Advierten sobre la diabetes, una enfermedad que afecta a muchos.

Según datos estadísticos comprobados, se estima que la diabetes afecta a más de 3.000.000 de personas en nuestro país y dado que por varios años permanece silenciosa, aproximadamente la mitad de quienes la padecen, desconocen su condición.

La diabetes es una enfermedad crónica que se caracteriza por presentar niveles aumentados de azúcar en sangre (glucemia). Desde el ministerio de Desarrollo Humano se expuso acerca de que la causa principal que provoca esta enfermedad es una alteración en la producción o el funcionamiento de la insulina, hormona fabricada por el páncreas, que funciona como una llave facilitando el pasaje de la glucosa desde la sangre a los órganos y tejidos.
Existen varios tipos de diabetes. En la diabetes tipo 1 no hay producción de insulina por lo tanto el organismo no cuenta con la llave que permita abrir la puerta de entrada de los azúcares a los tejidos. Comienza generalmente antes de los 30 años y su tratamiento requiere seguir un plan de alimentación adecuado y la aplicación de inyecciones de insulina. La diabetes tipo 2 es la forma más común. Si bien suele comenzar después de los 40 años, la enfermedad se observa en forma cada vez más frecuente en jóvenes y adolescentes. Este tipo de diabetes suele ser consecuencia del sobrepeso, la obesidad, la mala alimentación y el sedentarismo. Si bien existe producción de insulina la misma actúa de forma inadecuada. "La llave no encaja en la cerradura" de modo que el pasaje de la glucosa a los tejidos, se ve dificultado. En consecuencia, a través de cualquiera de los dos mecanismos, la glucosa se acumula en la sangre y los órganos se quedan sin combustible para su funcionamiento. El aumento del azúcar en sangre por encima de valores normales se denomina hiperglucemia. La hiperglucemia sostenida y sin tratamiento puede dar lugar a complicaciones en diferentes órganos, como los ojos, riñones, corazón, arterias y pies, entre otras.
La diabetes puede presentarse por varios años de manera silenciosa. Esto significa que a veces no presenta síntomas, pero con el tiempo pueden aparecer aquellos factores como: la tendencia a infecciones en la piel, aumento de la sed, pérdida de peso, aumento del apetito y la producción de orina y sequedad en la boca.

Riesgos

Existen algunas situaciones que aumentan el riesgo a desarrollar la enfermedad, como ser: Tener más de 45 años, padres o hermanos con diabetes, obesidad o sobrepeso, hipertensión arterial, enfermedad cardiovascular, colesterol elevado, diabetes durante el embarazo, mujeres con hijos nacidos con peso mayor a 4,5 kilos.
Se recomienda que si tiene alguno de estos síntomas o características, acérquese al centro de salud más cercano para realizar un control.
Para saber si una persona padece esta enfermedad se recurrirá a un profesional médico que realizara el diagnostico mediante la determinación de glucemia en ayunas en sangre venosa. La determinación en sangre capilar (punción en la yema del dedo) es útil para la supervisión del tratamiento en las personas que reciben insulina, pero no se recomienda como método diagnóstico.

Prevención

La cartera de de Desarrollo Humano destaca que la diabetes se puede prevenir tomando en cuenta una serie de factores esenciales como ser:
Aumentar el consumo de frutas y hortalizas, evitar los alimentos con alto contenido en sodio (fiambres, embutidos, aderezos, productos de copetín, quesos, etc.), cocinar sin agregar sal. Reemplazarla por perejil, albahaca, tomillo, romero y otros condimentos, realizar seis comidas diarias: cuatro principales y dos colaciones, consumir carnes rojas o blancas (pollo o pescado) no más de cinco veces por semana, cuidar el cuerpo y evitar el sobrepeso, sumar al menos 30 minutos diarios de actividad física de manera continua o acumulada: usar escaleras, caminar, bailar, etc., y no fumar. Incluso pocos cigarrillos por día son muy dañinos para las arterias, en especial para las personas con diabetes.
Pero también es necesario tener en cuenta que las personas con diabetes tienen mayor riesgo de presentar niveles elevados de colesterol, hipertensión arterial y enfermedades cardiovasculares. La prevención y control de estos factores son un aspecto fundamental del tratamiento de esta enfermedad.

Recordar

Si la persona tiene diabetes, debe recordar constantemente a su médico los siguientes aspectos: Pesarlo, medirlo y tomarle la presión, examinarle los pies, calcular su riesgo cardiovascular global al menos una vez al año, control con oculista y odontólogo, consulte si debe recibir aspirina.
El tratamiento para esta enfermedad está basado en 4 pilares importantes:
Plan de alimentación saludable, actividad física, tratamiento farmacológico: medicación vía oral o inyecciones de insulina, y otros dependiendo de los factores de riesgo asociados, educación diabetológica: Incorporar conocimientos acerca de la enfermedad y las estrategias para los cuidados cotidianos es un componente esencial del tratamiento de la diabetes y otras enfermedades crónicas.
23-07-2012 | Cargada en Salud - Fuente: Subsecretaría de Comunicación Social