Formosa es uno de los estados adherentes al nuevo acuerdo Federal de los Hidrocarburos.

El ministro de Economía provincial estuvo en la reunión de gobernadores de OFHEPI llevada a cabo en el Hotel Sheraton Libertador de la Capital Federal en donde se firmó el denominado Acuerdo Federal de Hidrocarburos.

El ministro de Economía, doctor Jorge Ibáñez, representó a Formosa -en razón de la licencia médica del doctor Gildo Insfrán- de la reunión realizada en la Capital Federal de la que participaron representantes de las provincias, la nación y gremios que representan a los trabajadores del sector y que integran la Organización Federal de Estados Productores de Hidrocarburos (OFHEPI).
Todos ellos, ante la presencia del ministro de Planificación Federal, arquitecto Julio De Vido y del ministro de Economía, Hernán Lorenzino, los gobernadores de las provincias petroleras y los gremios que representan a los trabajadores del sector firmaron el denominado Acuerdo Federal de Hidrocarburos.
El encuentro se llevó a cabo en el Hotel Sheraton Libertador y contó, además, con la presencia del secretario de Energía, Daniel Cameron; el secretario de Coordinación del ministerio de Planificación Roberto Baratta y el secretario de Política Económica, Axel Kicillof.
Dijo Ibáñez que tanto los funcionarios nacionales cuanto los gobernadores provinciales lo consultaron sobre la salud del doctor Insfrán y le pidieron que le transmitieran sus deseos de pronto restablecimiento.
"Además -subrayó- durante el encuentro todos manifestamos estar consustanciados con el espíritu federal de la política de estado para el sector de hidrocarburos que aplica la presidenta de la Nación, doctora Cristina Fernández de Kirchner".
En el documento, de un total de 13 páginas, se señala que es necesario que las provincias y el Estado nacional trabajen de manera coordinada en favor del "resguardo y aplicación de una política de Estado para el sector de hidrocarburos".
La misma deberá propender al autoabastecimiento, la máxima producción de los yacimientos bajo principios estrictos de explotación racional y sostenimiento del horizonte de reservas que permitan el desarrollo sustentable de la actividad.
También alude a la caída, en torno al 20 por ciento, de la producción de petróleo y gas de los últimos diez años.
En este marco citan el desempeño de YPF Repsol que en ese lapso entre perdió entre 30 y 35 por ciento en materia de producción de crudo y más del 40 por ciento en gas, entre otras cuestiones.
"Además de fijar nuestra posición a través de 15 puntos- informó Ibáñez-se destacó que el fruto de este esfuerzo y compromiso plasmado en el Acuerdo Federal tendrá como único beneficiario al conjunto del pueblo argentino con el objeto inmediato de alcanzar una mejor calidad de vida con inclusión sostenida a través del trabajo digno, haciendo realidad un proceso de movilidad social ascendente en las distintas provincias argentinas".

