ya realizadas en las localidades de María Cristina y Lote 8, las de El Chorro, El Potrillo y Pozo de Maza, encontrándose en ejecución la perforación en Fraga. Los resultados son más que interesantes, ya que están permitiendo satisfacer los requerimientos de agua potable de excelente calidad a más de 60 comunidades del extremo oeste formoseño.
Por otra parte, también se continúa con la optimización y ampliación de redes de agua potable en las localidades de General Belgrano, Los Chiriguanos, Fontana y Herradura y que se han construido dos plantas potabilizadoras nuevas en las localidades de Villa Escolar y Perín.