Inicio del ciclo lectivo del Instituto Superior de Formación Policial.

El gobernador de la provincia, Gildo Insfrán, presidio en la tarde-noche de ayer el acto de habilitación del periodo lectivo 2006 del Instituto Superior de Formación Policial, el cual se llevó a cabo en la sede de la institución situada en el barrio San Antonio ...

El gobernador de la provincia, Gildo Insfrán, presidio en la tarde-noche de ayer el acto de habilitación del periodo lectivo 2006 del Instituto Superior de Formación Policial, el cual se llevó a cabo en la sede de la institución situada en el barrio San Antonio de esta ciudad.
Junto al vicegobernador Floro Bogado, miembros de los demás poderes del Estado, ministros de su cartera, la plana mayor policial encabezada por el jefe policial, comisario general Crisanto Ortíz, y de otras fuerzas de seguridad, además de los alumnos y familiares de estos, se puso en marcha las nuevas promociones del tercero, segundo y primer ciclo de la carrera del personal superior policial.
La ocasión fue propicia para que las autoridades hicieran entrega de insignias de la jerarquía de suboficiales cadetes ad-honorem a los cursantes del tercer año que obtuvieron las mejores calificaciones al término del término lectivo del año pasado; como también la distinción de premio al esfuerzo, la dedicación y la capacidad promoviendo al grado de suboficiales cadetes ad-honorem a aquellos estudiantes (siete) del segundo ciclo con las mejores calificaciones al término del ciclo lectivo anterior.


Un gran desafío


A su turno, el director del Instituto Superior de Formación Policial, comisario inspector Pedro Domingo Ayala, subrayó que el inicio de ciclo lectivo “significa para nosotros, una vez más, un gran desafío y una apuesta a la esperanza, que nos llena de entusiasmo y optimismo”.
Hizo referencia a que “como todos los años, la Escuela de Cadetes abre sus puertas para iniciar un nuevo ciclo académico, acto de suma trascendencia para nuestra vida institucional, porque estamos convencidos de que la base fundamental para brindar a la sociedad un servicio de seguridad eficiente, descansa en gran medida en el éxito que tenga nuestro instituto en la formación de los futuros oficiales”.
También marcó Ayala que “en este mundo actual, preparar a nuestros cadetes para su posterior desempeño en la sociedad, nos impone la necesidad de dotarlos de una formación integral y adecuada a los nuevos tiempos, que les permita desempeñarse profesionalmente a la altura de las exigencias y necesidades de la comunidad”, advirtiendo que “convivimos diariamente con múltiples y complejas situaciones de conflicto en las relaciones humanas que quebrantan la tranquilidad y amenazan la paz social”.
Abundó en este marco diciendo que “la institución policial redobla esfuerzos para optimizar la formación de sus oficiales, acompañando vigorosamente el modelo de provincia progresista y pujante que se puso en marcha de la mano de nuestros gobernantes”, y que “sentimos la necesidad de ser activos protagonistas de esta parte de la historia, brindando plena garantía de seguridad y tranquilidad a los que aceptaron el desafío de vivir, trabajar e invertir en nuestra tierra”.
Sostuvo asimismo que “interpretamos cabalmente las exigencias de estos tiempos, percibimos con claridad que policía desean nuestros comprovincianos, y desde la Escuela de Cadetes renovamos todos los días nuestro compromiso de enfrentar esta apasionante y difícil misión con toda la dedicación y responsabilidad de la que somos capaces, y la firme convicción de buscar resueltamente el nivel de excelencia que permita a la institución satisfacer plenamente esos requerimientos”.
Dejó en claro que “nuestra responsabilidad en la formación de los cadetes no se agota en la mera transmisión de conocimientos jurídicos y policiales, sino que se proyecta esencialmente a inculcarles valores y atributos de la personalidad que hagan del futuro oficial, un ser humano sensible, solidario, profundamente comprometido con su comunidad y plenamente consustanciado con su rol de verdadero servidor público”.
Finalmente, el comisario inspector Ayala expresó su agradecimiento al gobernador (Gildo) Insfrán “por transmitirnos constantemente los lineamientos políticos, institucionales y doctrinarios que debemos observar en el proceso de formación de los cadetes, y por su permanente ayuda y comprensión, reconocimiento que hizo extensivo al Comando Superior Policial, al cuerpo docente de la escuela y a la Comisión Civil Amigos de la Escuela de Cadetes”.

15-03-2006 | Cargada en Novedades - Fuente: Subsecretaría de Comunicación Social