Se puntualizó desde el CEDEVA que "el principal cliente nuestro es el pequeño productor y en eso el ministerio de la producción y Ambiente tiene algunas líneas de subsidios y de financiamiento que hemos tratado de coordinarlas con el trabajo que se tiene que llevar a cabo a campo".
Luego de la difusión de noticias que dan cuenta de la progresiva buena aceptación de la fruta formoseña en el ámbito nacional, el coordinador ejecutivo de los Centros de Validación de Tecnologías Agropecuarias-CEDEVAS- dijo que la provincia se apresta a comenzar el nuevo ciclo con el convencimiento acerca de lo que se tiene que hacer y contando con metodologías para hacer que el pequeño productor lo pueda llevar a cabo en su propio campo.
"Junto con el ministerio de la Producción y Ambiente y con la colaboración de la metalúrgica formoseña Tecnoga, que está aportando con la fabricación de herramientas y maquinarias que facilitan la tarea, hay muchas posibilidades de apoyar al pequeño productor que es nuestro cliente porque los más grandes tienen capacidad financiera como para hacerse un pequeño galpón de empaque para no golpear sus frutas y ellos van a ganar en forma directa porque de ese modo se las van a pagar mucho más", expuso.
"Pero aquí el principal cliente nuestro es el pequeño productor y en eso el ministerio de la producción y Ambiente tiene algunas líneas de subsidios y de financiamiento que hemos tratado de coordinarlas con el trabajo que se tiene que llevar a cabo a campo", puntualizó.
Balonga reconoce que en el tema del día es que se carece de la suficiente cantidad de técnicos en territorio como para transferir rápidamente, razón por lo que lo estamos haciendo en forma lenta pero sin pausa, armando los grupos de calidad como para bajarles toda la información y que se haga la dispersión.
"La idea es montar tres o cuatro galpones de empaque en territorio para que productores de la zona que estén dentro del grupo de calidad puedan tener ese servicio que redundará en un precio final mayor", expuso.
Comentó que el último censo reveló la existencia de unas 500 familias de pequeños productores bananeros que para comenzar como bananeros deben disponer básicamente de dos hectáreas y realizar las plantaciones en los marcos que sugiere CEDEVAS.
Se utilizan materiales de la zona bananera que son muy buenos y que ya están adaptados a ella y que ofrece una excelente calidad de fruta terminal y de lo que se está seleccionando en el centro de Misión Tacaaglé ya se está en proceso de hacer una marcación para decirlos correctamente en territorio y comenzar a multiplicarlos en el laboratorio donde en la actualidad ya se trabaja con dos variedades que son las mejores halladas y los testigos de referencia que se trajeron desde Israel.
Buenos precios
Ante las informaciones que dieron cuenta de la ubicación de Formosa al tope de las provincias proveedores de banana en el mercado nacional, se explicó que se ha dado una situación muy particular ya que algunos grandes importadores de banana de Ecuador por una cuestión de precios definidos no pudieron ingresar cerca de 700 contenedores, algunos en tránsito y otros en finca que habían contratado.
Se hizo notar que ese trance generó, en algún momento, un "bache" muy fuerte a lo que se le sumó el efecto dañino de las heladas en Salta y Jujuy, junto con Formosa las productoras principales del país, por lo que hubo poca presencia de bananas de la zona del NOA.
"Eso permitió que la buena banana formoseña obtuviese precios muy altos y si bien es cierto no accedió tanto a Buenos Aires sí fue importante su presencia en Tucumán y Mendoza y ese espacio de falta de oferta nos permitió vender algunos pequeños cargamentos nuestros que le hizo abrir los ojos a los consumidores", refirió.
"Es que se encontraron con una banana que antes no se esperaba de Formosa y que ahora se ha presentado con altísima calidad, sobre todo aquella que se desarrollo con las indicaciones del CEDEVA sobre manejo de cachos y pos cosecha que permitieron lograr una calidad muy interesante que permitió colocar, promedio, a poco más de 10 pesos el cajón con lo mejor que estaba saliendo de la zona", precisó.
