En el marco de un sencillo acto realizado ayer en la comunidad aborigen de Lote 5, jurisdicción de Pozo del Tigre, el gobierno provincial efectivizó la entrega de una docena de nuevas viviendas, con lo cual se cuantifican en más de un centenar las flamantes casas cedidas, además de las ya reparadas.
De esta manera, uno de los aspectos centrales del proceso de reconstrucción total de la zona afectada por el violento temporal continua progresando dentro de lo planificado.
El administrador del Instituto Provincial de la Vivienda, Daniel Malich y la subsecretaria de Obras y Servicios Públicos, María Teresa González, estuvieron en la comunidad aborigen de Lote 5, situada a unos seis kilómetros de la ruta 81, compartiendo con el cacique de la comunidad, Silvio Amarilla y las familias beneficiadas, esta ceremonia.
Tras las expresiones de agradecimiento y reconocimiento a las obras que el estado provincial ejecuta en esa y otras comunidades aborígenes de la zona, severamente castigada por un violento temporal, del cacique Amarilla, quien además expuso que si bien la casas es muy importante, no menos es el valor de los centros de salud, escuelas y otras obras que se ejecutan en toda la región.
Luego fue uno de los que junto a los funcionarios participara del acto donde se materializó la entrega de las viviendas y las correspondientes documentaciones a sus propietarios, todos ellos juntos a sus hijos, exteriorizaron su felicidad de "acceder al hogar propio".
En el caso de las viviendas para los aborígenes, estas tienen un prototipo de dos dormitorios y otras características propias que respetan sus pautas culturales. Se estima que en dos semanas más se entregaran un nuevo e importante grupo de casas en las comunidades de Lote 21, y con posterioridad una veintena en la comunidad indígena de Laka Wichí,
Malich precisó que se cuentan en 106 las casas construidas en la zona urbana del lugar y 234 en las cuatro diferentes comunidades aborígenes (Qompi, Laka Wichí, Lote 21 y Lote 5), a lo que se deben sumar tareas importantes en 405 casas que sufrieron daños de diferentes grados, algunas de destrucción total que merecieron una intervención integral y otras con deterioros parciales donde se trabajo a fin de hacerlas nuevamente habitables.
Asimismo, progresan las obras de pavimentación; recuperación de infraestructura escolar y sanitaria, construcción de edificios públicos dañados por la catástrofe natural, entre muchas otras.
De esta manera todo lo planificado para la "refundación" de Pozo del Tigre avanza en varios frentes. Y para ello, los trabajos van desde los que se corresponden a las nuevas viviendas, tareas diversas en sectores donde se erigen nuevos edificios públicos como escuelas, salones de usos múltiples, centros de salud, hogar de ancianos, líneas eléctricas, pavimentación de calles, espacios públicos, que le están dando una fisonomía distintiva y moderna a la localidad.
El administrador del Instituto Provincial de la Vivienda, Daniel Malich y la subsecretaria de Obras y Servicios Públicos, María Teresa González, estuvieron en la comunidad aborigen de Lote 5, situada a unos seis kilómetros de la ruta 81, compartiendo con el cacique de la comunidad, Silvio Amarilla y las familias beneficiadas, esta ceremonia.
Tras las expresiones de agradecimiento y reconocimiento a las obras que el estado provincial ejecuta en esa y otras comunidades aborígenes de la zona, severamente castigada por un violento temporal, del cacique Amarilla, quien además expuso que si bien la casas es muy importante, no menos es el valor de los centros de salud, escuelas y otras obras que se ejecutan en toda la región.
Luego fue uno de los que junto a los funcionarios participara del acto donde se materializó la entrega de las viviendas y las correspondientes documentaciones a sus propietarios, todos ellos juntos a sus hijos, exteriorizaron su felicidad de "acceder al hogar propio".
En el caso de las viviendas para los aborígenes, estas tienen un prototipo de dos dormitorios y otras características propias que respetan sus pautas culturales. Se estima que en dos semanas más se entregaran un nuevo e importante grupo de casas en las comunidades de Lote 21, y con posterioridad una veintena en la comunidad indígena de Laka Wichí,
Malich precisó que se cuentan en 106 las casas construidas en la zona urbana del lugar y 234 en las cuatro diferentes comunidades aborígenes (Qompi, Laka Wichí, Lote 21 y Lote 5), a lo que se deben sumar tareas importantes en 405 casas que sufrieron daños de diferentes grados, algunas de destrucción total que merecieron una intervención integral y otras con deterioros parciales donde se trabajo a fin de hacerlas nuevamente habitables.
Asimismo, progresan las obras de pavimentación; recuperación de infraestructura escolar y sanitaria, construcción de edificios públicos dañados por la catástrofe natural, entre muchas otras.
De esta manera todo lo planificado para la "refundación" de Pozo del Tigre avanza en varios frentes. Y para ello, los trabajos van desde los que se corresponden a las nuevas viviendas, tareas diversas en sectores donde se erigen nuevos edificios públicos como escuelas, salones de usos múltiples, centros de salud, hogar de ancianos, líneas eléctricas, pavimentación de calles, espacios públicos, que le están dando una fisonomía distintiva y moderna a la localidad.