Luego de varios años de investigación y estudio, después de las celebraciones de fin de año será presentado en sociedad el primer tomo del libro "Historia general de Formosa", desde sus orígenes ancestrales hasta la etapa prefundacional.
La obra literaria es del abogado y empresario periodístico Marcos Raúl Molares.
"No escribí una obra excelsa. Pero sí lo hice con pasión y con un amor desenfrenado por esta tierra que me dio un hijo y un medio de vida", revela para consignar que los antecedentes, además de acopiarlos en el medio, los encontró en repositorios, bibliotecas, archivos de otras provincias y países vecinos.
"Esta maravillosa provincia tiene una historia fascinante, no solo desde 1879 en adelante sino para atrás, desde el siglo XVII o quizá antes; por eso cuando en este tomo hablo del territorio del Chaco Central, digo directamente "región formoseña", "costas formoseñas", "parajes formoseños": porque contar lo que sucedió en estos territorios en aquellos siglos, es contar la historia de Formosa, no la historia del "Gran Chaco", opina.
Molares, oriundo de Chajarí, Entre Ríos, quien eligió Formosa como destino de vida, es renuente a escuchar que se cuenten historias sin identificar la jurisdicción formoseña, dado que Formosa es tal desde tiempos inmemoriales, aunque admite que se tuvo que esperar mucho tiempo hasta que en el siglo XIX se le defina un nombre: "Formoso", "Fermosa" o "Formosa".
"Si cuento la historia desde ese sesgo, es debido a que estoy convencido que esta provincia es milenaria, ancestral y exacerbadamente fascinante", consigna finalmente Molares.
"No escribí una obra excelsa. Pero sí lo hice con pasión y con un amor desenfrenado por esta tierra que me dio un hijo y un medio de vida", revela para consignar que los antecedentes, además de acopiarlos en el medio, los encontró en repositorios, bibliotecas, archivos de otras provincias y países vecinos.
"Esta maravillosa provincia tiene una historia fascinante, no solo desde 1879 en adelante sino para atrás, desde el siglo XVII o quizá antes; por eso cuando en este tomo hablo del territorio del Chaco Central, digo directamente "región formoseña", "costas formoseñas", "parajes formoseños": porque contar lo que sucedió en estos territorios en aquellos siglos, es contar la historia de Formosa, no la historia del "Gran Chaco", opina.
Molares, oriundo de Chajarí, Entre Ríos, quien eligió Formosa como destino de vida, es renuente a escuchar que se cuenten historias sin identificar la jurisdicción formoseña, dado que Formosa es tal desde tiempos inmemoriales, aunque admite que se tuvo que esperar mucho tiempo hasta que en el siglo XIX se le defina un nombre: "Formoso", "Fermosa" o "Formosa".
"Si cuento la historia desde ese sesgo, es debido a que estoy convencido que esta provincia es milenaria, ancestral y exacerbadamente fascinante", consigna finalmente Molares.