El titular de CEDEVAS manifestó que esa transacción puso de manifiesto, además, que existe un mercado que acepta muy bien el producto local y su calidad y que, consecuentemente, está dispuesto a pagarlo bien.
"Junto con el ministerio de la Producción y Ambiente y con la colaboración de la metalúrgica formoseña Tecnoga, que está aportando con la fabricación de herramientas y maquinarias que facilitan la tarea, hay muchas posibilidades de apoyar al pequeño productor que es nuestro cliente porque los más grandes tienen capacidad financiera como para hacerse un pequeño galpón de empaque para no golpear sus frutas y ellos van a ganar en forma directa porque de ese modo se las van a pagar mucho más", expuso.
"Pero aquí el principal cliente nuestro es el pequeño productor y en eso el ministerio de la producción y Ambiente tiene algunas líneas de subsidios y de financiamiento que hemos tratado de coordinarlas con el trabajo que se tiene que llevar a cabo a campo", puntualizó.
Balonga reconoce que en el tema del día es que se carece de la suficiente cantidad de técnicos en territorio como para transferir rápidamente, razón por lo que lo estamos haciendo en forma lenta pero sin pausa, armando los grupos de calidad como para bajarles toda la información y que se haga la dispersión.
"La idea es montar tres o cuatro galpones de empaque en territorio para que productores de la zona que estén dentro del grupo de calidad puedan tener ese servicio que redundará en un precio final mayor", expuso.
Comentó que el último censo reveló la existencia de unas 500 familias de pequeños productores bananeros que para comenzar como bananeros deben disponer básicamente de dos hectáreas y realizar las plantaciones en los marcos que sugiere CEDEVAS.
Se utilizan materiales de la zona bananera que son muy buenos y que ya están adaptados a ella y que ofrece una excelente calidad de fruta terminal y de lo que se está seleccionando en el centro de Misión Tacaaglé ya se está en proceso de hacer una marcación para decirlos correctamente en territorio y comenzar a multiplicarlos en el laboratorio donde en la actualidad ya se trabaja con dos variedades que son las mejores halladas y los testigos de referencia que se trajeron desde Israel.
Buenos precios
Ante las informaciones que dieron cuenta de la ubicación de Formosa al tope de las provincias proveedores de banana en el mercado nacional, se explicó que se ha dado una situación muy particular ya que algunos grandes importadores de banana de Ecuador por una cuestión de precios definidos no pudieron ingresar cerca de 700 contenedores, algunos en tránsito y otros en finca que habían contratado.
Se hizo notar que ese trance generó, en algún momento, un "bache" muy fuerte a lo que se le sumó el efecto dañino de las heladas en Salta y Jujuy, junto con Formosa las productoras principales del país, por lo que hubo poca presencia de bananas de la zona del NOA.
"Eso permitió que la buena banana formoseña obtuviese precios muy altos y si bien es cierto no accedió tanto a Buenos Aires sí fue importante su presencia en Tucumán y Mendoza y ese espacio de falta de oferta nos permitió vender algunos pequeños cargamentos nuestros que le hizo abrir los ojos a los consumidores", refirió.
"Es que se encontraron con una banana que antes no se esperaba de Formosa y que ahora se ha presentado con altísima calidad, sobre todo aquella que se desarrollo con las indicaciones del CEDEVA sobre manejo de cachos y pos cosecha que permitieron lograr una calidad muy interesante que permitió colocar, promedio, a poco más de 10 pesos el cajón con lo mejor que estaba saliendo de la zona", precisó.
El titular de CEDEVAS manifestó que esa transacción puso de manifiesto, además, que existe un mercado que acepta muy bien el producto local y su calidad y que, consecuentemente, está dispuesto a pagarlo bien.