La actual infraestructura edilicia y sus instalaciones actuales resultan ya inadecuadas y con espacios reducidos que perjudican a programas de actividades para la capacitación y adquisición de habilidades orientadas a la reinserción de los detenidos en la comunidad.
En la sede de la Defensoría del Pueblo se recibió una comunicación oficial suscripta por el actual ministro de Justicia y Derechos Humanos, Julio Alak, conjuntamente con un informe dirigido a la subsecretaria de Infraestructura Penitenciara, donde se brindan detalles inherentes a la reubicación de la unidad carcelaria U-10.
En dicho documento, se describe que los días 12 y 13 de octubre del año 2011, una comitiva especial realizó una vista a la cárcel federal de Formosa U10 y su Anexo Rural con el propósito de evaluar las actuales condiciones de habitabilidad de los internos alojados en el establecimiento como así también las condiciones de trabajo del personal penitenciario.
Se menciona que la U-10 fue habilitada en el año 1897 y que tiene actualmente una capacidad de alojamiento de 140 plazas que en su gran mayoría es de condición colectiva. A simple vista se pudo observar que el establecimiento por ser de fines del siglo XIX se encuentra en buen estado de conservación, sin embargo la infraestructura edilicia y sus instalaciones resultan inadecuadas y con espacios reducidos que dificultan el desarrollo de programas junto a actividades que faciliten la capacitación y adquisición de habilidades orientadas a la reinserción de los detenidos en la comunidad.
Se señaló también que respecto a las condiciones de alojamiento, los pabellones no se corresponden a lo que determinan las normas internacionales y la legislación nacional respecto a las ventajas que poseen los sistemas unicelulares por sobre los pabellones comunes.
En este contexto, el área de Infraestructura Penitenciaria tiene como uno de sus objetivos reemplazar unidades antiguas y obsoletas permitiendo una renovación del parque edilicio tal es el traslado del Complejo Penitenciario Federal CABA a la localidad de Agote y el caso de la U10 de Formosa. El predio tentativo para un futuro traslado se encuentra distante a 13 kilómetros de la ciudad con acceso pavimentado sobre la ruta Nacional Nº 81 en proximidades de la Central Transformadora de Energía Eléctrica.
De los resultados evaluados se concluye en que se avanzará en la planificación arquitectónica para efectivizar el traslado de la U10.
Además también se realizó una visita al anexo de la U10 distante a unos 18 kilómetros donde funciona un Centro de Producción y Capacitación Laboral que es totalmente abierto en el ejercicio de la autodisciplina, allí se realizan capacitaciones en cría de hacienda porcina, bovina y caprina, avicultura, apicultura y aserradero.
El Defensor José Leonardo Gialluca, sostuvo que el Organismo de la Constitución a partir de esta última evaluación, trabajará para que la nueva obra de la U10 se concrete en el menor de los plazos, respetando las licitaciones y ejecuciones del Servicio Penitenciario Federal, mas allá de las readecuaciones y de las mejoras que se concretaran al actual alojamiento puesto que continuaremos bregando en el concepto de que la actual ubicación de la U10 no es el adecuado para la sociedad formoseña y menos aun para los internos en donde nadie puede cumplir con los preceptos de que las cárceles son para resocialización y no para castigo de las personas privadas de su libertad.
En dicho documento, se describe que los días 12 y 13 de octubre del año 2011, una comitiva especial realizó una vista a la cárcel federal de Formosa U10 y su Anexo Rural con el propósito de evaluar las actuales condiciones de habitabilidad de los internos alojados en el establecimiento como así también las condiciones de trabajo del personal penitenciario.
Se menciona que la U-10 fue habilitada en el año 1897 y que tiene actualmente una capacidad de alojamiento de 140 plazas que en su gran mayoría es de condición colectiva. A simple vista se pudo observar que el establecimiento por ser de fines del siglo XIX se encuentra en buen estado de conservación, sin embargo la infraestructura edilicia y sus instalaciones resultan inadecuadas y con espacios reducidos que dificultan el desarrollo de programas junto a actividades que faciliten la capacitación y adquisición de habilidades orientadas a la reinserción de los detenidos en la comunidad.
Se señaló también que respecto a las condiciones de alojamiento, los pabellones no se corresponden a lo que determinan las normas internacionales y la legislación nacional respecto a las ventajas que poseen los sistemas unicelulares por sobre los pabellones comunes.
En este contexto, el área de Infraestructura Penitenciaria tiene como uno de sus objetivos reemplazar unidades antiguas y obsoletas permitiendo una renovación del parque edilicio tal es el traslado del Complejo Penitenciario Federal CABA a la localidad de Agote y el caso de la U10 de Formosa. El predio tentativo para un futuro traslado se encuentra distante a 13 kilómetros de la ciudad con acceso pavimentado sobre la ruta Nacional Nº 81 en proximidades de la Central Transformadora de Energía Eléctrica.
De los resultados evaluados se concluye en que se avanzará en la planificación arquitectónica para efectivizar el traslado de la U10.
Además también se realizó una visita al anexo de la U10 distante a unos 18 kilómetros donde funciona un Centro de Producción y Capacitación Laboral que es totalmente abierto en el ejercicio de la autodisciplina, allí se realizan capacitaciones en cría de hacienda porcina, bovina y caprina, avicultura, apicultura y aserradero.
El Defensor José Leonardo Gialluca, sostuvo que el Organismo de la Constitución a partir de esta última evaluación, trabajará para que la nueva obra de la U10 se concrete en el menor de los plazos, respetando las licitaciones y ejecuciones del Servicio Penitenciario Federal, mas allá de las readecuaciones y de las mejoras que se concretaran al actual alojamiento puesto que continuaremos bregando en el concepto de que la actual ubicación de la U10 no es el adecuado para la sociedad formoseña y menos aun para los internos en donde nadie puede cumplir con los preceptos de que las cárceles son para resocialización y no para castigo de las personas privadas de su libertad.