A unos 30 kilómetros al noreste de esta ciudad, en campos que pueden ser regados por el agua del río Paraguay, está prevista la radicación de inversores particulares que prevén poner en producción más de 10.000 hectáreas de arroz.
Se trata del proyecto arrocero La Emilia, por ejecutarse en el hasta ahora establecimiento ganadero que cuenta con una superficie de 18.360 hectáreas. El objetivo de los empresarios privados es crear un polo productivo de alta tecnología y ocupación de mano de obra local.
La audiencia pública para tratar esta iniciativa está prevista para el 10 de mayo por la mañana en la sede de la Casa de la Artesanía, en 25 de Mayo y San Martín de esta ciudad.
El grupo privado que impulsa este proyecto arrocero se denomina MSU, que inició sus actividades con la producción de 15.000 hectáreas de agricultura y 6500 cabezas de ganado en campos propios localizados en el sur de Santa Fe y centro norte de Buenos Aires. A partir de 1997, con la incorporación de Manuel Santos Uribelarrea (h.), comenzó a desarrollar un nuevo negocio de producción mediante el arrendamiento de campos de terceros.
Ello le permitió la diversificación y expansión en diferentes zonas geográficas, al punto de posicionar a MSU entre las principales empresas agropecuarias de Sudamérica.
La firma prevé la inversión de casi 46 millones de dólares y la creación de 134 nuevos puestos de trabajo directos tanto en la actividad primaria cuanto en la de acopio y secado de los granos.
Consideran que el emprendimiento contribuirá al mantenimiento y generación de 260 puestos de trabajo indirecto relacionados con los servicios de apoyo a la producción y con toda la actividad comercial y de servicios de la economía de la zona.
Se ha previsto a través del proyecto productivo contribuir a la formación de una cuenca arrocera en la zona a través de la construcción de un canal principal de conducción de aguas del río Paraguay con una capacidad superior a las necesidades del proyecto de La Emilia.
Posteriormente se instará un molino arrocero de dimensiones compatibles con los de una futura cuenca arrocera.
El subsecretario de Recursos Naturales y Ordenamiento y Calidad Ambiental, doctor Hugo Bay Cappello, está trabajando en la preparación de la audiencia pública para mediados de mayo, a fin de poner a consideración de toda la comunidad provincial el proyecto de gestión ambiental respectivo que permitirá articular las propuestas de desarrollo del proyecto arrocero con la protección del ambiente.
En el estudio del impacto ambiental se evaluaron las consecuencias para poder evitarlas o mitigarlas así como para optimizar los beneficios ambientales que ya han sido identificados.
Una de las medidas adoptadas en ese sentido es la creación de las Áreas de Protección Ambiental (APA) que ocupan una superficie de 7344 hectáreas, es decir un 40 % del predio, como una forma de compensación por las áreas a intervenir en los nuevos lotes agrícolas. Con ellas se pretende reforzar la red provincial de áreas protegidas.
El proyecto productivo prevé el cambio de uso de suelos de 11.016 hectáreas que incluyen tanto a las chacras arroceras cuanto a la superficie afectada para las obras de infraestructura.
Se encuentra allí una superficie de 796 hectáreas de bosques que tiene una enorme riqueza y biodiversidad según los estudios de vegetación, avifauna, anfibios, reptiles y mamíferos. Además los cultivos de arroz se ejecutarán en unas 10.000 hectáreas.
El proyecto contempla una estación de bombeo sobre el río Paraguay desde donde el agua será conducida a través de un canal de 15 kilómetros de longitud siguiendo la dirección Sureste-Noroeste, tras lo cual será derivada por una red de canales hacia los distintos sectores con los cultivares del arroz.
Esa superficie para la producción representa el 60 % del total que ocupa el establecimiento y se corresponde con lo establecido en la ley 1552 para este tipo de proyectos.
Que seguramente tendrá un impacto relevante para el desarrollo sustentable en la zona de corredores del programa de ordenamiento territorial de la provincia.
La audiencia pública para tratar esta iniciativa está prevista para el 10 de mayo por la mañana en la sede de la Casa de la Artesanía, en 25 de Mayo y San Martín de esta ciudad.
El grupo privado que impulsa este proyecto arrocero se denomina MSU, que inició sus actividades con la producción de 15.000 hectáreas de agricultura y 6500 cabezas de ganado en campos propios localizados en el sur de Santa Fe y centro norte de Buenos Aires. A partir de 1997, con la incorporación de Manuel Santos Uribelarrea (h.), comenzó a desarrollar un nuevo negocio de producción mediante el arrendamiento de campos de terceros.
Ello le permitió la diversificación y expansión en diferentes zonas geográficas, al punto de posicionar a MSU entre las principales empresas agropecuarias de Sudamérica.
La firma prevé la inversión de casi 46 millones de dólares y la creación de 134 nuevos puestos de trabajo directos tanto en la actividad primaria cuanto en la de acopio y secado de los granos.
Consideran que el emprendimiento contribuirá al mantenimiento y generación de 260 puestos de trabajo indirecto relacionados con los servicios de apoyo a la producción y con toda la actividad comercial y de servicios de la economía de la zona.
Se ha previsto a través del proyecto productivo contribuir a la formación de una cuenca arrocera en la zona a través de la construcción de un canal principal de conducción de aguas del río Paraguay con una capacidad superior a las necesidades del proyecto de La Emilia.
Posteriormente se instará un molino arrocero de dimensiones compatibles con los de una futura cuenca arrocera.
El subsecretario de Recursos Naturales y Ordenamiento y Calidad Ambiental, doctor Hugo Bay Cappello, está trabajando en la preparación de la audiencia pública para mediados de mayo, a fin de poner a consideración de toda la comunidad provincial el proyecto de gestión ambiental respectivo que permitirá articular las propuestas de desarrollo del proyecto arrocero con la protección del ambiente.
En el estudio del impacto ambiental se evaluaron las consecuencias para poder evitarlas o mitigarlas así como para optimizar los beneficios ambientales que ya han sido identificados.
Una de las medidas adoptadas en ese sentido es la creación de las Áreas de Protección Ambiental (APA) que ocupan una superficie de 7344 hectáreas, es decir un 40 % del predio, como una forma de compensación por las áreas a intervenir en los nuevos lotes agrícolas. Con ellas se pretende reforzar la red provincial de áreas protegidas.
El proyecto productivo prevé el cambio de uso de suelos de 11.016 hectáreas que incluyen tanto a las chacras arroceras cuanto a la superficie afectada para las obras de infraestructura.
Se encuentra allí una superficie de 796 hectáreas de bosques que tiene una enorme riqueza y biodiversidad según los estudios de vegetación, avifauna, anfibios, reptiles y mamíferos. Además los cultivos de arroz se ejecutarán en unas 10.000 hectáreas.
El proyecto contempla una estación de bombeo sobre el río Paraguay desde donde el agua será conducida a través de un canal de 15 kilómetros de longitud siguiendo la dirección Sureste-Noroeste, tras lo cual será derivada por una red de canales hacia los distintos sectores con los cultivares del arroz.
Esa superficie para la producción representa el 60 % del total que ocupa el establecimiento y se corresponde con lo establecido en la ley 1552 para este tipo de proyectos.
Que seguramente tendrá un impacto relevante para el desarrollo sustentable en la zona de corredores del programa de ordenamiento territorial de la provincia.