Avanzan obras de la primera estación experimental del Chaco Semiárido del INTA en el oeste formoseño.

La instalación de una estación experimental del INTA en Ingeniero Juárez no solamente ratifica la articulación de acciones entre entes nacionales y provinciales sino que crea expectativas favorables para la productividad en esas apartadas regiones del territorio.

La nueva Estación Experimental Agropecuaria del INTA, cuya ejecución de las infraestructuras están en gran estado de avance a pocos kilómetros de Ingeniero Juárez, a 480 kilómetros al oeste de esta ciudad, una vez en marcha "posibilitará crear las condiciones para que en esa región del oeste exista tecnología productiva de punta".
Se explicó que se tratará de la primera estación experimental del Chaco Semiárido, instalada a pocos kilómetros antes de llegar desde esta ciudad a Ingeniero Juárez (a la vera de la ruta 81), y ratifica la visión del gobernador Insfrán en el sentido de que "el conocimiento es la herramienta esencial para promover los procesos de transformación".
"Es que hoy, para ser competitivos, hay que apelar a tecnologías que puedan ser eficiente en términos económicos pero también que tenga criterios de sustentabilidad ambiental con lo cual esta complementariedad de factores trabajadas desde el máximo organismo de tecnología del país sin dudas que favorecerá enormemente al desarrollo de la región", fue subrayado.

Chaco Semi-Árido

Esta novedosa experiencia en el denominado Chaco Seco viene a darle continuidad a una sucesión de obras, emprendimientos y medidas tomadas para transformar esas zonas que se habían caracterizado por la aridez de su suelo y las precariedades productivas, en uno de los polos de desarrollo regional.
Se trajo a cuento el comentario que hace una década la realizaban pobladores del extremo oeste en el sentido de que dependían de Salta en materia de frutos y hortalizas, no solamente por las limitaciones agro-ganaderas de la jurisdicción sino también por los problemas de integración causados por la falta de pavimento de la ruta 81".
"Hoy no solamente la ejecución de este modelo ideado y conducido por el gobernador Insfrán ha permitido la integración definitiva con esos territorios sino también crear las condiciones para que en esta región haya ruta pavimentada, agua y haya productividad, que haya vida", se expuso.
"Con la presencia del INTA en Juárez de aquí a un tiempo, se pasará a otra etapa diferente en esa zona cercana al límite con Salta ya que de modo articulado con los organismos técnicos de la provincia se podrán validar tecnologías y al mismo tiempo orientar a los productores sobre los métodos para un mejoramiento significativo de las herramientas útiles para habilitar tierras para la agricultura y la ganadería", se consignó finalmente.

Región transformada

Este centro regional ocupa una franja de la provincia de grandes transformaciones ocurridas, que hizo que se modifique los escenarios en los que se desenvuelve el sector y los sistemas agroalimentarios y agroindustriales.
Se generan nuevos desafíos, que debieran dar respuestas a nuevos y viejos problemas que afectan al sector, entre los cuales se pueden mencionar: Asegurar la inserción del mayor número de productores en el conjunto de la economía, minimizando riesgos de exclusión; posicionar al sector rural como dinamizador del crecimiento y desarrollo de las comunidades; generar mayor capital humano y social en el sector; apoyar el desarrollo de la competitividad sistémica; lograr una mayor organización productiva que permita la promoción de las cadenas de valor, en especial en las economías de carácter regional; mejorar la seguridad alimentaria de la población rural y urbana en condiciones sociales precarias e instalar un marco que permita gestionar la sustentabilidad de los recursos naturales y la gestión ambiental.
29-07-2013 | Cargada en Obras - Fuente: Subsecretaría de Comunicación Social