Las acciones son encaradas a raíz de que el estado paraguayo retiró una pensión otorgada a una anciana por no haber nacido en ese país, incluso exigiéndole la devolución de lo ya percibido.
"Estamos trabajando en tomar contacto con esta señora que esta residiendo en el vecino país de Paraguay y donde su condición de nacionalidad argentina hizo que se le retirara una pensión, para ocuparnos de inmediato en gestionarle una pensión provincial", explico el administrador del Instituto de Pensiones Sociales (IPS), Hugo Arrúa.
Lamentó el funcionario la situación de la anciana de 81 años, que la misma prensa "guaraní" identificó como Guillermina Arce de Miranda de 81 años, a quien el estado paraguayo le retiró una pensión que le había otorgado hace seis meses por no haber nacido en ese país e incluso le exigen la devolución de lo ya percibido.
Arrúa expuso que "venimos trabajando en contactarnos con esta señora y ver su condición social -que se indica nació en Pirané- que por lo que se expuso a través de los medios se encuentra en una situación delicada, y el propósito es beneficiarla con una pensión provincial". Mas allá de dejar en claro su total respeto a las disposiciones soberanas que tiene cada país, no ocultó su extrañeza por la decisión adoptada por la esfera de Pensiones No Contributivas (DPNC) del ministerio de Hacienda de Paraguay, al tiempo de marcar que "situaciones como estas hace que valoremos en toda su dimensión nuestro sistema de protección social".
Abundó insistiendo que "lo ocurrido que no es nada grato, y en forma inmediata de enterarnos nos pusimos manos a la obra para ver cómo poder tender una mano de solidaridad desde el IPS, beneficiándola con una pensión, viva donde viva. Al mismo tiempo, insisto, expone el valor del sistema social que existe en nuestra provincia. No existe en Formosa ningún adulto mayor que no tenga su beneficio que le dé la posibilidad de vivir dignamente en la última etapa de su vida", subrayó.
Cuantificó en 8500 los afiliados al Instituto de Pensiones Sociales, los cuales no solo reciben una pensión, sino también un amplio plan de beneficios en salud, en lo social, educación, recreación y todo lo que tiene que ver con mejorarles sus condiciones de vida, señalando que entre ellos "claro que hay gente nacida en Paraguay, quienes están viviendo hace décadas en nuestra tierra, donde criaron a sus hijos, y al ser ciudadanos naturalizados la ley los ampara totalmente".