Los quince puntos

A continuación se transcribe los artículos que conforman el acuerdo:
1) Fijar como Política de Estado en materia de hidrocarburos el autoabastecimiento de petróleo y gas mediante la aplicación del criterio de máximo desarrollo de las Cuencas, a través de métodos y procedimientos convencionales y no convencionales de producción, haciendo sustentable el desarrollo armónico de los yacimientos.
2) Exigir a las empresas concesionarias elevar los flujos de inversión en exploración compatible con una reposición adecuada de reservas, como a un aumento al máximo de producción sostenible, lo cual incrementará la actividad de servicios complementarios y el empleo directo e indirecto, y colaborará a mantener la paz social.
3)Aplicar las medidas contempladas en la legislación vigente, para verificar que los concesionarios cumplan con el principio de explorar la totalidad de los permisos de exploración y concesiones de explotación otorgados en cada una de las Cuencas, con el objeto de incrementar el horizonte de reservas de petróleo y gas.
4) Aplicar las herramientas legales vigentes para proceder a la reversión inmediata de permisos de exploración o concesiones de explotación o porciones parciales, en donde se comprueben procesos de desinversión, inversión escasa o subinversión por parte del permisionario o concesionario, asociado a una caída manifiesta e injustificada de producción o de reservas de hidrocarburos.
5) Incentivar la participación de terceras empresas en zonas de menor interés o donde la participación de estas mejoren la economía de la exploración o explotación del área, preferentemente empresas públicas provinciales y nacionales, actuando por sí mismas o asociadas, en los procesos de producción de yacimientos de petróleo y gas, a fin de maximizar la misma y lograr mayor porción de renta pero mejorando su redistribución primaria.
6) Ejercer de manera estricta el control y monitoreo ambiental de los yacimientos y cada una de las actividades asociadas a la exploración, explotación, industrialización y comercialización de hidrocarburos líquidos y gaseosos, ya sea en el ámbito de la jurisdicción provincial y/o nacional.
7) Para maximizar la producción sustentable de hidrocarburos, los planes de inversiones deben contener las metas de volúmenes de producción por yacimiento, ya sean convencionales o no convencionales, los equipos perforadores involucrados y compatibles con las perforaciones nuevas necesarias y las operaciones de mantenimiento sobre las pozos existentes para el logro de esos objetivos, como así también el personal involucrado, de manera tal que pueda realizarse por parte de las Autoridades de Aplicación jurisdiccionales un seguimiento concreto del nivel de actividad de los actores involucrados.
8) Para el fiel cumplimiento de los expresado en el articulo 7º, los Estados Federales y el Estado Nacional procederán a acelerar los procesos de medición de manera tal que la totalidad de la producción de hidrocarburos pueda ser controlada en tiempo real, por las Autoridades de Aplicación de ambas jurisdicciones.
9) Dar especial preferencia a la incorporación de nuevos recursos humanos locales de cada provincia en la que se desarrollan los yacimientos, como así también la contratación de empresas locales de bienes y servicios, participar activamente con la Nación y las Provincias en la capacitación y preparación de personal necesario para el desarrollo en establecimientos universitarios, técnicos y de formación en los distintos oficios imprescindibles para el logro propuestos en este acuerdo.
10) En un plazo de quince días, las provincias establecerán y comunicarán las inversiones mínimas necesarias para cumplir con las metas que maximicen los volúmenes de producción sustentable por yacimiento, precisando el equipamiento y personal necesario para alcanzar dicho objetivo.
11) Fijar como principio ordenador la sustitución de importaciones de hidrocarburos, con el fin de tener siempre como objetivo la máxima producción sustentable por yacimiento, mediante el uso de técnicas primarias, secundarias, terciarias o el desarrollo de hidrocarburos no convencionales.
12) Requerir que las empresas refinadoras compartan los sobrecostos en que debe incurrir el Estado Nacional por importación de combustibles para abastecer adecuadamente el Mercado Interno, ya que la responsabilidad del abastecimiento en el mercado de combustibles, está en cabeza de los Refinadores en la justa proporción de su participación en el mismo.
13) Exigir a las empresas refinadoras un esquema armónico, equitativo y no discriminatorio de distribución y comercialización de combustibles y derivados, en función de la real demanda de los mismos en cada una de las jurisdicciones provinciales.
14) Realizar por parte de las empresas operadoras y refinadoras las inversiones necesarias, con el objeto de aumentar las capacidades de refinación de las plantas existentes, a la par de evaluar en el corto plazo la ejecución de plantas refinadoras de crudo de tipo modular ampliables en concordancia a los niveles de máxima producción antes requerida en cada uno de los yacimientos.
15) Exigimos que los beneficios impositivos otorgados por el Estado Nacional y los Estados Provinciales en la provisión de combustibles a determinadas regiones lleguen de manera integral a quienes están dirigidos, es decir los consumidores y no sean capturados como renta por parte de las empresas refinadoras o cualquiera de los participantes de la cadena de distribución.
11-02-2012 | Cargada en Noticias - Fuente: Subsecretaría de Comunicación Social